Gotas de Verdad

Capítulo 1

10 años después...

Pov Melanie

Gruñí al sentir los rayos de sol en mis ojos al despertar. Tapé mi cara con la almohada, pero no pude volver a dormir por dos razones, la primera, era incómoda la posición que tenía cuando puse la almohada en mi rostro, la segunda, Mary.

Ella no solo era mi institutriz, también era mi única amiga... Una amiga a la cual podía contarle todo, como me sentía, como pensaba. Era la persona a la que más quería pero a la que mas odiaba cuando hacia este tipo de cosas.

- Es hora de despertar, Mel. Tu padre y tu hermana te esperan para desayunar. Hoy será un dia productivo, ¿Sabes? 

- ¿Por qué? - Pregunté con voz adormilada.

- Porque todos los días son productivos. Y además, hoy veremos un nuevo tema en álgebra.

Enterré más mi cara en la almohada. ¿Álgebra? ¿En serio? Que manera de empezar el dia. 

- Mary... Una pregunta.

- Todo lo que quieras.

- Eso de álgebra... ¿Lo dijiste para que me den ganas de despertar, o para que me den ganas de seguir durmiendo? 

- Oh, Mel. 

Me senté en el borde de la cama. Podía sentir mi cabello despeinado apuntando a todas las direcciones de mi habitación. 

- Dúchate y baja a desayunar. Te estaré esperando. 

Mary salió de mi habitación dejándome sola. Podía seguir durmiendo y esperar a que ella volviera a despertarme, o podía hacerle caso, y como yo era una niña muy responsable, decidí lo segundo...

Sí, claro.

- ¡Melanie!

- ¿Hm? - Abrí los ojos.

- Creí que te estabas duchando, pero paso una hora y no bajabas. Tienes suerte de que tu padre apenas esta alistándose. 

- Vale, vale.

Me metí al cuarto de baño. Unos minutos mas tarde ya estaba lista para bajar. Me había puesto unos Jeans y una sudadera, y había dejado mi cabello suelto. Para mi, era mejor estar cómoda que estar con un vestido apretado solo para estar en casa, justo como lo hacia Lyin, mi hermanastra.

Bajé al comedor acompañada de Mary, y unos segundos mas tarde vi a Lyin llegar, junto a su dama de compañía, Sophia. Mi padre ya nos estaba esperando sentando en la mesa, y cuando nos vio a ambas, sonrió.

- Las estaba esperando. ¿Como amanecieron? 

- Muy bien, padre. ¿Y usted? - Respondimos al unisono. 

- Muy bien, gracias. Espero... Que disfruten del desayuno. 

Mary y Sophia se fueron, y nosotras nos sentamos junto a nuestro padre. El desayuno estuvo delicioso, el jugo era de naranja, comimos fresas y huevos con pan de trigo.

Al terminar, Lyin empezó a contar algo sobre un viaje a Bruselas que había hecho hace dos semanas. No le preste mucha atención. En realidad, estaba pensando sobre un libro que había terminado el dia anterior, estaba imaginando como seria mi vida si algo como eso me hubiera pasado, hasta que mi padre dejo el comedor y quedamos solas mi hermana y yo.

- Entonces, Melanie, ¿Que has hecho? - La voz de Lyin me había devuelto a la realidad.

- ¿Huh? - Levanté mi mirada y la miré a los ojos - Sí, sí, me encanta tu maquillaje. 

- No te pregunte eso.

- Ah, ¿no?

- Te pregunte sobre lo que has estado haciendo... Cuéntame de ti, hermanita. Haz algo para que se me quite el aburrimiento, para eso te adoptaron. 

Miré abajo por un segundo y la volví a mirar.

- No me adoptaron para eso, Lyin. Y no puedo contarte ahora, lo siento. Tengo clase.

- Y según tu, ¿para que te adoptaron?

- No lo sé.

- Lo hicieron porque yo le dije a papá que quería una hermana.

- Bueno... Pero será después. Yo tengo clase, y tu también - Me di la vuelta y camine hacia mi estudio.

Pude sentir su mirada en mi mientras me alejaba, pero me tranquilice cuando vi a Mary. Ella empezó a darme clases, pacientemente como siempre lo hacía. Eso me hizo sentir feliz y segura.

Lo que no sabía, es que en esa noche, pasaría algo que me cambiaría la vida.