How I Met Your Father (Yax)

13. Te amo

Max seguía sentado en su escritorio y miraba atentamente a su dos hijos sentados frente a él, parecían estar bajo un trance, tal vez no se esperaban que la historia sería así.

Makko: –Un momento, ¿En serio, esa historia es verdad ?– el mayor de los jóvenes hablo primero captando la atención de los otros dos.

Max levanto una ceja dudoso –¿Crees que la inventé? ¿Y tu padre y yo realmente no nos conocimos así?– él en sus momentos tampoco se creía que realmente haya pasado de esa forma, pero el destino había querido que fuera así.

Yamk: –Creo que a lo que se quiere referir, Makko, es que parece sacado de una película antigua, por no decir vieja, dónde los protagonistas se encuentran sin importar que y se dan cuenta de que siempre estuvieron destinados por pequeños guiños del pasado– dió una explicación a los pensamientos de su hermano mayor, y vaya explicación.

Max: –Niños, si quieren le pueden preguntar a cualquiera de sus abuelos o tíos y tías, y les dirán lo mismo que yo, esa es nuestra historia y les recuerdo que sin ella ustedes dos ni siquiera estuvieran aquí– se cruzó de brazos mirando acusadoramente a sus hijos.

Makko: –Bueno,bueno, ya entendimos, papá y tú estaban destinados desde el inicio. Viva el amor verdadero, sin importar cuanto tiempo te tardes en encontrarlo– uso un tono sarcástico.

Yamk: –Pues,a mi sí me gustó esta historia, me alegra que nuestros padres fueran felices después de todo– a él no le importaba mostrar el interés por este tipo de temas del amor.

Max: –Cada quien tiene sus puntos de vista, supongo– soltó un leve suspiro, tal vez si les hubiera contado está historia cuando eran más jóvenes la reacción hubiera sido diferente y ahora que recuerda había echo un trato con sus hijos al inicio de todo esto –Bueno, ustedes cumplieron su parte del trato, se quedaron a escuchar la historia de su viejo, creo que es justo que yo cumpla la mía– tomo los objetos que le pertenecían a sus hijos para extenderlos hacia ellos.

Los más jóvenes se miraron mutuamente confundidos, se encogieron de hombros y cada uno tomo el objeto que les correspondía, algo les decía que tal vez este no era el final de esta historia, algo se sentía incompleto o ¿Eran ellos los que se sentían incompletos?

Max noto que sus hijos no se movían de sus lugares y solo miraban sus cosas que les acababa de regresar –Muchachos, ¿Se encuentran bien?– pregunto suavemente, como un padre hace cuando quiere consolar a sus pequeños.

Makko levanto su vista del casco en sus manos para mirar al mayor delante de él–¿Eso es todo? ¿No hay alguna lección? ¿Moraleja? ¿Así de fácil nos regresas nuestras cosas y ya?– no podía creer que así de fácil se había acabado todo.

Max levanto una ceja confundido –Creí que estarían felices de recuperar sus cosas, y no hay nada más que agregar, esa es la historia y ese es final, le dejo que piensen libremente si está historia tiene alguna lección para ustedes, y si la tiene espero y sea correcta–su historia si tenía lecciones que valían demasiado para él y esperaba que sus hijos las encontrarán también y les ayudaron en su futuro.

Yamk estaba por decir algo más pero el sonido de una alarma lo interrumpió.

Miro la pantalla de su teléfono, había olvidado que programo una alarma para estar listos cuando llegaran sus amigos –Ya casi es hora de irnos, Makko– dirigió su mirada hacia su hermano mayor.

Makko solo asintió con la cabeza, pronto llegarían por ellos sus amigos, miraba fijamente a su padre preguntando con su mirada si ya podían irse y buscar lo que les faltaba.

Max podía leer fácilmente a sus hijos cuando se trataban de ese tipo de miradas, y está vez no fue la excepción –Ya pueden irse, chicos. No quiero que se les haga tarde– forzó una pequeña sonrisa. Dirigió su mirada a su trabajo que había dejado en pausa y debía continuar.