por primera vez en mucho tiempo, kinn se siente intrigado.
en contra de su mejor juicio, hace una apuesta.
- sangre y violencia
- porsche es un luchador ilegal
- kinn es un poco malo (bastante)
- dinámica de poder
- BDSM ligero
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Kinn observa cómo Porsche trata de no reaccionar. Ha sido tan cuidadoso toda la noche para mantener sus verdaderas expresiones cuidadosamente guardadas, algo que Kinn ha encontrado infinitamente fascinante, pero Kinn lo ve deslizarse ahora.
Observa la forma en que su garganta se balancea en un trago tenso, la forma en que sus pupilas se dilatan en charcos negros, la forma en que sus labios se separan muy levemente con la inhalación brusca de su aliento. Con la barbilla sostenida por la mano de Kinn, Porsche no puede ocultar su rostro. No puede ocultar el breve destello de emoción que se desliza por sus rasgos.
Kinn lo reconoce por lo que es, como lo reconoce dentro de sí mismo.
Deseo.
No importa cuán terco y desagradable se comporte Porsche, está claro que la forma en que Kinn le habla le afecta, lo afecta más de lo que quiere que Kinn sepa. Así que Kinn espera a ver qué hará Porsche, con el corazón acelerado en su pecho demasiado apretado. Una parte de él espera que Porsche se arrodille como le han dicho.
Otra parte de él espera que no lo haga.
Kinn siente que una sonrisa comienza a dibujarse en sus labios cuando la cara de Porsche se contrae en un gruñido. Sabe lo que va a hacer un momento antes de que Porsche golpee la mano que sostiene su barbilla, pero aún lo siente como un trozo de hielo a través de sus venas, haciéndolo sentir completamente, salvajemente, vivo.
Entonces, Porsche empuja el pecho de Kinn, haciéndolo retroceder medio paso. Se encuentra con los ojos de Kinn mientras lo hace. Hay un borde en su expresión, un borde de humor. Porque Porsche sabe exactamente lo que está haciendo y disfruta haciéndolo de todos modos.
Kinn nunca ha conocido a un hombre con un desprecio tan imprudente por su vida.
Kinn podría hacer que lo mataran por ponerle las manos encima de esta manera, Kinn sabe que Porsche es lo suficientemente inteligente como para haberlo descubierto. En ese mismo momento, Ken y Big estaban justo al otro lado de la puerta cerrada, y ninguno dudaría en poner una bala entre los ojos de Porsche si eso era lo que exigía Kinn. Solo por la falta de respeto, Kinn había hecho cosas mucho peores con personas mucho más importantes que Porsche.
Pero Kinn no quiere hacerle eso a Porsche.
El fuego y la pelea en Porsche habían sido exactamente lo que lo había hecho sentarse y prestar atención cuando se contoneó por primera vez en la arena para enfrentarse contra todo pronóstico. La racha de desafío caótico y peligroso de Porsche es como el primer golpe de cocaína para Kinn, deslizándose bajo su piel y haciendo que su corazón se acelere en su pecho, haciendo que el mundo mismo parezca de alguna manera más brillante e infinitamente más interesante. Su estómago se retuerce de hambre .
Porsche lo está observando, esperando que reaccione, su cuerpo rígido como si estuviera anticipando que Kinn atacaría. Está sonriendo, la pequeña mierda engreída.