My Puppy ||KTH|| ✅

2-03 Mates.

Taehyung.

—¿Tenemos un hermano?— miré a mi hija y asentí despacio, nos encontrábamos en la sala de la mansion, mis padres, mi Luna y mis hijo, decidí contarles toda la verdad aunque ya JeonMi lo sabe.

—No entiendo — mi madre se levantó de aquella silla — Mi niña, hablas de Wooyoung ¿Tuvo un cachorro?— asentí apartando la mirada.

—Entonces...— interrumpí a mi padre.

—Ella nunca estuvo enferma, al principio creo que había sido así, pero cuando el pequeño tuvo tres años vino a la manada junto a Doyun y me encontré con él, y lo identifiqué como mío—

—¡¿Por qué no lo buscaste?! ¡¿Por qué no lo trajiste a vivir aquí, en su manada?!— negué.

—Porque su madre así lo quiso— suspiré desviando mi vista a JeonMi y ella asintió despacio — Meses después logré dar con el paradero de Doyun, e intenté quitarle al niño pero él no me dejó, de hecho yo no tenía ningún derecho de quitárselo, en una de nuestras discusiones me entrega una carta, una que había escrito Wooyoung y se que fue ella porque era su letra — sentí mi vos fallas.

—Papá— cerré mis ojos con fuerza y volví a abrirlos.

—Me pedía que no, que no condenara a su hijo a si como la condene a ella, que no lo atara a un lugar en donde se iba sentir incompleto, que no lo buscará que simplemente me olvidará de todo y que siguiera con mi vida, me aferré a la idea de no seguir su petición, pero se lo debia— ni hija vino hacia mí y me abrazó.

—Poe mi culpa ella no puso ver crecer a su hijo, y él no pudo conocer ni crecer junto a su madre —

—¿Por qué no nos comentaste sobre esto?— mi madre era un mar de lágrimas y sabía el porqué Wooyoung significó tanto para ella como para mí, la manada y mi padre.

—Porque estoy seguro que iban a ir hacia él y querrían tráelo hacia acá, es algo que quería tan siquiera respetarle a Wooyoung, su última voluntad —

—Quiero verlo —

—Mamá— traté de detenerla pero fue imposible ya que salió de la casa, miré a mi padre el la siguió — Mierda — señalé a mi familia — Ustedes se quedan acá — demandé cuando vi a mis hijos que querían seguirme, demandando así aquellas palabras antes de salir de la mansión.

Minutos después llegue a casa de aquella familia deteniéndome al lado de mi madre.

—Mamá, podrás verlo otro día, él no se irá por ahora, pero por favor no es momento—

—Su madre nunca tuvo nada Taehyung, solo a nosotros y le fallamos de la peor manera, tanto así que nunca supimos sobre la existencia de este pequeño — la puerta de aquella casa se abrió dejándome con la palabra en la boca, siendo aquel lobo quien la abrió, mi hijo mayor.

—¿Qué hace aquí?—

—Aunque no lo quieras, Wooyoung, soy tu padre — negó desviando su vista a mis padres, sus abuelas, luego volvió a mirarme.

—No volveré a discutir lo mismo, señor, dígame que vino a ser aquí y ¿Quienes son estas personas? Ya que llegaron en mala hora y mi verdadera familia y yo nos encontrábamos cenando—

—Te estás pasando— iba a ir hacia él pero mi padre me detuvo.

—Hola — habló mi madre sin apartar su vista de él— Es muy poco probable que sepas quién soy, pero yo conocí a tu mamá, de hecho la amé como si fuera mi hija — este frunció el ceño y Doyun apareció a su lado haciendo una reverencia a mis padre.

—Será mejor si entran —

—Tío —

—Pequeño, ellos son tus abuelo, deben de oírlos — este a regañadientes se hizo a un lado dejándonos pasar, noté a mi delta y beta más su hija junto a los padres de aquel lobo en la mesa.

—Advierto desde ahora que no quiero escuchar nada, y no hay nada de lo que deba de hablar— rápido Wooyoung se colocó a la defensiva — Solamente vine a este lugar porque creo que lo necesito, no porque quiera una familia —

—¡Wooyoung! ¡Basta!— le hablo Doyun.

—¡¿Qué?!— expresó molesto, noté como sus ojos cambiaron de color — Mira sus rostro, su expresión, es de lástima — señaló a mi padres y a los padre de aquella chica — Lástima porque soy huérfano y ellos no estuvieron ahí para criar me, cuidar de mí, porque se sienten mal consigo mismos por fallarle a mi madre, por simplemente dejarla ir y no ayudarla, por no evitar que yo naciera así ella estuviera viva—

—¿Crees que tu madre te hubiera abortado?— mi madre se acercó a él.

—A veces me pregunto el porqué no lo hizo— solto— Señores no quiero saber nada de ustedes, si tengo sus sangre, sus genes pero no vine a aquí en busca de una familia, porque ya la tengo, yo estaré aquí por un tiempo pero después me iré no pienso quedarme mucho tiempo, así que pueden seguir como estaban, ignoren que existo — dicho aquella empezó a caminar ignorando los llamados de Doyun o los de sus padres.

—Será mejor que vayas con él — habló mi Beta a su hija y ella asintió, siendo en ese preciso momento donde caí de que ambos son mates.

Wooyoung.

Entré a la habitación y cerré los ojos tratando de controlarme al sentí que llegaba a transformarme de nuevo. Pero cuando aquel aroma llegó a mí me tranquilice.

— Será mejor que no estés aquí — sentí su mano en mi hombro.

—No sé cómo te sientes pero si necesitas mi ayuda, aquí estaré — volteé a verla y asintió despacio. Desvié la mirada sintiéndome más tranquilo.

—Nadie sabe cómo me siento— caí en la cama pasando mis manos por mi cabello con frustracion — No quiero nada de esas personas ¿Por qué no lo entienden?—

—Porque perteneces a una manada — se sentó a mi lado — negué apartando me de ella.

—No soy parte de este lugar, no pertenezco a acá, además pronto me iré de acá—

—Bueno, eso da respuesta a la pregunta que quería hacerte — hizo una mueca — Vas a rechazarme —

—Yo...— apreté mi labio con fuerza — No sé, no, no creo llegar a hacerlo pero tampoco puedo vivir aquí, este lugar no es mi hogar y...— el agarre de sus manos a mis brazos y sus labios encima de los míos fue lo que me detuvo.

—Iré a donde quieras que estés siempre y cuando me aceptes como tú mate— sonreí abrazando si cintura y junté sus labios con los míos.

—¿Por qué siento que te conozco de toda la vida?— eché su cabello hacia atrás mientras miraba cada facción de su rostro, es hermosa.

—Porque somos mates — sonrió haciendo que sus ojitos desaparecieran y asentí acercándola más a mi dejando un beso en su frente para luego abrazarla, sintiendo como me correspondió.

No es algo que yo busqué, pero encontrarla significa problemas para mí, aunque sienta que es mi vida, no quiero tener nada que me ate a este lugar, solamente el hecho de que aquí descansa mi madre.