Nuevo Uzumaki

Capítulo 1. Mi vida aquí y el contacto.

Narra Asahiko:

Habían pasado unos siete años después de éso, ahora mismo vivíamos en ese departamento nosotros solos.

Yo realmente hacia todo lo posible para que no falte nada, teniendo en cuenta que nadie me quería vender nada.

A mi no, pero a Naruto lo recibían de buena gana, así que eso era un logro.

Además de que Naruto era el que tenía que comprar los víveres, más de una vez se pasó de listo y compró unos trece tazones de ramen.

¿De donde conseguiamos el dinero? Bueno, el Hokage nos daba una parte. Pero el resto era gracias a mí.

Un día había encontrado muchisimos libros que estaban muy sucios. Los limpie y ví que se trataban de hierbas, plantas y flores. No sabía dónde llevarlos, si a la Biblioteca de Konoha o a la florería Yamanaka.

Después de preguntarle a Naruto que creía que era lo correcto los llevé a la Biblioteca. La mujer que atendía al principio me trataba con hostilidad pero después se comportó amable. Gracias a ella conseguí un trabajo de medio tiempo, limpiando y organizando los libros.

Eso era muy bueno para mí, ya que podía llevarme los libros que quisiera y la paga no era mala, teniendo en cuenta que tengo siete años es algo muy bueno.

La principal razón de por qué Fumiko (la bibliotecaria) se llevaba bien conmigo son las historias que yo le contaba, las historias de mi mundo. Parece que ella cree que yo las inventé, la verdad es que estaba pensando en reescribir todas las historias que me sé, para que en éste mundo también las puedan disfrutar... Y de paso ganaría muchos más Ryo.

Ahora estaba en mi hogar, todo estaba limpio y ordenado (cortesía mía) y yo estaba preparando un manjar entre manjares: Un dulce de leche.

En una olla grande coloqué un litro de leche entera y 300 gramos de azúcar, también un poco de esencia de vainilla. Comencé a mezclar los ingredientes, el fuego estaba medio-alto. Dejé que la mezcla comience a hervir, mientras revolvia constantemente para evitar que se pegue o se forme espuma en la superficie. Una vez que la mezcla alcanzó el punto de ebullición, reduje el fuego a medio-bajo y añadí bicarbonato de sodio, para que el dulce de leche adquiera su característico color y sabor. Continué cocinando a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente hasta que la mezcla espesa y adquirió una consistencia cremosa. Retiré la olla del fuego y dejé que se enfríe. Una vez tibio lo puse en un tupper y lo guardé en el refrigerador, ya teníamos algo rico para mañana.

- ¡Nii-san!.- Naruto entró con muchas bolsas. Yo dejé todo lo que limpiaba y me acerqué a ayudarlo.

- ¿Conseguiste todo?.- Puse las bolsas sobre la mesa y comencé a sacarlo.- Veamos... Harina, leche, azúcar, fideos, arroz, aceite... El ramen no estaba en la lista.- Le sonreí.

- Jeje... Es que es edición limitada ¡Por favor! Son deliciosos-ttebayo.- Habló tratando de que no me enojara. Ya me vió enojado una vez y hace todo lo posible para que no se vuelva a repetir.

- De acuerdo.- Acomodé todo en la alacena.- Pero hoy comeremos Takoyaki, todo está listo para cocinarlo esta noche.

- Pero... .- Hizo su carita de perrito abandonado en la lluvia.

- Eso te funcionó una vez, pero ahora no.- Le dí unas caricias en la cabeza, él hizo un mohín bajando la mirada.- De acuerdo, mañana comeremos ramen.

- ¡Si!.- Me abrazó.- Te quiero, Nii-san.

- Y yo a ti, Naru-chan.- Lo abracé unos segundos.- Vé a lavarte las manos, te haré algo rico para merendar.

Él se fué saltando mientras yo preparaba unos panecillos y un poco de té.

Inesperadamente escuché un golpe seco.

- ¿Naruto?.- Me acerqué al baño.- Oi ¿Está todo bien?.- Di unos golpes a la puerta.

- ¡Es-estoy bién!.- Jadeó un poco.- Enseguida salgo.

- ¿Seguro?.- Recibí una respuesta afirmativa, aún preocupado volví a la sala. Preparé los panecillos mientras el agua hervía. Minutos después de estar todo listo, Naruto entró en la sala pero... Se veía algo raro.- ¿Ocurre algo? ¿Estás bien?.

- S-si.- Me miró como si fuera un completo desconocido.

Ésa noche me sentí muy mal, no sabría como explicarlo pero me sentía mareado, como si algo hubiera cambiado dentro de mí también.

Después de ése día, nada volvió a ser como antes.

(...)

Cinco años más pasaron en un parpadeo.

Ya me siento como en la Rosa de Guadalupe, el cielo azul con un par de nubes dice "cinco años después".

Como Naruto no es el Jinchuriki no necesitaba llamar la atención ni tenía problemas con hacer amigos. Noté como iba con cada personaje y les hablaba naturalmente, incluso a Sasuke, aunque éste lo ignoró.

La actitud de Naruto me inquietaba un poco, era como si algo muy malo le hubiera pasado. Pero ¿Qué?.

No podía descifrarlo.

En fin, en cuanto a las clases me iba muy bien, gracias a los libros que saqué de la Biblioteca pude estudiar mucho. Éso hizo una diferencia muy grande, logré ser el segundo mejor de la clase, solo se me complicanan mucho los jutsus. Todo lo teórico me salía muy bien, perfecto en pocas palabras, pero en lo práctico casi todo se iba a la mierda (era bueno en Taijutsu, promedio en Genjutsu y pésimo en ninjutsu).

Justo hoy era el día en el que nos graduaríamos, yo estaba algo inquieto porque yo no me llevo con Iruka como lo hace Naruto, no existe ese vínculo entre nosotros. Nos dieron una hora de receso antes de la prueba final, por lo que aproveché y fuí al baño para lavarme la cara, tal vez así podría calmarme un poco. No tendría que preocuparme por Naruto porque él estaba con Chouji, comiendo unas papas fritas y hablando.

Ya en el baño me lavé la cara, pero me empecé a sentir muy mal. Sin esperarmelo me desmayé.

Desperté en una habitación oscura, el suelo tenía un extraño líquido y frente mío había una jaula enorme.

- Asahiko Uzumaki.- Escuché una voz gruesa.

- ¡Ah!.- Me sobresalté al ver a la figura demoníaca aparecer frente mío.

- Jejeje.- Soltó una risa maliciosa.- Es normal que te asustes con la presencia del Gran Kyubi.

- Oh, no es éso.- Dije ya más tranquilo.- Es que es la primera vez que te veo en doce años... Casi olvidaba tu apariencia.

- ¿Me recuerdas?.

- Parecería que tú a mí no.

Se formó un tenso silencio luego de que soltara esas palabras. Ninguno parecía querer cortar el ambiente.

- ¿Me trajiste aquí por algo en particular?.- Pregunté impaciente, si me tardaba demasiado tiempo tal vez Naruto se preocuparía y lo menos que quiero es que me vea desmayado.

- ¿Por qué no estoy sellado en Naruto? ¿Y quien Diablos eres tú?.- Preguntó directo.

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Otro capítulo para ir sumando

Los capítulos que haga de esta historia van a ser en su mayoría cortos (de 1000 palabras o más) obviamente habrá más largos.

Espero que la historia les vaya gustando, apenas va empezando.

Se despide de ustedes con mucho amor

༺Itachi Uchiha༻