DULCE SABOR VAINILLA

04: El Chico Tira Cafés

Desperté y aquel techo no era minimamente parecido al de mi casa, cosa que me levanté de un salto quedando sentado en la cama

¡Hey tranquilo! - gritaron a mi lado -

Y en efecto era él. Esta vez lo pude ver bien, de echo demasiado bien tenía un cabello negro medio largo ya que cubría parte de su frente hasta poco más abajo de las cejas, sus ojos marrones me miraban con atención casi sin parpadear y su rostro estaba algo perfilado y limpio; también me percate de que al parecer hacía ejercicio o algo ya que estaba algo musculoso...

No te muevas llamare a los doctores - dijo con seriedad - ¡HEY!

Me interrumpió mientras baja un pie de la camilla

¿¡QUE DIJE!?

Tomó mis hombros y me tiro a la camilla, ya sea por el impulso o el arrebato pero quedo un tanto encima mio, cosa que rápidamente se incorporó y se separo varios pasos de mi y tras un largo suspiro miró hacia arriba como si mirase el cielo

Maestra tu hijo si que es un desastre - suspiro nuevamente - primero tira el café de tu alumno favorito y ni se percata, luego se desmaya por quien sabe que sea y ahora esto no sabe seguir órdenes a pesar de ser para su propio bien - me dedico una mirada un tanto retadora - así que ahora quieto tira Cafés...

Tras escuchar todo esto sentía como mi corazón latía tan rápido, mejor dicho fue un shot de adrenalina escuchar aquello, tenía tantas preguntas pero creo que era más que obvio que no tendría respuestas, no de él

No soy un tira Cafés - solté sin mas - tu eres un.... Un... Un mentiroso, a demás ¿¡como sabes quien es mi madre!?

Era mi maestra - dijo de mala gana - siempre hablaba de un tal Mauro - me señaló - supongo que eres tu Mauro Montaner

Mauro Hernández ahora - solté sin más - Hernández...

Te diré tira Cafés y no, no hay mas opciones y ni más que decir, así que espera aquí y no te muevas

Se acercó a mi, demasiado para ser sinceros

Te lo ordena un adulto - susurro frente a mis labios -

Sentía mi rostro arder y sus labios casi tocar los míos cosa que me aparte tan rápido como pude y me acosté al otro lado donde no pudiera ver a aquel "adulto"

Si, si ya vete - dije en un susurro -

Casi pude sentir que reía al salir de la habitación, ¿que le pasa?, ¿quién te crees para hablarme así? Obviamente todo esto estaba en mi mente de mi boca no salía más que lentos suspiros y aun así el ya no estaba fue por un doctor o yo que se. Después de un par de minutos el se encontraba con un doctor al lado y comenzó a examinarme pasado un tiempo solo dijo que podía irme y que estaba muy bien que lo ocurrido fue por un tipo subidón de adrenalina, dicho esto rápidamente mire a aquel chico y tras salir el doctor solté

¿Viste? Es tu culpa - dije indignado -

¿Eh?... ¿mi culpa? - me dedico una mirada retadora - ¿te pongo tan nervioso acaso?

Me das miedo ummmm ¿Señor adulto? - le dedique una mirada de odio -

Oliver Herrera - extendió la mano - ahora ya el señor tiene nombre

Tienes mi misma edad - dije estrechando su mano -

Ummm yo tengo veintidós y tu debes tener diesiseis ¿no? - dudo -

Diesisiete - dije mientas miraba el suelo y me negaba con la cabeza -

Lo ves soy un adulto - miro mal - no no, espera ya me confundí pero el caso respetame