𝗟𝗨𝗖𝗞𝗬 || ༄ Elle White siempre ha sido una chica tímida, preciosa y sumisa. El sueño de cualquier hombre misógino. Al crecer en una familia de renombre desde muy pequeña aprendió a comportarse y ha ser la chica más cordial, ni siquiera se le per...
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Elle
Me despertaron las alarmas que ellos mismos me colocan para no dejarme descansar bien. Por más que pasan los años se rehusan a dejar de torturarme.
Tape mis oídos y luego vi como entraban a mi habitación dos soldados.
— Ya esta tu nueva misión, andando.
Los seguí con Nala en mis brazos y al llegar a la oficina principal vi a Bennett sentado allí y esperándome. Me lanzó un portafolios con papeles dentro.
— Allí esta, sales en una hora. — asentí.
Salí de allí comenzando a hojear los documentos... No tenía mucha cabeza para leer ahora mismo... Ignore el punzante dolor en mi pecho y seguí caminando hasta mi habitación, me recosté en mi cama y comencé a equiparme.
Me puse unas medias negras y una falda de el mismo color con tablones que me llagaba más allá de la rodilla, al igual que una camisa de el mismo tipo que la de ayer, transparentosa y que dejaba ver mis pechos cubiertos por un sostén negro, iguales a mis botas de plataforma y pegadas a la pantorrilla. Puse en mi cuello la cadena de Leon y bese esta.
Deje a Nala allí y llame a Killian Walker... El hermano de Denver.
— ¿Puedes cuidar a Nala por favor? — él asintió tomando a mi gatita en sus brazos y recargando su barbilla en ella. — Killian... Lo lamento mucho, yo... Yo no pude hacer nada. — mi voz se rompió. — Te juro que si lo hubiera podido salvar lo hubiese hecho... Enserio... Enserio lo siento.
— Tranquila... No fue tu culpa. Él quería morir de una manera heroica... Ya sabes como era. — soltamos una risa. — Me dijo que... Que si moría te dijera que nunca le había gustado una chica como le gustaste tú y que... Y que te quería mucho.
Solté una lágrima... Ese idiota, como lo extraño.
— Gracias, Killian. — abracé a mi amigo y luego salí de allí directo a la armería.
— Mi querida Ellie. — me llamó Morgan, el mejor creador de armas que existe. — Te tengo nuevos obsequios.
Me dió mis ametralladoras de siempre, unas pistolas con silenciador y además me sentó en una silla para comenzar a poner un lente en mi ojo derecho, era rojo.
— Este pequeño cuenta a las personas que tengas a la vista dándote un número certero de enemigos. — asentí. — Además de que dará toda su información, completa muñeca. Nombre, ocupación, cuenta bancaria, edad...
— Quiero una cadena. — lo interrumpí.
— Te estoy dando lo mejor de el avance tecnológico y me pides una vulgar y medieval ¿Cadena? — asentí.
— Gruesa.
Asintió suspirando y yendo a buscarla. Yo me quité ese estorboso lente y lo guarde en mi bolsillo para también guardar en mi espalda mis metralletas y a los lados de mis piernas mis pistolas. Coloqué unos cuchillos en mis botas y tome unas granadas colocándolas en mis medias.
