Epilogo

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Kao ese día miro a su alrededor, en especial los cubículos de dos de sus agentes, unos que no habia visto en toda la mañana, estuvo ocupado en el caso de la infiltración junto a Farida, así que ni siquiera sabía si llegaron ese día a trabajar, lo cual era una cosa extraña en sí mismo, porque ellos eran unos de los primeros en llegar siempre, más si se estaban transportando en el mismo auto, tal y como sucedía últimamente.

—¿Has visto a Krist o a Gulf hoy? —, pregunto a su compañera.

—La verdad es que no— Farida se quedó algo pensativa —Pero podemos averiguar si llegaron—. Tomo su teclado y comenzó a revisar las cámaras de seguridad del edificio y con uno de sus programas comenzó a buscar los rostros de ambos hombres, no obteniendo el resultado esperado —Al parecer no vinieron a trabajar el día de hoy—. Ella frunció el ceño no muy convencido con aquello, ellos nunca faltaban y si lo hacían llamaban antes para avisar.

El otro también se quedó algo perdido con esa noticia, tenían un caso que necesitaba de su completa atención y conociéndolos sabía que daban todo de si a la hora de atrapar algún criminal y mucho más uno que acababa con vidas inocentes, tomo su teléfono y busco el número de Krist para llamarlo, repico muchas veces pero no le contesto, miro la pantalla del aparato y ahora busco el número de Gulf solo para obtener el mismo resultado, no se pudo comunicar con ninguno de los dos, así que volvió a llamar a Krist y le dejo una nota de voz:

—¿En dónde estás?, llámame en cuanto escuches este mensaje, avísame si Gulf está contigo, necesito que me llames de inmediato—. Frunció el ceño no entendiendo que estaba pasando, miro nuevamente hacia donde estaba Farida —No contestan, busca su ubicación—. Ella asintió y coloco manos a la obra.

—¿Dónde están Krist y Gulf? —, pregunto Nike asomándose en la sala informática —Hoy decidí visitar los lugares en donde vieron por ultimas vez a las víctimas, los he estado llamando toda la mañana para que me den algunos datos, pero ninguno me contesta.

—Nosotros tampoco sabemos nada de ellos, aunque estamos a punto de averiguarlo.

—Sus celulares salen ubicados en la casa de Krist—. Dio sus resultados Farida.

—¿Crees que les paso algo? —, pregunto Nike algo preocupado.

—No lo sé, pero tenemos un infiltrado que está haciendo todo para encubrir a unos asesinos, ellos se quedaron anoche más tiempo del normal, podrían haber conseguido algo, todo esto son conjeturas, no lo sabremos hasta que lleguemos allá, vamos a la casa de Krist—. Le aviso al resto del equipo y en menos de un minuto estaban en los autos rumbo a la dirección de su compañero de trabajo.

Al llegar todo estaba relativamente en calma, las personas haciendo su vida normal y la casa de Krist cerrada como si nadie estuviera allí, se acercaron a la puerta y llamaron sin tener respuesta, sabían que su amigo guardaba una llave de emergencia en una maceta, así que la buscaron e ingresaron a la casa encontrando solo el silencio, comenzaron a revisar las habitaciones sin encontrar rastro de ninguno de ellos.

—¡Encontré algo! —. Llamo Gina mirando ambos celulares en la mesa del café junto con una nota, la cual tomo Kao entre sus manos —¿Que dice? —, pregunto impaciente la chica, queriendo saber en donde estaban sus amigos.

"Hay muchas cosas que nos gustaría contarles, pero eso haría más extenso este mensaje y no disponemos de tanto tiempo para ello, supongo que deberíamos comenzar pidiéndoles perdón, la verdad es que nunca quisimos que esto llegara demasiado lejos, queremos decirles que no hay necesidad de buscarnos, cuando lean esto estaremos lejos, estamos bien, pero hay algo que debemos hacer nosotros solos, perdón una vez más por causar tantos problemas, las cosas simplemente se nos salieron de las manos y no pudimos despedirnos de la manera correcta.

Lo Que Nadie VeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora