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"Hold on, I'm here baby"

Viernes, 14 de noviembre de 2014

―Ultimamente te ves cansado, y desanimado, ¿Estás bien?

Hanbin suspiró y se pasó una mano por su cabello oscuro.―Solo estoy cansado.

Zhanghao hizo una mueca disconforme con los labios.―Sé que no solemos hablar de estas cosas en el año que nos conocemos, pero... Si quieres hablar con alguien, yo puedo escuchar.

El mayor se removió un poco en su asiento, parecía indeciso. Para Hanbin hablar con Zhanghao, por más pequeña que sea la conversación, lo hace sentir cómodo así que... Sí, podría decírselo, ¿Verdad?

―Tener que criar solo a mis cuatro hijos, no es fácil sin ella... Es agotador.―Rió sin gracia.―Muy agotador.

Zhanghao parpadeó sorprendido. Sabía que tenía hijos y era padre soltero, pero no sabía cuántos niños tenía ni si la madre de sus hijos lo había abandonado o solo era divorciado.

―¿Cuatro? ¿Tienes cuatro hijos? Nunca lo mencionaste.―Se le veía genuinamente curioso.

―Sí... Soy padre de un niño, una niña y un dos gemelos, que son los más pequeños.

Zhanghao recorrió su perfil, deteniéndose en sus labios donde sostenía un cigarrillo. Su mirada se perdía en la vista del estacionamiento y edificios a su alrededor bajo el cielo claro de la tarde. Su mirada, esa mirada se veía cansada y no era por esas ojeras en sus ojos, no.

Era la mirada de un hombre abatido.

Zhanghao conocía bien esa mirada, porque la vió reflejada en sí mismo.

¿Ser padre soltero hace que Hanbin fume tanto? ¿Es el estrés? ¿Se siente solo? ¿Se siente como yo?

Quizás Hanbin necesite alguien en quien apoyarse, alguien que entienda su dolor constante día a día. Algien que entienda el pesar de su corazón. Quizás sea como él, y busque algo a lo que aferrarse para alejarse de su angustioso pasado.

―¿Cuáles son sus nombres?¿Tienes una foto?―Colocó una mano en su espalda y le sonrió levemente.

Zhanghao tenía tacto para tratar con las personas.

Hanbin asintió. Sacó su billetera y la abrió enseñando una foto familiar ahí.―La niña se llama Eunchae, el chico alto es Jeongsan y esos dos pequeños son Ren y Luhan.―Señaló con una sonrisa. Una orgullosa de su familia.

Zhanghao lo pensó pero finalmente sus labios se abrieron para preguntar:―¿Ella dónde está? Ya sabes... La mamá de tus hijos.

Juró ver como sus ojos pasaban de estar inundados en soledad, a estar llenos de desolación.

Conocía tan bien esa mirada, es el mismo reflejo de sus ojos propios en el espejo, algunas noches solitarias.

―Ella no está. Falleció hace poco, sufría de cáncer, solo aguantó hasta que nacieron los gemelos y luego...―Carraspeó.―Su aniversario se acerca, y creo que por eso estoy el doble de cansado.

Decir en voz alta que la persona que más amaste se ha ido de tu lado, que te la arrebataron, que te abandonó; es doloroso.

Es como si al decirlo en voz alta sonara real, y es lo menos que Hanbin quiere; que sea real el hecho de que ya no está con él, que nunca volverá.

Nadie burla a la muerte.

Ahora es solo un padre viudo que trata de mantener en equilibrio su familia y su trabajo. Cuatro hijos, una gran casa que pagar, y sostener su propio corazón herido... Eso es trabajo para los más valientes.

cenizas de un amor ✧ haobinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora