Día 5 - Naruto capítulo 152

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Era increíble, iban de camino al país de los ríos, pero Lee decidió hacer una pequeña parada, quería rememorar «el curry de la vida», al parecer él había tomado el mismo camino hace algún tiempo junto a Gai Sensei, para competir en una carrera durante tres días, en fin, otras de sus tantas ocurrencias.

Y, actualmente seguían otra de ellas, aunque era por una buena causa, podrían comer algo al menos, así que ingresaron sin prisa y tomaron asiento, esperando el delicioso curry que hacía la abuela Sanchō. Mientras que ella preparaba los platillos, Lee indagaba en hechos del pasado junto a la anciana, preguntando por su nieto y otras cosas del pueblo cercano a la tienda.

— ¡Al fin está aquí! —Avisó Rock Lee en tono alto, dejando de lado la conversación anterior.— Muchas gracias, abuela. —Sonrió en grande y dió un gran bocado.

Aquello lo puso rojo hasta las orejas, ¿Realmente era algo normal?, habría que probarlo para sustentarlo, así que todos los presentes también dieron un bocado.

Pasados unos segundos sintieron un cosquilleo en la boca, se sentía como un calambre, en definitiva, no era algo normal. TenTen buscó el vaso de agua que por suerte estaba encima de la mesa y lo tomó con prontitud, aliviando un poco el cosquilleo en su boca.

Fue luego de eso que visualizo a su compañero, aquel que poseía el byakugan, el cuál aún se veía aturdido. Decidió agarrar otro vaso de agua que se hallaba en la mesa y lo llevó a los labios del Hyuga, quien bebió por unos segundos con la mano de la chica, luego fue él el que agarro el vaso, sin notar que la mano de la chica seguía presente, logrando un roce entre ambas pieles que los hizo sentir un escalofrío por todo el cuerpo.

— ¿Ya estás mejor? —Preguntó la joven castaña sin mirar a su amigo, era verdad, había sentido preocupación, pero también había sobrepasado los límites, él probablemente no estaría a gusto con eso.

— Sí... Lo estoy —Tragó saliva intentando hidratar su garganta, acababa de tomar agua, ¿qué era lo que le pasaba?— Muchas gracias, TenTen.

Sin pensarlo ella abrió sus ojos mirándolo con impresión, ¿No estaba enojado?, ¿No le molestó que rompiera los límites?, se sentía en otro mundo, aquel Hyuga engreído y orgulloso dejó de ser él por un momento, aquello no era normal, pero en realidad, nada en esta situación era normal, así que lo dejaría pasar.

Las palabras del chico fueron lo último que se escuchó en aquel diálogo, que nadie más pudo oír, pues intentaban recuperarse de la intensidad del picante.

— Vamos Cejotas ¿Cómo puedes comer esto? —Expresó Naruto empujando un poco al mencionado.

— Es delicioso ¡Gracias a esto la llama de la juventud no tendrá que extinguirse jamás! —Siguió probando aquel manjar que le era presentado, él realmente lo tomaba como un milagro, y así era, el curry lo había salvado.

Aunque ahora había una conversación en toda la mesa, dos personas de allí no lograban escuchar con atención de lo que se hablaba, ambos divagaban en sus pensamientos, que se enfocaban en el contacto anterior, había sido abrumador, extraño y diferente, pero no en el mal sentido, más bien, era especial y aquello los asustaba demasiado, quién sabe que podría ocurrir en un futuro no muy lejano.

Nejiten Month 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora