$ PRÓLOGO

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En un mundo de alfas, los omegas tienen que bajar la cabeza y callar ante prácticamente cualquier cosa, incluyendo faltas de respeto e insinuaciones absurdas.

Jungkook creció en ese mundo vil y cruel, dónde debía frenar cualquier intento por alzar la voz y hacerse notar. Al cumplir dieciocho años, como era de esperarse, fue desposado por un alfa estúpidamente millonario y dueño de múltiples empresas en Corea y parte de América del sur. Si bien, no era un mal camino para él ya que tenía lo que quería y deseaba en la palma de su mano, había algo que el dinero y los lujos no podrían comprar jamás.

El sentimiento de libertad.

Por años vivió bajo la sombra de ese miserable alfa, quien no esperó a que tan siquiera pudiera culminar sus estudios para dejarle en estado, lo que lo llevó a una horrible depresión. Cuando nació la criatura, su vida no fue mejor.

Por suerte un borracho se llevó la vida del miserable que le preñó al cabo de dos años.

Ese trágico accidente fue lo que lo condució directo al éxito. Viéndose obligado a trabajar y mantener la fortuna que heredó del infeliz, bastaron unos años para convertirse en un influyente hombre de negocios, sin nada de paciencia y con una vida llena de altibajos. Empezó a amar tanto el dinero que no tenía reparo en producir más y más y más, sin importar el día o la hora.

Debido a ello, cuando su único heredero Jeon Soobin cumplió los seis años, lo inscribió en la escuela más prestigiosa de todo Corea del Sur. Un par de billetes, contactos acá y allá y un asistente que se encargara de asistir a todas las reuniones y eventos escolares.

Se sentía de puta madre ser libre, y aprovecharía aquella libertad al máximo. Claro que luego de todo lo que tuvo que vivir con el miserable difunto, había endurecido de tal manera que aquel omega sonriente que amaba las flores y se conformaba con migajas había quedado en el olvido.

En un mundo de alfas debías actuar o ser más maldito que uno para poder sobrevivir en la abundancia individual. Eso, le bastó unos seis años entenderlo.

Por eso mismo cuando le llamaron de la escuela por teléfono personalmente a él, sus primeras palabras fueron llenas de rencor.

—¿Que le hicieron a mi hijo? —bramó, dejando de lado algunos papeles que hasta hace segundos habían tenido toda su atención. La mujer tras la línea balbuceó, insegura de decir algo.

Señor Jeon, lamento llamarle directamente a usted, pero temo decirle que Soobin se ha visto involucrado en una pelea con otros niños —Jungkook suspiró alzando una ceja ante lo que la mujer decía—, hirió a un compañero y el padre del niño exije que usted de la cara.

¿Que el qué? Su hijo de seis años sabía defenderse sólo ¿Que clase de escuela era esa? En sus tiempos los niños resolvían sus conflictos entre ellos mismos.

¿Señor Jeon? ¿Sigue allí?

Dígale a ese maldito mocoso que más le vale su padre sea la reencarnación de Buda, porque va a necesitar mucha sabiduría para que yo no lo asesine.








Historia nueva C:

2023

|FATHER AND D$D| TKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora