Torero Kookmin

3

..

Tres semanas habían pasado ya, jungkook solía ir con el señor Park a el establo a practicar en un toro mecánico que mantenían allí, había aprendido muchas cosas nuevas que le hacían facilitar la estabilidad en el agarre.

Ahora estaban practicando un poco la coordinación del movimiento para que no fuesen tan bruscos sino más coordinados y suaves, en esta clase participaría jimin ya que el era profesor de Equitación y tenía muchos tips para ayudar en ello.

—Bien mira como jimin posiciona sus piernas en el toro y como las sube y baja suavemente cada que el toro se mueve— explicaba el señor Park pero lejos de ver cómo jimin ejercía eso, jungkook estaba hipnotizado por lo sutil y elegante que se veía sobre el toro mecánico.

Sus caderas se movían suavemente y acorde a los movimientos bruscos del toro, se veia que jimin tenía unas piernas muy tonificadas ya que se tensaban su muslos cuando el toro giraba, y su trasero, valla trasero el que cargaba jimin, y como rebotaba cuando daba pequeños saltos, solo podía imaginar escenas indecentes por sólo el echo de verlo montar el toro.

—¿Entendiste?  — pregunto el señor Park bajando de la nube a jungkook

—Si, pero podría ver otra demostración, así me queda más plasmada la idea— pidió jungkook

El señor Park asintió y le dijo a jimin que subiría un nivel más de rapidez en el toro, dejándolo programado unos minutos ya que el señor Park debía de ir a otro lugar y que luego de terminar eso quedábamos libres.

Jimin no era ningún idiota había sentido la fiera mirada de jungkook en su cuerpo, muchas veces había enseñado a distintos alumnos y podía descifrar que jungkook no quería solamente aprender de ello, sino que disfrutaba mirarlo, disfrutaba como se veía su cuerpo, jimin sabía muy bien que tenía un cuerpo muy bello y porque no sacarle provecho, no le haría daño divertirse un poco con ese baquero sexy, al fin y al cabo solo miraría.
Y algo que disfrutaba jimin era provocar y no dejar tocar.  

Jimin movía aún más suave y sensual su cadera sacando a relucir aún más su pomposo trasero, los jeans de mezclilla se ajustaban muy bien a sus curvas y si inclinaba un poco más su espalda hacía ver un culo redondo y grande, le estaba dando un espectáculo a jungkook, y mirándolo sobre su hombro unos segundo noto que ahora lo miraba directo a sus ojos.

Ambos chicos se miraron fijamente a los ojos unos segundos, ambos con miradas llenos de chispas y llamaradas, ambos sabían que esto era morboso, y cuando sus entrepiernas comenzaban a despertar, el toro se detuvo y jimin jadeo de cansancio, hasta ahora que terminaba había notado que tenía todo su cuerpo tenso y ahora que lo aflojaba le dolían los músculos.

Jungkook ayudó a jimin a bajarse del toro tomándolo por la cintura y dándole una botella de agua

—Tu técnica es muy bien hyung — comentó jungkook

—Gracias, años de experiencia en Equitación— contestó jimin secando el sudor que corría por su cuello 

Luego de eso jimin se despidió dejando a jungkook solo ordenado un poco el establo ya que jungkook se había ofrecido a ayudar en sus tiempos libres en lo que pudiese.

Jungkook no había vuelto a ver a jimin, ni a la hora del almuerzo ni a la cena, tenía esperanzas de quizá decirle buenas noches pero el rubio no había siquiera aparecido.

Y como si eso fuera poco no podía dormir así  que decidió jugar con su celular hasta que le dieron casi las 4 de la mañana, ya sintiendo sueño decidió ir a beber un poco de agua al baño de su recámara, sintió que no le satisfacía totalmente y recordó que había dejado una botella de jugo de Piña en la cocina así que decidió ir allí, no se puso playera ya que dudaba encontrar a alguien a estas horas, así que bajo solo con su pantalón de pijama puesto.

Al llegar Su sorpresa fue que también había alguien en la cocina, Jimin.
Lo vio que llevaba solo una camiseta blanca sin mangas que le llevaba hasta la cintura dejando ver sus bóxers blancos muy ajustados dejando relucir su muy lindo trasero, su cabello estaba mojado, seguro se había duchado hace poco.

—¿cuando volviste?— pregunto jungkook acercándose lento hacia el refrigerador sacando el jugo de piña para luego servirse en un vaso.
Jimin al notar la presencia giró su cuerpo y habló

—¿Cuando nos volvimos tan cercanos como para que preguntes con tanta casualidad? — pregunto jimin bebiendo un poco de té apoyando su espalda en el lava platos

—Oh vamos jimin, digo hyung, llevamos casi un mes juntos en el mismo techo, y nos conocemos desde antes, porque debería de ser recatado— alegó jungkook para luego dar otro sorbo a su jugo dándolo por terminado

Era verdad, habían congeniado bien, solían hablar mucho de cuando estaban en la universidad o comentaban los partidos de fútbol que veía, también jimin solía frecuentar las clases que le daba su padre a jungkook para dar consejos o solo míralo, incluso solían a veces salir a caminar por el rancho sin siquiera decir nada pero con la compañía del uno y el otro, y claro una que otra insinuación o bromas tontas dejándolos en vergüenza pero todo consensuado.

—Okay, llegue hace media hora casi—

—¿Haz cenado?— pregunto jungkook

— Digamos que algo así...pero, ¿Que tal la clase de hoy? ¿Te sirvió de algo?— pregunto ahora jimin dando finalizado el cuestionario por parte de jungkook

Jungkook pensó unos segundos hasta que asintió y habló

— Montas muy bien—  río bajo por lo doble sentido que se había escuchado, y jimin pilló la indirecta

—Eso me han dicho — contesto jimin con un poco de picardía

—Seguro eres muy bueno cabalgando y dando saltos...— dijo jungkook sugerente y bajando el tono de su voz haciéndola más sensual acercándose a jimin para luego dejar su vaso en el lava platos y dar un paso atrás escondiendo sus Manos en los bolsillos del pijama, haciendo marcar sus abdominales

—Depende del pura sangre que monte, si es bueno, doy todo para terminar juntos... la carrera— jimin siguió el juego

—¿como te gustan ?— pregunto jungkook dando un paso hacia adelante nuevamente, acorralando a jimin contra el lava platos

—Fuertes, resistentes...que aguanten más de dos carreras y Claro grandes para poder sujetarme muy bien cuando los monte— explicaba jimin con un deje de picardía

Jungkook sentía su sangre bombear muy rápido y sus manos las cuales estaban en sus bolsillos del pantalón De pijama sudaban, estaba nervioso pero aún así, le excitaba mucho el camino que estaba tomando la conversación.
Jimin al ver que jungkook se acercaba cada vez más prefirió esquivarlo y caminar a la puerta, no podía llegar más allá de eso.

—¿Y tu?, ¿Cuales son tus gustos ? — pregunto jimin antes de salir de la  cocina

—Sin duda los difíciles, me excita y apasiona domar y amansar a los difíciles— contesto jungkook sonriendo para luego ver a jimin reír y desaparecer de la cocina.

Jungkook esa noche sin duda se masturbo unas dos veces pensando en el rubio que tanto le ponía.

[...]