Capítulo 5

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Me sentía nerviosa, ansiosa y muchas cosas más, después del beso con Yuma no había pensado en nada más que eso, por más que lo intentara, mi miente siempre regresaba a ese momento.

Por alguna razón, Jo había pasado por mí en la mañana para ir juntos hacia la escuela, en verdad me emocionaba el hecho de que haya encontrado un poco de tiempo para mí.

Tenía tanto que no caminábamos juntos hacia la escuela, que comenzaba a extrañarlo, pero eso era algo que no podía expresar en voz alta, sabía cuál sería su respuesta si yo llegaba a decir eso, él ya tenía novia así que la mayor parte de su tiempo libre debía ser dedicado a ella.

Pero justo ahora, el tema de Jo y su novia era segundo plano, había algo que no podía apartar de mi mente por más de un segundo.

— Jo... —llamé su atención, pero después me arrepentí.

Necesitaba ayuda para poder poner en orden el lío que tenía en mi cabeza, necesitaba apaciguar el tornado en mi interior, pero no sabía cómo hacerlo, y era normal, era obvio que no sabría como tener en orden algo que apenas experimentaba por mí misma, necesitaba ayuda de alguien más, alguien con experiencia en el tema, Jo fue la primer persona en venir a mi mente, pero debía admitir que Jo a veces era algo difícil de tratar, ¿cómo se suponía que le diría que él interrumpió mi primer beso?

— ¿Pasó algo entre Yuma y tú? —me sorprendí al escuchar su respuesta.

¿Habrá visto algo? Él llegó justo en el momento, pero no sabía si había hablado antes de entrar al aula o había hablado cuando nos vio, para interrumpir eso.

— Es mi compañero de asiento —desvié el tema. Tal vez no debía decirle aún o tal vez él no era la persona indicada para hablar del tema.

— Pero... ustedes, parecen ser muy cercanos —dijo confundiéndome, eso era imposible.

— ¿De qué estás hablando Jo? —Yuma y yo apenas y hablábamos un poco, aunque después de lo sucedido dudo que mis nervios me dejen siquiera dirigirle un "hola"

— De que pasas más tiempo con él que conmigo, y yo soy tu mejor amigo, no él. —una de mis cejas se elevó lentamente y uno de mis ojos comenzó a tintinear por un corto tiempo.

— Casi no paso tiempo con Yuma —¿o si—. No fuera del aula, es mi compañero de asiento, y eso es gracias a ti, porque si no mal recuerdo, el lugar a lado de Nori era mío, pero decidiste quitármelo por culpa de tus hormonas alborotadas de novio primerizo.

Reclamé aquello que siempre había querido, y no era por el hecho de sentarme al lado de su novia, sino porque él la había preferido a ella y a mí me había dejado sola, por mucho tiempo fui la chica sin compañero, eso no sería molestia de no ser porque en los trabajos en pareja era vergonzoso para mi ser la única persona sola, era triste, eso hasta que llegó Yuma.

An Unforgettable Autumn  > YumaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora