Sin juego, sin vida [Tet x OC] FINALIZADA

capítulo 17

Volar es lo mejor, lo juro. Llegué al castillo en poco tiempo donde viven la idiota sora y Shiro. Todavía no puedo creer que sean los representantes de la Imanity. ¡¿Esos dos?! ¿No había otros candidatos? Claro, se lo daré a Shiro, pero... vamos, ¡¿no había NADIE más para tomar el lugar del rey?! Hmph... está bien, está bien. Duele admitirlo, pero Sora puede tener sus altibajos a veces... y puede ser inteligentes cuando quieren serlo. Ugh, solo pensar en admitir esto me da ganas de vomitar. Me prometí a mí misma que nunca le diré estas cosas por adelantado o de lo contrario se llenará demasiado de sí mismos.

Floto mi camino hacia la ventana del dormitorio principal tratando de ver si puedo terminar entrando por la ventana porque ¿por qué no? Desde lejos, solo veo a Sora acostado en la cama y nadie más en la habitación. Me abro paso por encima de la ventana y me cuelgo boca abajo para saludarlo, con solo mi cabeza asomada en perspectiva. Mi pelo largo termina impidiendo que el sol entre en la habitación, lo que hace que Sora preste atención a la repentina oscuridad.

"Sup perdedor".

"¡AHHHH!" Y ahí va cayéndose del lado de la cama.

"¿Vas a abrir esta ventana o no?"

"¡¿Aldis?!" Intenta imprudentemente ponerse de pie, pero se tambalea en su camino hacia la ventana. Abrió los pestillos y empujó los cristales para abrirlos.

"¡¿Cómo diablos llegaste allí?!"

Me puse en posición vertical y floté hacia abajo dentro de la habitación del palacio para enfrentarlo. Cerré un ojo y me llevé el dedo índice a los labios. "Secreto."

Lo siguiente que supe fue que me dieron un abrazo. "¿Dónde has estado? ¿Lo que le pasó? Todos hemos estado muy preocupados".

El abrazo duró poco, y cuando nos separamos, le dije: "Te lo cuento en otro momento porque es una historia muy larga y no tengo mucho tiempo en este momento, pero solo quería contarte que estoy bien."

"Bueno. Es genial escuchar eso... ¡¿Pero cómo estás haciendo eso?!" Señaló la brecha obvia entre el suelo y yo.

En ese momento se abrió la puerta de la habitación y una avalancha de chicas entró llamando a Sora. La primera que reconocí fue Shiro y mi reacción inmediata fue abrazarla. Luego escuché a Shiro y la voz familiar de Steph cuestionar mi presencia.

¿Aldís? Dijeron al unísono.

Steph exclamó: "¡Estás bien!". Me abrazó mientras yo aún abrazaba a Shiro.

Todos nos soltamos y les aseguré: "Sí, estoy bien. Lo siento por preocuparlos chicos. Estoy bien ahora. Me froto la nuca avergonzada.

Miro a mi alrededor para ver a cierto flügel que reconocí de la biblioteca. Tet me informó que esas criaturas no deberían ser temidas como lo eran antes porque llegaron con los términos de paz de Disboard y me prometieron que no hay más asesinatos de dioses. Me acerco a ella para disculparme, "Lo siento por lo de antes, flügel. No debí haber reaccionado como debí. Fue solo que recordé la Gran Guerra en tu presencia y me sobresalté un poco. Tet mismo me dijo que los de tu especie ahora están en buenos términos con los dioses y ahora lo entiendo. Me complace conocerte. Le doy una sonrisa tranquilizadora y levanto la mano para estrecharla. No suelo ser tan formal, pero cuando se trata de saludos y disculpas, es correcto hacerlo.

En mi perspectiva, no puedo ver las reacciones al intercambio formal de los demás, pero lo que sí veo es un ligero levantamiento de cejas y un jadeo proveniente de la flügel cuando comprendió la información que le acababan de decir, y cuando vio la representación de color en mis ojos, ella inmediatamente se arrodilló y se inclinó respetuosamente con su mano derecha sobre su pecho. "El placer es todo mío, oh grande. Yo debería ser el que se disculpa. Por favor, perdóname por no reconocer a alguien de tu ser antes y asustarte. Yo, Jibril de los flügel, clasificado sexto en Exceed, miembro del Consejo de las Alas, me siento profundamente honrado de conocer a su conocida, Diosa de la Creación".

Antes de que pudiera darme la vuelta para ver la reacción de aquellos que acababan de ver y escuchar a Jibril, ya estaba tratando de levantarla de sus rodillas y actuar como si nada hubiera pasado, pero en realidad, eso no iba a pasar. ¡Dijo demasiado delante de todos! Mientras intentaba tirar de su brazo, comenté: "¡Jejeje, Jibril! ¡No hay necesidad de ser tan amable y formal! Ahora somos amigas, ¿verdad? Y nadie escuchó una sola palabra de lo que acaba de decir, ¿verdad? ¡Jejeje!" Ya siento las gotas de sudor caer de mi frente. Parece que habrá muchas explicaciones que hacer más tarde.

Gire para mirar a los tres que no participan en nuestro intercambio y los encontrará sin palabras, mirándonos fijamente a las dos. Suspiré, sabiendo que no había forma de salir de esta. "Soy Aldís, Diosa de la Creación. He existido en este mundo mucho antes de que se creara Disboard. Durante la Gran Guerra, cuando los dioses lucharon por el título del Único Dios Verdadero, me fui y terminé en Tokio, donde conocí a Sora y Shiro. Cuando ustedes dos se fueron, imagino que tenía suficiente poder para regresar, así que decidí volver a este mundo para tratar de averiguar qué le sucedió después de la guerra. No me di cuenta de que sería reconocido como una criatura además de un dios, pero supongo que no podría evitar que se les anuncie así a ustedes".

Sus reacciones fueron todas tan diferentes y extrañas que era risible. Shiro parecía realmente sorprendida como cualquier otra persona, Steph se inclinaba furiosamente creyendo que estaba mal que no se inclinara desde que me conoció, y la boca de Sora estaba en el suelo. Parecía que estaba tratando de decir algo mientras me miraba fijamente con un dedo apuntando y con la boca abierta, pero no salió nada. Estaba tartamudeando por todos lados. "A-Adl... Gg-dios... ¿¿pp-poderes?...... ¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿

Mis ojos brillaron de emoción cuando me di cuenta de las cosas que podía hacer para vengarme de Sora. Le di una mirada maligna. "Hey Soraaa~" Levanté mi dedo índice y dibujé una pequeña llama para mostrar un poco de magia. "No tengo ninguna razón para ocultar ningún secreto ahora. Entonces, ¿quieres decirme ahora por qué dejaste todas las tareas para mí cuando te fuiste? ¿Hmmmm? Tarareé mientras me acercaba lentamente con mi pequeña llama del tamaño de un dedo.

"¡E-Ella realmente es una bruja!"