Rugido de Leon y Mordedura de serpiente

"Asi es como te amo a ti"

"Amor" es la razón que Remus ha usado durante toda su explicación para Sirius, mentirle por amor, manipularlo por amor y más cosas, Sirius simplemente lo observa en silencio porque no puede creer lo que escucha. Su enojo es grande, no dirá que no, James y Remus me habían mentido pero el mayor de los Black sabe que no puede ser tan hipócrita al enojarse porque él igual les había mentido a ellos, por mucho tiempo para ser sincero.

— ¿pensabas decírmelo?

La mirada de Remus busca de forma rápida la de Sirius, sabe que no puede decirle "Si, Sirius, te lo iba a decir" porque el hombre lobo sabe que eso sería seguir mintiéndole, sabe que Sirius sabía que le mentía y eso solo traería más problemas.

— ¿Tu pensabas decírmelo?

— No.

La sinceridad de Sirius fue un golpe duro para Remus, le estaba confirmando algo que ambos sabían desde que empezaron esa conversación, ambos sabían que la respuesta a sus preguntas era un "No", más Lupin no esperaba que Sirius se lo confirmara así como así.

Ambos se miran como si se estuvieran viendo por primera vez en sus vidas, como si un extraño estuviera frente a ellos y no la pareja de casi un año o peor aún, no como si frente a ellos tuvieran a uno de sus mejores amigos.

— Remus, lo siento.

De todo lo que Remus esperaba de esa conversación, una disculpas no era lo que estaba en su mente, Sirius esta disculpándose con él pero no entiende el motivo por el cual este lo hace.

— ¿Que?

— Lamento haberte mentido sobre mis sentimientos, lamento haberte ilusionado y sobre todo, lamento si te lastime y te sigo lastimando, lo siento. Estuve mal, realmente estuve mal, creí que podría amarte, creí que podría borrar a Severus de mi cabeza pero no fue así. No te use, no quiero que creas que te use porque no es así, te quiero mucho Remus, eres mi amigo y creí que podría llegar a enamorarme de ti, no por lastima o algo así, no creas eso ni por un segundo.

— ¿Por qué, Sirius?

— Porque soy un egoísta de mierda.

— Yo te amo, Sirius.

— y yo a ti pero no como deseas que lo haga, Remus.

El castaño asiente sin saber que decir, sabe que debe disculparse pero no sabe cómo empezar.

Por otro lado James Potter está sentado junto a Severus Snape en la biblioteca, junto a él ésta Regulus, Lucius, Narcissa y Lily, James realmente se siente fuera de lugar pero las serpientes no lo dejan salir para irse a entrenar o a su sala común. Potter puede ver las manos unidas de la pelirroja leona y la rubia serpiente Black, más no le provocaba nada en realidad, tal vez felicidad porque Lily parece realmente feliz.

— Te digo que Sirius Black es un idiota.

— es que sus padres son primos.

La voz de James se hizo escuchar con esa respuesta, ganándose la mirada de todas las serpientes, se arrepiente de inmediato de haber dicho tal cosa porque esas personas no son sus amigos, no son sus compañeros y para peor, Regulus es hijo de esos primos también, la risa de Regulus, Narcissa y Lily lo sacan de su arrepentimiento, los tres se ríen sin poder evitarlo mientras que Malfoy y Snape solo sonríen de lado, demostrando que su respuesta su acertada.

— Creo que al fin estamos de acuerdo, Potter.

— No quería ofenderte.

La mirada castaña de James busca la gris de Regulus, tratando de asegurarse de que el menor no se había ofendido por lo dicho hace unos momentos.

— No me ofendiste, fue una buena broma, Potter.

Posiblemente el ioven Potter no noto el rostro de idiota que puso ante la sonrisa que Regulus Black le regalo, pero los demás si lo hicieron, casi todos porque el joven Black es asusto para muchas cosas, notar que tiene un león a sus pies no es una de esas cosas. Lucius Malfoy solo pensaba que Tom tendría otro coraje al saber que su pequeño Regulus era correspondido por el Gryffindor mayor.

— Bueno, debo irme a clases.

Las palabras de Severus le hizo recordar a los dos leones presentes que ellos también tenían clases a esa misma hora, provocando que James se apurara por salir ese lugar, lo que provocó que Regulus chocará con Lily, Luly con Narcissa y finalmente, Narcissa con Lucius, provocando que ese último callera al suelo.

— ¡POTTER!

— VOY TARDE, ADIÓS.

Lily y las serpientes solo vieron al joven de anteojos correr fuera de la biblioteca, provocando todo el ruido que pudiera en el camino.

— La discreción no es lo suyo.

Ante las palabras de Lily, los demás solo pudieron asentir en afirmación.

Al llegar al salón de pociones, Severus sólo pudo ver a la pareja de Gryffindor's separadas cada uno en una punta del aula, elige no saber qué está pasando, así que toma siento en lo que espera que Lily regresara de despedirse de Narcissa, pero parece que sus planes de no saber que pasaba se ven frustrados al sentir la presencia de Sirius Black junto a él.

— Hola, Severus.

— Hola, Black.

— Sirius.

— ¿Disculpa?

— Disculpado, pero dime Sirius, somos muchos Black en la escuela.

— Lo sé, conozco a la mayoría.

— Ya no estamos juntos.

— ¿Qué?

— Remus y yo, ya no estamos juntos.

— Oh. . . ¿Lo siento por ustedes?

— No lo hagas, quería decírtelo.

— ¿Por qué?

— Porque eres mi amigo, además tengo otras intenciones.

— No entiendo de que hablas, Black.

— Terminé con Remus porque él se enteró que estoy enamorado de alguien más.

— ¿Engañaste a Lupin?

— No, no, jamás lo haría.

— ¿Entonces te enamoraste de alguien más y ya?

— No, nada de "Y ya", voy a luchar por mi amor, haré que me ame.

— ¿Y esa persona es?

— Tu.

Severus dirigió su mirada al contrario de forma rápida, tratando de buscar la diversión en rostro ajeno, la broma o la risa burlona, pero solo se encontró con un par de ojos decididos frente a él.

— ¿Que?

— Voy a enamorarte, no importa cuanto me tome, no me importa si debo ir a gritar a tu boda que me opongo o esperar años a que me ames, no me importa, lo voy a lograr y seremos muy felices.

Severus no sabe exactamente qué decir, no sabe cómo reaccionar tampoco, así que solo observa al frente nuevamente, encontrándose con un par de ojos miel mirándolo con tristeza.

— No puedes hacerle esto a Lupin.

— Remus merece a alguien que lo ame como si fuera lo único hermoso y valioso en el mundo.

— ¿No lo amas así?

— No, así es como te amo a ti, Severus.