Último almuerzo

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  Al cabo de unos 20 o 30 minutos llegó Andrea, empapada de sudor, cansada y acalorada. Nosotros la esperábamos con la mesa servida y una sonrisa, en parte de alivio ya que al fin podríamos comer, y en parte (digamos que en mayor porcentaje) por genuina alegría. Ella había traído un nuevo aire juvenil y radicalmente a nuestra pequeña morada, y con el paso de los meses ya se había vuelto una más de nuestra familia.

(Lamento informar que vivir con tu profesora no te da ninguna ventaja a nivel academico, es más, hasta podría decir que es peor ya que ahora no me dejan merendar sin haber terminado mi tarea primero, espantoso y una violación de mis derechos sagrados. Pésimo servicio, no lo recomiendo.)

—Así que... hoy terminaba el trimestre, ¿verdad? —preguntó papá con su habitual tono calmado mientras comía.

—Por suerte —respondió Andrea y resopló —fue un año muy largo, y aun no termina, ahora me quedan las clases de refuerzo con los chicos que van a recuperación —agregó, después de tragar rápido su comida. A ella le gustaba hablar...mucho. No es una queja, las comidas solían ser muy silenciosas, soliamos disociar los dos hasta que terminabamos. —cinco son los que tienen que seguir viniendo si o si, de esos solo 1 se lleva más de 3 materias, el resto la mayoría apenas les falta un punto para aprobar... —Su mirada se ensombreció y sus siguientes palabras salieron con un dejo de tristeza —No se como podrá aprobarlas ese chico, faltó a muchísimas clases y sigue faltando, además fui a su casa a preguntar que pasaba y me doy con que el chico tiene que trabajar para mantener a su familia... —su mirada se pierde en sus pensamientos por unos segundos, su preocupación es palpable. Suspurira y vuelve a enfocarse en su comida —pobre criatura... —murmura para si.

  Gracias a pequeños gestos como este se ganó nuestro corazón y el de todos en la zona, nos envolvía con su abrumadora energía, su amor por su trabajo y sus sinceras intenciones de ayudarnos a labrarnos un futuro. Su llegada fue todo un acontecimiento, para lo público como lo privado: antes de ella apenas si ibamos 5 a la escuelita de chapa alejada de todo al final de la calle de tierra, en la última clase ya eramos casí 20, algunos vecinos a veces solo se pasaban a escucharla enseñar, a entretenerse a falta de algo mejor que hacer, y a aprender algo de paso. La abuela de uno de mis compañeros gracias a ella se decidió retomar sus estudios primarios ya que nunca tuvo la oportunidad de terminar la escuela, ahora ella le enseña a su nieto y a sus hijos; En casa no fue la excepción, revivió con ella, es lo que pasa cuando metes a una extrovertida en medio de dos introvertidos de repente. 

—Mmh... —papá asintió— es algo que pasa mucho acá, con más frecuencia de la que uno quiere imaginar. Pero ya con todo lo que ayudaste hiciste muchisímo más de lo que tenías, todos te agradecen por eso. —él intentó reconfortarla, quizás no seríamos los más diestros en la labia, pero al menos lo intentábamos,teníamos una buena maestra. Provablemente ella después iría a la casa del chico a llebar unos víveres y a hablar con la familia, porque así era ella. 

—Si... gracias —las palabras de papá parece que la animaron un poco, aunque seguía mirando con ojos tristes su plato de comida, hasta que una ligera chispa se encendió en sus ojos—¿Dormiste bien hoy en clase? —me preguntó girando hacía mi.

—¿Cómo? —preguntó papá.

—¿Sabe quién se durmió hoy a última hora, en la clase de educación física? —respondió Andrea, ya con su sonrisa característica en el rostro.

  Yo solo miré hacia otro lado fingiendo demencia. De pronto la comida estaba sorprendentemente degustable y la esquina del techo tenía unas manchas de humedad fascinantes, que bonitas que son las figuras abstractas... quizás deberíamos revisar el techo ahora que lo pienso.

—No —dijo papá sorprendido—¿qué pasó?.

"¿Los cangrejos son inmortales?" me preguntaba.

—Al final de la clase, como hacía mucho calor hicimos una clase de meditación, y la señorita aquí a mi lado se terminó durmiendo toda la hora —dijo y pellizcó con suavidad una de mis mejillas. La risa de Andrea contagió a papá (y por descarte a mí también), comenzó a reírse por lo bajo a la vez que me mandaba miradas cargadas de cariño —la veíamos tan tranquila que al final decidimos dejarla dormir —continúa contando entre risa y risa—no se despertó hasta que la llamé cuando ya se habían ido todos y yo estaba ordenando.

—Ya se las devolveré —bromeé diciéndolo decidida a la vez que me metía un buen bocado a la boca. Al instante mi humor cambió y miré a papá con mucha ilusión —esto está buenísimo,pa.

  Papá me dedicó esas caras de pura dulzura y me respondió con un "gracias" bajito.

  Papá no comía mucho, no comía casi nada a decir verdad. Tengo el leve recuerdo que cuando era niña de que él era un poco más robusto. Pero desde que ella se fue él nunca volvió a ser así. Ahora se esfuerza mucho cocinando, creo que lo hace porque se alegra de verme a mí disfrutando de su comida, como si mi felicidad fuera la suya. Aunque él no sabe que la suya es la mía, así que yo terminé siendo bastante "robusta" como le gusta decir a él, yo digo que tengo rollitos de felicidad.

—¿Y cómo se las devolverás? Eh, chiquilina—dijo Andrea inquisitiva —no irás a usar dientes de los cerdos muertos de nuevo, ¿no?.

(Larga historia, también nos regañaron ese día, pero, las risas no faltaron. Solo diré que así nos manejamos en este lugar: a base de pequeñas bromas inocentes para pasar los días. y también para poner en práctica lo aprendido en clase: "ojo por ojo, diente por diente". No teníamos ojos para repartir(ya que se pudren rápido) pero teníamos dientes... a la profe anterior profe no le gustó esa broma.)

—Ya se me ocurrirá algo, no te preocupes.

—No me preocupo por ti, me preocupo por ellos, —dijo siguiendo la broma —no seas muy mala,¿ok? —dijo revolviedome el pelo —teneles un poquito de piedad.

  No pude hacer otra cosa que reír. 

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  ¿Deberías leerte One Piece? Respuesta: SI, y esta es tu señal. (Ya si no te gusta estas en tu derecho) 

  ¿La autora nos está ocultando algo al no especificar que era lo que los personajes estaban comiendo? ... o es que solo no sabía que comida poner... jeje. 

  Podríamos decir que estaba hecho para que cada lector insertara su comida favorita en su lectura.(Así queda Fancy) ¿Cual es su comida favorita?

Esta y muchas peguntas más en el próximo capítulo :D(?

Muchas gracias por leer, de nuevo. <3<3<3<3<3<3

 Luv U!

Edición después de un año: ahhhh, en casa cortator cebollas y me arde los ojos ahhhhhh, así no se puede trabajar che! :,,,,,,(

La merced de las Flamas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora