Forever in my memory. |Liam Payne| ©

La despedida.

Ya no llores-dijo Kate- Por favor Kate, es la fiesta de despedida de Liam, ¿cómo quieres que no llore?-dije limpiando mis lágrimas- Sólo se irá a Australia, no morirá-dijo y la abracé
Mi vestido estaba perfecto, era azul marino con algunos toques plateados, me había puesto algo de maquillaje, ayer habíamos salido oficialmente de la escuela, bueno, del penúltimo grado, Liam se iba mañana por la mañana a Australia, algunos amigos de él y yo habíamos organizado una fiesta en casa de Kate, para despedirlo como se merecía. Yo estaba ansiosa, Liam llegaría pronto junto a Chris, él le había dicho si salían a comer algo, Liam siempre aceptaba salir con Chris, después de todo era el único "mejor amigo" que tenía aquí, se llevaba con todos pero Chris siempre le tendió la mano desde que llegó.
¿Tus padres no están?-dije y ella negó con la cabeza- Vendrán el próximo fin-dijo maquillándose un poco, el lunes ella cumpliría 17- No puedo creer que él se vaya-dije sentándome en su cama- Ni yo, aún recuerdo cuando llegó, era un enclenque, admítelo-dijo riendo- La verdad, pero así me gustó-dije y salí de ahí
Ya habían ordenado todo, la música, la comida, el refresco, alguien incluso pensó en traer alcohol, pero Kate controló la situación al instante, ella era muy ruda para esas cosas. Él llegó y todos gritamos sorpresa, me abrazó fuerte y susurró "Ahora entiendo porque no querías salir conmigo" y besé sus labios, lo amaba mucho.
Vamos a bailar-dije tomando su mano- Con mucho gusto-dijo feliz
El encargado de la música puso algo muy movible, estaba de moda. Bailamos unas dos o tres canciones y nos fuimos a sentar a un sillón de la sala de Kate, todo estaba perfecto, bebimos algo de refresco y seguimos en la fiesta, ayudé a Kate a repartir los aperitivos que habíamos pedido, eran algo así como mini-pizzas, jamón envuelto con queso Philadelphia, sándwiches pequeños, aceitunas, quesos, entre otros, Liam estaba divirtiéndose mucho, después de todo, para él era la fiesta.
Esto está increíble-dijo él tomando mi cintura- Que bien que te guste, te tengo un regalillo, pero eso será después-dije besando su cuello- ¿No puedes adelantarlo?-dijo besando mis labios- No-dije riendo
Él me tomó la mano y subimos los escalones, se aseguró que nadie nos viera, llegamos a una de las habitaciones que estaban al final del pasillo, eran las de visitas, abrió con cuidado y ambos entramos, le puso seguro a la puerta y nos sentamos en la cama, traía en mi bolsillo una pequeña pulsera que le había comprado.
Es para ti-dije entregándole la bolsita- Gracias-dijo sonriendo
La abrió, miró dentro y la sacó, ahí traía grabada la fecha en que nos conocimos y nuestras iniciales, yo tenía una igual, él se la puso alrededor de su muñeca, me agradeció muchas veces y sólo le susurré "Espero que siempre me recuerdes, porque tú siempre estarás en mi memoria, Liam", él se estremeció y me puso sobre el colchón, me besó el cuello y susurraba "No esperes que te olvide, eso será difícil", sus labios dominaban mis labios y mi indefenso cuello, gemía suavemente sólo para sus oídos, él bajó el cierre de mi vestido y se deshizo de el, mi cuerpo era tomado por él, sus manos acariciaban mis curvas, desde mis pechos hasta mis caderas, susurró un "Te extrañaré como no tienes idea", lancé una carcajada.
Eres un idiota-dije mientras le quitaba la camisa, botón a botón- ¿Por qué lo soy?-dijo riendo- Porque extrañarás mi cuerpo, no a mí-dije besando su cuello- Extrañaré a ambos-dijo en mi oído- Eso se justifica un poco-dije mientras dejaba una pequeña marca en su pecho
En unos segundos él ya me había quitado el sostén, dio un masaje a mis senos, eso me encantaba, sus manos eran grandes, suaves y muy tiernas, jamás me había lastimado las veces que hicimos el amor.
He pensado en operarme los senos-dije, él se detuvo un poco- ¿Operarte?-dijo sin comprender- Sí, ponerme un poco más, están muy pequeños-dije mirándolo a los ojos, quería ver su reacción- ¿pequeños? ¿Quién dijo eso? Están perfectos para mí, me gustas tal cual eres-dijo besándolos
Liam y yo hicimos el amor en la casa de Kate, después de todo, sería la última vez en mucho tiempo y debíamos aprovechar el tiempo juntos, el sol se ocultaba y lo vimos a través de la ventana de aquella habitación, él besó mi frente y murmuró algo que no comprendí bien, pero sonreí, lo tenía en mis brazos, conmigo, eso bastaba para estar feliz toda la semana.
Deberíamos bajar-dije intentando salir de su agarre- Un segundo más-aspiró en mi cuello- Liam me haces cosquillas-dije riendo un poco, lo miré a los ojos- Me encanta tu perfume-dijo levantándose
Nos vestimos y bajamos tomados de las manos, nadie notó nuestra ausencia, la fiesta terminó dos horas después, ya eran cerca de las 10:40, Liam debía irse a casa, pero nos ayudó a Kate, Chris y a mí a limpiar, había un desastre por todos lados.
Muchas gracias chicos, fue una gran fiesta-dijo Liam- Claro que lo fue, desaparecieron un largo rato-dijo Chris, me sonrojé- Muevan sus traseros y sigamos limpiando-dijo Kate defendiéndome
Terminamos de limpiar, nos despedimos y subimos al auto, Liam condujo hasta mi casa, se estacionó en mi calle y me tomó las manos, sus ojos estaban clavados en los míos, necesitaba romper el silencio, después de todo, sería nuestra última noche en un largo tiempo. Besé suavemente sus labios.
¿A qué hora sale tu vuelo?-dije curiosa, él sonrió de lado, sólo lo hacía cuando fingía una sonrisa- A las 8, pero saldré de aquí a las 5, ya sabes, por cualquier percance-dijo, él debía viajar a Kansas City para tomar su vuelo a Sydney, la idea me aterraba- Entonces este es el adiós-dije seria, él miraba al frente, igual yo- Sí, este es el adiós-dijo sin expresión- Liam quiero que sepas que te apoyo en esto, quiero que disfrutes de esta experiencia al máximo, y siempre estaré aquí, si decides volver, mis brazos estarán abiertos para ti-dije y él me abrazó fuerte, yo también lo hice- Gracias ___, créeme que ya no quiero ir, podría estudiar lo mismo en Lawrence o en Louisiana-dijo, aunque era verdad no quería verlo rendirse sin haberlo intentado- Oh vamos, Liam, este es tu sueño, igual estaríamos separados-dije riendo, él tenía lágrimas en los ojos- Te amo-dijo y me besó- Te amo más-dije limpiando sus lágrimas con el dorso de mi mano- Prometo que volveré por ti, nos casaremos y tendremos un kínder de hijos-dijo sonriendo, tenía los ojos hinchados- Así será, seremos viejitos y yo te ayudaré a caminar cuando no encuentres tu bastón-tenía que ser fuerte, no podía llorar- ¿usaré bastón?-dijo y reí, él también lanzó una carcajada- Sí, pero yo te ayudaré a caminar siempre-besé su nariz
Estuvimos de nuevo en silencio, él estaba mirando cada facción de mi rostro, grabando cada trozo de piel que estaba a su vista, sacó su celular y murmuró dulcemente "Tomemos una foto", sonreí para la foto, él también lo hizo, sus ojos seguían hinchados, pero se veía tierno, le dije que esa foto era hermosa y sólo por eso no la borró.
Debo irme, porque si no lo hago ahora, ya no lo querré hacer-dije mientras abría la puerta- Te amo-capturó mis labios en un beso
Bajé del auto de sus padres, era la primera vez que Liam no abría la puerta para mí y que tampoco me acompañaba hasta la entrada de mi casa, volteé para despedirme con la mano y aún seguía ahí, él estaba llorando, entré y subí a mi habitación, al asomarme por la ventana aún estaba el auto estacionado ahí, Liam se aferraba a mí, si seguía así debería tomar medidas drásticas, pero se fue, encendió el motor y condujo en dirección a su casa.
Me di una corta ducha, el agua estaba helada aunque pusiera el calentador, me puse un pijama y vi mi teléfono, eran ya las 12:29 am, en unas horas Liam se iría del país. No podía dormir. Después de unos minutos y estando a punto de conciliar el sueño, escuche el timbre de Liam, era un mensaje de él.
"Lo siento por ponerme a llorar, es sólo que tengo miedo. Mucho miedo de perderte, de que todo cambie mientras no estoy, que alguien llegue a tu vida. Te amo demasiado, nunca lo olvides, estarás en mi memoria, en mi pensamiento, en mi corazón y en mi alma, por siempre, para siempre, aunque todo lo que conocemos desaparezca mañana, aún así seguiría amándote y recordándote, siempre"
Lloré, no quería escribirle, no iba a poder escribir algo coherente, terminaría pidiéndole que no se fuera y sólo decidí olvidarme de todo y dormir.