Serendipia.

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[1]

Maldita. Sea.

Pablo no podía creer lo que la hoja decía. Imposible, simplemente aquello no podía ser cierto. Levantó la mirada y vio a Frenkie, quien tenía una expresión de asombro e incredulidad en su rostro. La diferencia era que el neerlandés tenía una sonrisa.

Debió sospechar desde el principio, cuando el personal médico solo había pedido la presencia de dos personas en específico y del entrenador.

¿Cómo saberlo? Aquella hoja dice que tiene 9 semanas, pero Gavi no presentaba ningún malestar, no náuseas, no mareos, no cambios.

Mataría a Lewandowski. A él y a su calentura de verano.

La sala de chequeo estaba en silencio, cada persona estaba asimilando la noticia.

Ahora estaban ahí, de un lado estaban los resultados de su biometría hemática y a su otro lado los resultados positivos de la presencia de GCH [2].

Frenkie, en cambio, después de cinco años buscando ser padre, por fin se estaba cumpliendo su anhelo. Sentía el llanto en su garganta, y las lágrimas inundar sus ojos.

Por otro lado, el entrenador Xavi no sabía que decir, no había mayor confirmación que las pruebas positivas en sangre. Sus dos mayores goleadores embarazados.

Justamente cuando estaban por irse a Estados Unidos a jugar la pretemporada. No podía cancelar sus boletos, ni quitarles su lugar de la planilla.

—Si todos están de acuerdo, podemos ver por medio del ultrasonido que todo esté bien con los fetos. —dice el doctor en un intento de apaciguar el ambiente tenso del consultorio.

Xavi miró con seriedad a sus jugadores, Gavi sentado en la camilla con la cabeza baja y Frenkie de pie, sus manos arrugando la hoja en el proceso.

Un embarazo no era cualquier cosa, menos en un hombre, implicaba demasiados cuidados y responsabilidades, no solo del papá gestante si no también del otro padre.

—¿Se puede saber cómo fue que ambos tuvieron este descuido? —se cruzó de brazos, ignorando al doctor a su lado—. ¿Son conscientes del impacto que esto trae al equipo?

Ambos chicos se dedicaron una mirada llena de complicidad, pero también con algo de culpa y vergüenza. Recordando cada uno la fiesta que tuvieron.

—Después de celebrar con el equipo y los fans en las calles de Barcelona, junto a Ferran y Pedri decidimos ir los 6 a un antro en el centro para celebrarlo nosotros. Creo que... Fue ahí.

Gavi no creía, lo confirmaba. Sus cuentas no fallaban, esa vez él y Robert habían llegado con las hormonas y él libido al máximo, ni siquiera les importó llegar a la habitación. Se sentía tan confiado en ese momento por el tratamiento hormonal que le proporcionaban en el club que no le preocupó tomarse alguna pastilla o exigirle al viejo el condón.

—Espera, ¿lo hiciste en el antro? —Gavi miro con una ceja alzada al rubio.— ¡No puede ser! ¡¿Por eso estaban todos se esprintados y con la ropa desarreglada!?

Gavi soltó varias risas incrédulas de la revelación que acaba de tener.

Ninguno se había tomado el tiempo de platicar lo que había sucedido después, cuando cada pareja se 'despidió'.

—¿Por qué me miras así? ¿Qué tú nunca lo has hecho en el baño de algún antro? —Frenkie se cruzó de brazos intentando parecer intimidante.

Azul & Gris |  Lewavi & MarcFrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora