Estamos Fingiendo, ¿No?

Capítulo 21

Maratón 2/4
(Taylor Swift - Lover).

Maeve. 

Hace calor, hace mucho calor, no es tan insoportable, pero es considerable ya que estamos a principios de primavera, a eso agregarle el peso que tengo encima. Extiendo mi mano hacia la mesita de noche para apagar la alarma que indica que son las seis y media de la mañana; una vez cumplo la tarea intento levantarme de la cama, la palabra clave es intento, porque antes de que pueda lograrlo un brazo me rodea y me aprisiona.

—¿A dónde crees que vas? —murmura Charles con voz ronca, haciéndome reír.

—Tenemos un día agitado, debemos levantarnos como ahora mismo —le recuerdo dando media vuelta en sus brazos quedando frente a frente.

—Cinco minutos más, cariño —pide escondiendo su rostro en mi cuello.

Sonrío como boba sin poder evitarlo, no debería emocionarme tanto cada que Charles me llama cariño, pero joder, es una sensación tan malditamente buena que me es imposible no gritar como loca, internamente hablado, claro está. Se percata que no respondo y levanta su rostro de dónde lo mantiene oculto, suelta un bostezo antes de abrir los ojos.

—¿Qué ocurre? —pregunta visiblemente preocupado arrugando las cejas.

—He has llamado cariño —digo en un susurro que parece más un chillido. Me observa unos segundos antes de reírse abiertamente de mí, nos da vuelta haciendo que quede debajo de él.

—Creí que ya habíamos hablado de esto —murmura alejando un poco su cara de mí, el aliento mañanero y esas cosas—. Te llamaré cariño a cada momento que no te esté diciendo Blancanieves, tendrás que acostumbrarte —dice con una sonrisa ganadora.

—Dos semanas no son suficientes para acostumbrarme —le recuerdo.

—No te preocupes, tenemos toda una vida para eso —responde bajando su rostro y dejando una suave presión en mis labios—. Buenos días, cariño —saluda para luego levantarse y caminar al baño.

Rio como una tonta quedándome en la cama. Han pasado dos semanas desde nuestra accidentada declaración y al fin puedo admitir que estoy perdida y completamente enamorada de Charles Gray, y joder, es tan supercalifragilisticoespialidoso, porque si, no tengo una jodida palabra para poder expresar como me siento, Mary Poppins tenía razón.

Hemos tenido dos semanas completamente geniales, después de que admitiéramos nuestros sentimientos por el otro, pasamos todo el día juntos, y debo admitir que me enamoré un poco más de Charles Gray cuando me explicó que significaba cada canción que le recordaba a mí. Luego de eso Callum y Emma llegaron presumiendo que ellos lo sabían todo y que yo era una tonta por no haberles hecho caso, en fin, Call y Emm siendo Call y Emm; después que ellos se fueran, Charles preparó la cena y fue la mejor hamburguesa con queso y galletas de chips de chocolate que he podido probar. Así que si, en definitiva, estoy perdidamente enamorada de Charles.

Mi celular vibra en la mesita de noche y me estiro para tomarlo con mi mano, arrugo las cejas cuando miro el nombre en la pantalla.

—Hola hermano mayor, ¿Todo está bien? —pregunto cuando acepto la llamada.

Desde que papá tuvo su recaída, cada vez que alguno de los tres llamaba una sensación de pánico inundaba a cualquiera que estuviera recibiendo la llamada y esta vez no es la excepción. Después de la operación Sam, Adam y yo nos hemos estado turnando para quedarnos con papá en el hospital y cuidar de los gemelos en casa, Thony va cuando tiene un espacio libre entre su trabajo y cuidar de los niños y Sophie.

Papá ha tenido un buen progreso, según Josh, está respondiendo muy bien al nuevo hígado y al tratamiento, tanto así que Josh prometió hace dos semanas que hoy le daría el alta, todos estamos ansiosos y emocionados por tener a papá ya en casa, sobre todo los gemelos, quienes son los que menos lo han visto. Así que, recibir esta llamada de Thony, justo cuando hoy pretenden darle el alta a papá me genera un mal sabor de boca.