We will see us again-(Dark Schneider x tu) / BASTARD!!/.

SINOPSIS

15 años antes

En el reino de Metallicana (castillo de Judas). Se encontraban El Rey, El gran sacerdote y una Diosa. Angustiados por lo que acababan de hacer y lo que pronto pasará.

—Gracias al cielo, logramos hacerlo.__ expresó con un profundo alivio en su interior El gran sacerdote.

Habían retenido no por mucho tiempo el "peligro" del mundo.

Alivio y tristeza reinaba en el ambiente.

La Diosa miró hacia el cuerpo de el bebé Lucien Renlen quien ahora tenía dentro de si, a la reencarnación del poderoso y malvado Hechicero Dark Schneider.

—Supongo que mi labor aquí ya ha terminado.__ dijo la Diosa con una profunda seriedad que protegían como un escudo sus sentimientos.

El gran sacerdote Geo Noto Soto miró con compasión y tristeza a la Diosa. Sabiendo perfectamente lo que estaba sintiendo a pesar de tratar de ocultarlo.

El Rey se encontraba sentado en su trono con un aura triste y melancólica, aunque en el fondo estuviera aliviado, su hijo El príncipe Heredero Lars estaba muerto.

La Diosa sentía una gran opresión en su pecho. Sentía que lo había traicionado. Aunque era lo correcto por que estaba salvando al mundo, eso no evitó que estuviera sufriendo por dentro.

—Diosa ________, estoy realmente agradecido con usted.__ dijo el Rey de verdad agradecido.—Honestamente no se que hubiera pasado si usted no estuviera aquí.__

—Yo que usted no me confiaría tanto. Allá afuera todavía están los cuatro jinetes del Apocalipsis.__ Dijo con frialdad. — Y estoy segura que no se mantendrán tranquilos.__

El Sacerdote suspiró con preocupación sabiendo que este no era ni por cerca el final de todo. Sabía perfectamente que la humanidad iba a sufrir más.

La Diosa sentía un gran enojo consigo misma por dejar que esta situación se le saliera de las manos. Se sentía culpable y triste. Y ¿como no estarlo?, Dark Schneider era el hombre que amaba y que siempre amaría aún sabiendo que los dos eran tan diferentes. Lo amaba sabiendo que en su corazón había maldad y ambición. Pero que a pesar de todo ella siempre iba a ser su mayor debilidad y al mismo tiempo, su fortaleza.

Lo amaba tanto. Y estaba segura de que se volverían a ver. Y ella ni siquiera sabía cómo reaccionar cuando le viera cara a cara.

Ellos se habían conocido hace 200 largos años, en una situación no tan linda que digamos. Dark Schneider se encontraba mal herido en medio de un campo de batalla que él mismo había empezado. La Diosa lo había salvado y siempre se sintió agradecido con ella. Fue la única persona que lo había cuidado y tratado con tanto amor y cariño. Que no le importaba que tanta oscuridad él tenga en su corazón, ella siempre lo amo tal y como es.

Y eso todos lo sabían.

Después de ese día en el que ayudó a encerrar a la reencarnación de Dark Schneider en ese bebé, la Diosa había desaparecido sin dejar rastro. Esa fue la última vez que habían visto su hermoso rostro.

Ya nos volveremos a ver, Dark.