Harry Potter: el camino de los verdaderos magos

Capítulo 20 : Intercambio de regalos

Resumen:

Sé que prometí que esta sería la noche en la mansión Bones, pero me dejé llevar un poco por la configuración y, bueno, se salió de control ...

Así que disfruta de un capítulo adicional lleno de burlas de Harry en público, y como advertencia, también se incluye un toque de pipí. Disculpas para aquellos a los que no les guste eso.

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Oficina DMLE, al día siguiente

Caminando junto a Andrómeda, Harry atraviesa el edificio hasta la oficina central en el último piso. Al ver la oficina de Amelia, Harry se detiene para saludar tímidamente a la bruja familiar sentada en el escritorio de enfrente.

"¡Harry! Es tan bueno verte de nuevo ". Connie dice mientras se pone de pie para rodear el escritorio. Su cabello rubio recogido en una cola de caballo apretada, mientras se pone de pie, Harry mira su blusa blanca ajustada y la falda lápiz de aspecto profesional debajo.

"Hola Connie, es bueno verte también". Harry dice, sonrojándose cuando la bruja en cuestión le da un suave beso en los labios.

"Ustedes pueden entrar, Amelia los está esperando", dice Connie, antes de inclinarse para susurrar en el oído de Harry. "Espero verte pronto de nuevo, Harry." Ella gime, una mano se agacha para tocar sutilmente su trasero.

Con la cara roja, Harry sigue a Andrómeda a la oficina.

"Andi, es bueno verte", dice Amelia con una sonrisa, acercándose para abrazar a la otra bruja. "Y por supuesto que es bueno verte a ti también Harry." Ella dice, inclinándose para darle un beso rápido pero ansioso.

"Es bueno verte también Amy, espero que no te importe que quisiera acompañar a Harry aquí, desde que me dijiste sobre su regalo quería estar allí para verlo en acción." Andrómeda dice con una sonrisa.

Sonriéndole a la otra bruja, Amelia se vuelve para mirar a Harry. Vestida con su túnica de auror y con el cabello recogido en un moño, tiene una figura muy impresionante, con el suave brillo en sus ojos ayudando a relajar a Harry.

"No puedo culparte, desde que obtuve la aprobación, he estado ansioso por dársela". Amelia dice.

Ahora, más que curioso, Harry observa mientras Amelia le tiende una pequeña caja envuelta para regalo.

"Feliz Navidad Harry". Amelia dice.

Aceptando la caja con una sonrisa, Harry comienza a desenvolverla mientras las dos brujas observan alentadoramente. Al abrir la caja, Harry encuentra un pequeño trozo de cuero, lo suficientemente grande como para caber en su muñeca.

"Es una funda de varita, Harry, como la nuestra". Amelia explica. Está cubierto con una gran cantidad de amuletos, como notifícame, antirrobo, cambio de tamaño y más. Pero tiene un encanto único ... Contiene el encanto de privacidad de una bruja permanente ".

"T-te refieres al ..."

El mismo, responde Amelia con una sonrisa. "Se requiere una amplia aprobación de un consejo de brujas para que a un mago se le otorgue uno de estos, tomamos grandes medidas para asegurarnos de que nuestra magia no sea abusada por aquellos que no pueden lanzarla, no creo que haya habido uno regalado". en Gran Bretaña durante 50 años ".

"¿En realidad?" Harry dice asombrado.

"Realmente Harry", dice Andromeda. "Verás, no solo el encanto te cubre, sino que también te incluye ..."

Al ver la expresión confusa de Harry, Amelia explica más. "Eso significa que mientras estés usando esto, la magia misma te verá como una bruja, y no te afectará el encantamiento cuando lo usen otras brujas". Amelia dice. "Es por eso que restringimos su uso, ya que se necesitaría un asistente muy confiable para poder inmiscuirse en nuestra privacidad de esa manera".