•03• 《Decapitación》

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Viernes 27 septiembre 1985.

Un viernes por la tarde, cerca de la puesta de sol que miraba justamente por el gran ventanal frente a mi.

Exhale aire al tiempo que acomode el nudo de mi corbata y me gire completamente para encontrarme con mis restantes compañeros de vida. Metí mis manos a mis bolsillos delanteros y me acerque a ellos y a lo lejos, mire el cajón color azul marino donde descansaba nuevamente el cuerpo de otro de nuestros amigos.

Los cuatro restantes caminamos en silencio mientras nos paramos junto al ataúd y observamos el cuerpo pálido de nuestro amigo sin vida.

Uno de los chicos soltó su llanto y seguido de eso lo sentí recargarse en mi hombro, buscando reconfortarse. Yo, sin apartar la mirada del cadáver, coloque mi mano en su espalda, dándole consolación. En ese momento, elegí al siguiente.

Después de unas cuantas horas, mientras me acomodaba en el agradable sofá de mi casa, sonreí al prender la televisión al tiempo justo que empezaba el noticiero vespertino.

Comencé con mi plato de cereal mientras prestaba atención a lo que decía el calvo sujeto que aparecía dando las noticias, me gustaba escuchar las noticias al día siguiente de mis actos, la esperada información de otro cuerpo encontrado sin vida por algún lugar de Daegu.

Se decía, que todos los cuerpos tenían una similitud.. maldición.

"A este nuevo asesino, le gusta coleccionar los dedos índice de cada una de sus victimas, que por el momento, aun solo han sido tres y lo que el departamento de investigación a resuelto, es que todos ellos eran amigos"

Sonreí irónico por lo que el sujeto había dicho, ya era hora que notaran algo tan fácil e importante.

Admito que mi autoestima se elevaba demasiado cada vez que mencionaban mi nombre como "El nuevo asesino serial"

Se que soy inteligente haciendo lo que hago.

Me emocionaba escuchar como decían que solamente me divertía con ellos y que solamente dejaba ver lo que yo quería que ellos vieran, y era totalmente verdad.

Me empine la pequeña botella de soju que estaba en una mesa al lado de mi sofá y recordé lo de una noche anterior:

○○
Jueves 26 Septiembre 1985.

Había salido de casa directamente a donde sabia que encontraría con seguridad a mi próxima victima, estaba decidido en cometer aquel crimen y estaba completamente seguro, que no me detendría hasta cumplir mi cometido.

Sabia a donde dirigirme, había estado organizando todo con días de anticipación, sabia a que hora tenia que llegar para encontrarme totalmente solo a mi querida victima.

Y tenia que apresurarme, si mi victima llegaba a su auto antes de que yo llegara a el, perdería la oportunidad y otro jueves próximo se agregaría a la lista.

Me adentre seguro de mi mismo al estacionamiento, burlándome de las cámaras de seguridad de las cuales me había encargado con bastante anticipación.

Por primera vez después de dos asesinatos, me sentía serenamente despreocupado.

Busque mi posición lo mas cerca que pude de la puerta donde el iba a salir, me acomode mis guantes negros que ya comenzaba a verlos como algo mas de mi uso personal diario y espere...

Y fue ahí, donde lo mire salir de las puertas de su elevador.

El salía mostrando superioridad, volteando hacia todos lados para ver si no miraba nada extraño en su enorme torre donde el era un CEO "impresionable y digno de admirar"

¡Pura mierda!

Y una vez mas, ahí estaba yo. Con ese alargado cuchillo extremadamente afilado al otro lado del muro, listo para atacar.

Y así fue como sucedió. Me asegure que nadie viniera con el y lo tome de su cuello con mi ante-brazo y le hable, le dije lo inútil que era y había sido en toda su asquerosa vida. Mi voz fue lo ultimo que escucho antes de cortarle el cuello de lado a lado.

Quería que estuviera enterado de quien era el tipo que le arrebataba la vida, quería que supiera en las manos de quien quedaba su despreciable vida y aun que no sirviera de nada por que al final iba a morir, quería que se arrepintiera de todo el maldito traidor.

Después de sentir el peso completo de su cuerpo sin vida sobre mi pecho, lo arroje al suelo cual costal viejo y lo vi por unos segundos, no pude evitar mi sonrisa irónica y resoplada, burla.

Mire algo asqueado la escena por unos pequeños segundos. Observe con atención como su sangre brotaba de su cuello abierto en una especie de hemorragia.

Me asegure de que mi manga larga no quedara manchada con su sangre, corte su dedo sin emoción alguna por que pues el tipo ya estaba sin vida, ¿Que podría darme gracia?

Limpie una vez mas el desorden de otra escena de asesinato y al terminar me puse de pie, aun observando su cuerpo desangrado..

-Así es como termina tu vida.. querido Namjoonie.

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