05: Relaciones...

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Primer fin de semana solo; bueno no tannnnn solo estuve con Marce pero ajá, hace par de días hablamos de que mi padre era una persona muy sin sentimientos, es decir se va y nos deja solos a nuestra suerte, tampoco es como que fuésemos dos inútiles pero alguien debe llevar las riendas y no seremos ni Marce, ni mucho menos yo; el caso yo solo me centraré en mis clases, que por cierto ya llevo dos semanas. De nuevo el lunes a clases ya me he acostumbrado a todo o bueno casi todo dentro de la escuela, pero hay algo a lo que no me acostumbro y creo que nunca lo haré...
HEY TIRA CAFÉS – dijeron a mis espaldas –
Oh un señor adulto – reí un poco antes de darme la vuelta – ¿Que pasa vienes a molestarme de nuevo? – dije agresivo –
Huy Huy cuidado alguien tuvo un fin de semana agresivo – me miró con diversión –
¿Y que te importa si lo tuve o no? – respondí de mala gana, para comenzar a reír –
Por su parte Oliver también soltó una pequeña risa
Anda tira cafés llegarás tarde y eso es muy pero muy malo para alguien que es el señorito perfecto – dijo atento –
Si, si como sea ya cállate, que ya me voy – dije mientras caminaba a largos pasas –
Este solo asintió y cada quien siguió en lo suyo, a decir verdad está manera agresiva-pasiva de tratarnos es lo más cercano a una amistad que tengo claro exceptuando a Anabel.
Fue así como llegué a mi clase como de costumbre y ya pasadas un par de horas salí a mi hora libre, no había pasado ni un minuto a solas cuando escuché esa familiar voz
Te ví discutiendo con Oliver – dijo mientras caminaba a mi lado –
Ah, ¿eso? – sonreí – es nuestra manera de tratarnos desde aquel incidente del hospital...
Huy se hicieron amigos – dió un aplauso emocionada – dicen que el es muy rudo y no tiene amigos... – mencionó mirándome de reojo –
Pues amigos no somos, somos conocidos – miré igual, de reojo –
Pues mínimo ya has hablado con el más que todos incluyendome – exclamó en un tono más serio – pero bueno el caso señorito pianista, ¿Está listo para tocar... me? – dijo antes de salir corriendo al comedor –
La mire extraño y simplemente seguí hasta la mesa donde comeríamos. Todo transcurro bien y como era de esperarse llegaron con el postre y exactamente como era de costumbre también Oliver nos entregaba a nosotros, en aquél momento antes de separarse de la mesa Anabel lo tomo del brazo y antes de nada soltó
Hoy tengo una reunión en mi casa tu amigo Mau va a estar ahí
Hey – solté de la nada – yo... – me interrumpieron –
¿Pasa algo en la mesa cuatro? – exclamó el profesor –
No señor, no ha pasado nada – respondió de inmediato Oliver – solo me elogiaban mi postre, es todo señor, sin más me retiro – acto seguido hizo una seña de disculpa, para luego susurrar – estaré ahí...
Después de todo esto, todo transcurro normal nuevamente pero había algo que en mi cabeza resonaba...Estaré ahí... Estaré ahí... Una y otra vez.
¿Que demonios Anabel? – dije en un susurro que no tenía nada de susurro –
¿Que? Si yo no lo decía tu nunca pedirias ser su amigo – me dedico una sonrisa mientras comía – a todo esto solo estaremos tu, yo y tu amigo – hizo una mueca – y no puedes faltar porque eso no hacen los amigos...
Está bien, ¿a qué hora? Para estar listo además... – nuevamente fui interrumpido –
Pues cuando salgamos vamos por él, yo se que los lunes el tiene trabajo de medio turno y sale a la misma hora que nosotros...
Oye calma señorita acosadora – reí nervioso esperando que mi mini broma no afectara –
Pues podría ser – respondió totalmente sería para luego echarse a reír – mira tonto – apunto al horario de nuestra cocina – ahí dice los medios turnos para saber quién sirve cada cosa, exactamente por si alguien o alguna enamorada o enamorado quiere regalarle un detallito a su gran cheff – acto seguido se echó a reír con más ganas –
Ah, ah sí jajajaja si lo sabía – mi vergüenza era tanta que sentía mi rostro arder y sin más solté – entonces pasemos por él...
¿Lo ves? Si son amiguitos – dijo con una sonrisa –
Sin más me pare y comencé a caminar a mi última clase, en el transcurso del camino sentía como mi rostro ardía y no se porque solo ardía de la emoción y sentía como mi rostro no paraba de sonreír, demonios que me pasa...
La clase había concluido y ya me encaminaba a la salida algo nervioso, mi profe había salido antes aunque no se para que la verdad; cuando de pronto veo en la salida del salón a mi profesor Hablando con Ana y Oliver...
No me jodas... – susurré –
Mientras caminaba lento y por un lado para escabullirme
Hey Mauro pensé que te habías ido tus amigos estaban precisamente preguntando por ti – exclamó con una gran sonrisa – adelante pasen pasen...
¿Pasen? – dije dudoso – ¿A dónde profesor?
Aquí al salón estaban mencionado que si podrían escucharte practicar...
Al escuchar aquellas palabras mi corazón se volvió loco pero de nervios, como se le ocurre que voy a tocar frente a personas... Osea Ana está bien pero... ¿Oliver?
No puedo ya salimos... – solté sin más –
Si tocas hoy te dejare libre mañana además vamos tus amigos lo pidieron... ¿les vas a fallar a ellos? – susurró después de perforar con su mirada la mía –
Vamos hazlo – soltó Ana sin más –
Di un largo suspiro y sin pensar me senté y comencé a tocar, sabía que si paraba todo se iría al carajo pero por otra parte si continuaba esto acabaría rápido así que toque una y otra vez sin parar; aquella melodía llena de melancolía con toques alegres invadió aquella habitación, mientras que por mi parte solo cerré los ojos y me deje llevar después de un buen rato sentí que debía parar, así que pare sin más y al abrir los ojos me quedé anonadado, ya que no solo estaban mirándome Ana, Oliver y el profe, si no que más de medio salón de al lado se había unido para escucharme también, todo paso tan rápido pero lo único que mi cuerpo sentía era emoción detrás de esos aplausos aunque pasada la euforia me hundí en pena... De fondo se lograba escuchar algunos comentarios de aportación hacia mi, moría de pena pero en el fondo moría de felicidad; aunque todo pasa demasiado rápido ya que en ese momento se acercó Ana y Oliver
¿Ves?, te dije que eres excelente con el piano y te ves como un pro ahora sí – su sonrisa era de oreja a oreja – a todos nos encantó, mira todos los que te vinimos a ver...
Si como sea – susurré – me da pena...
La gente siguió su camino después de unos minutos; obviamente los únicos que permanecían ahí eran ellos dos y el profesor, pero de igual manera pasados unos minutos entre charlas y de más nos encaminamos a la salida.
Eres bueno con lo que haces – comento Ana –
También tirando cafés – agrego y me miró con esa sonrisa burlona –
Cállense y suban – solté sin más –
Y así fue estuvimos camino a casa de Anabel y en el transcurso avisé a Marce que estaría con unos amigos. Llegamos a la casa de y ya ahí dentro, esperaba ver a sus padres o algo pero fue bastante sorpresivo que no estuviera nadie
¿Y tus padres? – pregunté algo apenado –
Ah? Yo vivo sola desde los 15 – sonrió luego nos miro a ambos – si hace dos años estoy sola aquí mis padres pues tienen sus cosas – se quedó en silencio un par de segundos – el caso tenemos casita sola y no solo eso pondremos hacer lo que quieran WIIIII
Son dos menores ¿no? – chisto Oliver sin más – ahora me vieron cara de guardería...
Ay ya cállate "adulto" – reí un poco – el próximo doce de agosto seré mayor
Si lo que digas niño – soltó un gruñido más como una carcajada ahogada –
Bueno bueno ya ya cállense y comamos algo, ¿Pido pizza?, ¿Que les gusta?
Lo que quieras Ana por mi está bien...
Es mejor hacerlo ¿no? – agrego él –
Nada de hacer podíamos algo sencillo y juguemos o.... – comentó Ana –
Comenzó a buscar algo entre sus cosas en el refrigerador y de la nada saco un brandy, el cual puso en la mesa
Ustedes ¿han tomado ya? – nos miro a ambos –
Lo cual yo negué con mi cabeza debido a que nunca habia tenido oportunidad para ello y mucho menos había tenido una amistad tan larga como está, se que es poco pero para mí que nunca me duraba nada pues es larga...
Ustedes son menores no pueden tomar solo yo – dijo tomando la botella en sus manos – pero no debemos hacer esto ni ahorita ni nunca eso es malo...
Si él tiene razón – agregue –
Pues yo si lo haré y no me importa es una fiesta chicos, nuestra fiesta – aclaro – ¿un trago por nuestra amistad?
Dicho esto tomo la botella de las manos de Oliver y dió un largo trago, acto seguido nos miro a ambos y nos pasó la botella especialmente a mi, el tenerla en mis manos era adrenalina pura nunca había tenido esa oportunidad y ahora estaba a escasos centímetros de mi, mis manos estaban temblando no sabía si hacerlo por la anécdota o no pero... Antes de decidir Oliver arrebato esa botella de mis manos
Daré dos tragos uno por mi y otro por Mauro y se callan – dijo en un tono casi similar a un gruñido –
Nadie chisto nada y solo asentimos mientras Ana ponía una canción de fondo que a mí parecer parecía una canción de "Kali uchis - como te quiero" mientras la canción sonaba de fondo comenzamos a charlar y a esperar la pizza que al final llegó; después de comer nos pusimos a jugar un poco de cartas y la tarde transcurrió de manera normal ya entrada la noche recordé que debía ir a casa...
Demonios debo irme a casa ya...
No pasa nada quédate conmigo están los sofás ambos quédense – dijo Ana ya con una voz algo diferente por los tragos que se estuvo dando toda la tarde –
La misma me da – soltó Oliver –
Se notaban algo más relajados por el alcohol tal vez, por lo cual yo era el único que no tenía esa relajación ya que no había tomado y si, estaba preocupado por regresar a casa; de la nada entro una llamada a mi celular
¿Si bueno? – dije algo preocupado –
Hola señorito soy Marce
¿Que pasa todo bien? – dije nervioso –
Si todo está bien, solo quería comentarle que ya es noche y no debe conducir a esta hora si puede quédese con sus amigos igual todo está en orden aquí en casa
Asentí al celular sin que me viera
Está bien gracias Nana
Colgué de una y los mire les explique que me quedaría con ellos y sin más seguimos charlando
Espera falta algo más – dijo Ana ya más emocionada –
Rápidamente se levantó y se tomó el resto de la botella, así mismo de rápido fue a su nevera y saco una más
Jugaremos a la botella mientras nos tomamos la otra – soltó eufórica –
No deberíamos...
Yo si quiero – interrumpí a Oliver – ambos están relajados con el alcohol y yo ando tenso dame esa – agarré la botella que Ana sostenía –
Sin más abrí aquella botella que despedía un aroma a frambuesa con un ligero toque de licor y si así fue como de la nada di un largo trago, trago que a pesar de saberme dulce quemaba mi garganta
Umg... – trague lo último del trago – sabe... Raro pero es rico
Ambos me miraban con ojos de plato a lo cual solo sonreí y seguí como si nada, sin saber que pronto el alcohol haría su efecto. Me senté en un sofá y en frente yacía la botella vacía con la que jugariamos también me percate que Ana estaba sentada en una tipo almohada en el suelo y que Oliver estaba acostado en el sofá que daba frente de mi
Hagamos preguntas cuando la botella nos seleccióne
Sin respuesta solo giro y la botella la apunto a ella
¿Cuántas parejas han tenido? – preguntó Ana –
Un par de chicas por ahí nada interesante – soltó Oliver sin levantarse de ese sofá –
Nada nunca había tenido una relación de amistad mucho menos una relación amorosa – dije algo cabizbajo –
¿QUEEEEE? – se me acercó Ana – NO TE CREOOOOOO – tomo mi mano –
La mire raro y sus acciones junto con la charla hicieron que se sentará Oliver y también sin más comento
¿PERO QUE MIERD.... – Los interrumpí –
Perdón por no ser como ustedes o el resto de la gente, solo no se me presento la oportunidad – solté la mano de Ana –
Dame acá
Ante la pena y el momento sin más di un trago realmente grande a la botella hasta dejarla a la mitad
Y NO ME DIGAN "AY MAURO NO TOMES" PORQUE...
Oliver me quito la botella y sin más tomo para luego girar la botella vacía en la mesa, la cual volvió a quedar con Ana
¿Besarian a alguien de los que están aquí? – soltó emocionada –
No ambos son asquerosos – dije lo más serio posible para luego soltar una risa – nah bromeó pero son mis amigos además nunca he besado no se – mierda el alcohol si que trabaja rápido –
Posiblemente – mustio – posiblemente lo haga está noche – dijo Oliver luego comenzó a reír –
Pues yo los besaría a ambos en la mejilla – dijo Ana entre risas –
Así pasamos un par de horas más hasta que los ataques de sueño se hacían presentes principalmente en Ana la cual se levantó como pudo y camino a su habitación no sin antes despedirse y lanzarnos un par de cobijas
Duerman ya – menciono antes de desaparecer –
Genial ahora estoy mareado, con sueño y debo preparar dónde voy a dormir, comencé a poner cobijas en aquel sofá
¿Fuiste valiente o solo fue por el momento? – preguntó desde el otro sofá –
Fue... No sé que fue pero no me arrepiento... – pensé un poco – aunque se descubrió que no se nada del amor... – reí nervioso y solté mi cabello –
Me quedé en silencio después de ello pero no obtuve respuesta y volví a hablar
Tu deberías darme clases – pensé un momento – no olvida eso estoy borracho
Nuevamente no obtuve respuesta e intui que Oliver ya estaba dormido y muy sigilosamente me acerque...
¿Duermes ya? – susurre – ¿Hola? – dije un poco más fuerte –
Su rostro se veía totalmente relajado a como acostumbro a verlo siempre, de igual manera no es que lo vea todos los días pero Ahora hasta parece no ser el mismo
Vaya te has dormido – dije para mí mismo – buenas noches
Le tome una mantita y se la puse encima para que no pasase frío el resto de la noche; pero antes de separarme del sofá sentí un movimiento fuerte pero para nada brusco y de la nada estaba ahí Oliver parado frente a mi impidiendo mi camino
Ten – susurro – la necesitas más tu
Puso la misma manta en mi espalda y en ese momento parte de mi cabello había caído en mi rostro tras aquellos movimientos generados por el alcohol, cabello que la mano de Oliver aparto de mi rostro...
Posiblemente está noche... ¿Recuerdas?
Mi mente estaba girando nadamás y en blanco pero de la nada recordé "posiblemente, si posiblemente está noche besaré a alguien"...

DULCE SABOR VAINILLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora