Soy una Belleza Absoluta

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Du Jiuyuan dejó escapar un suspiro de alivio. Ella pensó que Ji Jingchen había notado que algo andaba mal y envió a Jiang Cheng para que la vigilara. Eso habría causado que todos sus esfuerzos se desperdiciaran por completo.

Jiang Cheng le había dicho que Ji Jingchen asistiría a la fiesta de cumpleaños de un pez gordo en el círculo empresarial esta noche y necesitaba una compañera.

"No tiene nada que ver conmigo." Mientras Ji Jingchen no viniera a verla, a Du Jiuyuan no le importaría que la maldita boda se pospusiera dos años, y mucho menos dos días.

"Señora, esta es la solicitud del CEO Ji. Por favor, comprenda y no me haga las cosas difíciles". Jiang Cheng estaba muy angustiado. El temperamental Ji Jingchen ya era muy difícil de complacer, ahora los repentinos preparativos de la boda desde los últimos días habían hecho que Jiang Chen estuviera aún más ocupado.

Du Jiuyuan entendió muy bien el temperamento de Ji Jingchen. Si ella se negaba a acompañarlo, Jiang Cheng sufriría la ira de Ji Jingchen. A pesar de que actualmente estaba planeando un escape, aún debería confundir a ese molesto hombre.

"Iré a cambiarme". Du Jiuyuan se levantó y regresó a su habitación.

Estaba cada vez más confundida acerca de lo que Ji Jingchen pretendía hacer. ¿Podría estar planeando exponer su relación al público?

Si esto hubiera sucedido antes durante sus días felices, Du Jiuyuan habría estado tan encantado y no podría dormir durante tres días y tres noches.

Du Jiuyuan eligió un hermoso vestido largo dorado que revelaba sus hombros. Su cabello estaba caído casualmente y se puso un poco de maquillaje simple.

Cuando salió de la habitación, no vio a Jiang Cheng, sino a Ji Jingchen con un esmoquin negro.

En el momento en que vio a Du Jiuyuan, los ojos de Ji Jingchen brillaron con sorpresa. En el pasado, Du Jiuyuan siempre se vestía de manera muy simple e informal. Rara vez se maquillaba, lo que hacia que su rostro se viera limpio pero no llamativos.

Ahora que se había arreglado un poco con un vestido de noche formal, se vio realmente llamativa.

Du Jiuyuan no sabía que vendría Ji Jingchen. Su expresión era un poco solemne. Ella dio un paso atrás para mantener una distancia de él, con los ojos un poco nublados.

"¿Por qué estás aquí?"

"Para recojerte".

"¿Vamos a partir ahora, entonces?"

Los dos tienen una rara armonía entre ellos, como si diferentes de lo habitual.

Ji Jingchen dijo sus pasteles. Aún no se había cambiado los zapatos.

Du Jiuyuan volvió en sí. Escogió un par de tacones dorados que combinaban perfectamente con su ropa. Justo cuando estaba a punto de agacharse para cambiarse los zapatos, Ji Jingchen ya se había agachado suavemente. Rápidamente recogió los zapatos y se los cambió con cuidado.

Respiró hondo y miró las acciones de Ji Jingchen, sumida en sus pensamientos.

En realidad, esta no era la primera vez que se ponía zapatos para ella.

Todavía recordaba que durante una excursión de primavera en la universidad, había caminado muy lejos con un par de zapatos que no le quedaban bien, lo que le usaban ampollas en los pies.

Llamó a Ji Jingchen y le rogó que fuera a buscarla.

Cuando todos se habían ido y ella pensó que Ji Jingchen no vendría, él apareció de arrepentimiento y pareció como si estuviera gratamente sorprendido.

En ese momento, Ji Jingchen no dijo nada. Simplemente se agachó, le quitó los zapatos y los tiró. Luego, la llevó al auto.