Friday

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— Bueno... ¿Qué quieres hacer? — Jungkook estaba en su puerta, ayer antes de irlo a dejar, le volvió a pedir una cita —

— No lo sé, hoy me pidieron ir más temprano al restaurante, habrá una pedida de matrimonio y quieren una canción en especial —

— ¿Qué canción cantarás? —

— Can't help falling in love —

— Una hermosa canción — suspiro — Vamos a comer y si quieres después vemos una película en mi casa, trae la ropa que usarás mas tarde, así te cambias allá —

— Okay —

Jungkook lo espero en el auto, ansioso, amaba pasar tiempo con el castaño, incluso extrañaba el olor que desprendía, un precioso aroma a menta.








El jefe de Taehyung le regaló el fin de semana, le explico que era por lo bien que lo había hecho y para que descansara la voz.

Entonces el estaba decidido a pasarlo con Jungkook.

Cuando llegaron a su casa, su roomate no estaba, así que se sentía más cómodo todo.

Vieron al menos dos películas, y todavía les quedaban tres horas libres antes de que Taehyung se tuviera que arreglar.

Jungkook observo como el castaño se frotaba los ojos y creyó sentirlo cansado.

— ¿Tienes sueño? ¿Quieres tomar una siesta en mi cama? — Taehyung se sonrojo pero terminó aceptando —

Jungkook le preparó la habitación, le colocó música relajante y puso su humificador con aceites de vainilla, todo para que el castaño pudiera descansar como se debía.

— Duerme conmigo — antes de que Jungkook saliera de la habitación, Taehyung tomó el valor de pedirle aquello — Jungkook no se negó y se recostó con el, la verdad es que el ambiente era perfecto y lindo para descansar —

Taehyung le buscaba los labios a Jungkook , le robaba ligeros besos y este le acariciaba la espalda.
Cosa que no pasaba a más, pero ambos se sentían extasiados con un contacto tan intimo, tan romántico.

— Duerme un poco, te despierto para que te bañes en un rato ¿ok? — beso la punta de su nariz, y luego acarició su cabello —

— Kook... ¿Podemos pasar el fin de semana juntos? Mi jefe me dio esos días y quiero pasarlos contigo, a tu lado — Jugo con los botones de la camisa del pelinegro —

— Claro que si — beso nuevamente sus labios — Te llevaré a un lugar bonito, rentare una cabaña e iremos — lo termino de abrazar —

— Okay... — Ambos se acurrucaron en el otro y durmieron un poco —

Jungkook se levantó antes que el castaño para bañarse antes. Tal vez hizo mucho ruido y eso terminó de despertar al castaño, que se había quedado fingiendo dormir para admirar al pelinegro, sus tatuajes cubiertos en pequeñas gotas de agua, su torso fuerte en su mayor explendor y ese bóxer negro que no dejaba mucho a la imaginación, se sonrojo, cuando fue descubierto admirando el cuerpo contrario.

— ¿Te gusta lo que ves? — Se puso frente a el — Puede ser tuyo con una sola palabra —

— No me hagas esto, cúbrete — tímidamente cubrió sus ojos pero era tarde, Jungkook se subió en el y volvió a aprisionar sus manos arriba de su cabeza — Jungkook... —

— Aun tenemos tiempo antes de que te tengas que bañar — beso sus labios superficialmente, luego los lamió, como una dulce paleta sabor fresa — ¿Podemos jugar? — beso su mentón —

SEVEN - KOOKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora