Mátame si puedes -COMPLETOS-

Capítulo 5: El collar

Capítulo 5

El collar

Harry se despertó con el hombro entumecido y dolorido. Tracey lo estaba usando como almohada y tenía los brazos envueltos alrededor de su mano. Su cabello moreno estaba abanico, cubriéndose la cara y el cuello.

Una sonrisa se extendió sobre su rostro mientras se extraía de su control.

Lentamente se deslizó fuera de la cama y se paró a su lado para verla murmurar algo y acurrucarse más profundamente en la almohada. Se rió en silencio para no despertarla.

"Ella es muy linda." Harry murmuró soñadoramente al ver su rostro adorable.

Decidió dejarla dormir un poco más.

Después de ducharse, usó su ropa y fue a despertarla. Se sentó a su lado y pasó los dedos por su cabello sedoso. Él le empujó el hombro suavemente.

"Despierta, Tracey. Ya son las 7:30 ", dijo.

Ella gimió y enterró su rostro en la almohada. Le cepilló la mejilla con los dedos, con la piel tibia contra el tacto.

"Tracey, vamos, despierta, tenemos que visitar a Daph". la engatusó mientras le sacudía el hombro nuevamente.

Poco a poco abrió los ojos.

"Harry? ¿Qué haces en mi cuarto?" Ella preguntó con ojos llorosos.

Harry simplemente levantó las cejas.

"Querida, esta es mi habitación. ¿Olvidaste lo que pasó ayer?"

Sus ojos se abrieron cuando recordó cómo Daphne había resultado herida y cómo tenía miedo a las pesadillas y había decidido acostarse con Harry.

"Oh, sí, lo recuerdo ahora. Gracias, Harry, por no hacerlo raro ". Sonrió torpemente mientras se sentaba.

Harry se rió entre dientes cuando la abrazó. Ella suspiró cómodamente, sintiendo su cálido cuerpo presionado contra el de ella. Estaba un poco decepcionada cuando él retrocedió.

"Buenos días, Tracey. ¿Dormiste bien?" El le preguntó a ella.

Ella asintió.

"Ve a tu habitación y refréscate entonces, para que podamos ir a ver a Daph". él sugirió.

De repente parecía angustiada.

"Cómo evitaremos que todos mencionen esto a los profesores? Esto va en contra de la regla, una niña durmiendo en la habitación de un niño."

Harry sacudió la cabeza.

"No te preocupes, haré que todos olviden esto. Ve a tu habitación ", le aseguró.

Ella asintió y comenzó a buscar la puerta, pero se detuvo a mitad de camino. Ella regresó y se paró frente a él, moviéndose nerviosamente.

Estaba divertido porque imaginaba lo que ella quería hacer, pero tenía miedo de comprometerse.

"Estará bien si beso tu mejilla? Quiero decir, no solo una vez, sino cuando quiera?" balbuceó rápidamente, su rostro se puso rojo en cada palabra, sabiendo lo estúpida que sonaba.

Harry resopló mientras le ofrecía la mejilla.

"Por qué evitaría que una linda chica me besara?" Sus ojos centellearon de alegría.

Tracey puso los ojos en blanco sobre él, pero presionó los labios sobre su mejilla. Ella retrocedió y le sonrió, lo que se convirtió en una risa vertiginosa. Se sorprendió cuando Harry agarró su rostro en sus palmas y la besó en la mejilla.