Capítulo 3: Siendo otro yo

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Hola gente

Disfruten la lectura, cualquier error me lo hacen saber

Capítulo 3: Siendo otro yo

Mikey no podía creer que su Kenchin fuera alguna especie de pervertido, sin embargo, Baji no le mentiría con algo así, su amistad se basaba en la violenta y cruda honestidad, sobre todo la parte de la violencia.

"No es lo que crees"

"Tú viste sus malditas bolsas Mitsuya, ¿Por qué lo defiendes?"

También estaba el hecho de que Mitsuya estaba alegando por Draken, y su vicecomandante tampoco le mentiría, tenía mas tacto que todos los demás, pero no ocultaba cosas importantes, así que estaba en un dilema, ¿A quién le creía?, aunque la sola idea de pensar en Draken comprando en un sex shop era una locura.

"Baji...¿Estás seguro de lo que viste?"

"Muy seguro" Esta vez su gesto cambió, algo más calmado y con cierta lástima "Kazutora y Chifuyu estaban conmigo, lo vimos a la distancia, la puerta del local era de cristal y pudimos ver....algo de lo que comparaba, era ropa de mujer y otras cosas, eso seguro, eran muchas bolsas"

"Entiendo" Mikey podría buscarle explicación a ese evento, tal vez era un encargo de alguien, sabía que Draken trabajaba, pero esa idea chocaba con la realidad de que apenas conocía sobre la vida del chico, sabía las cosas que le gustaban, pero nada sobre su familia, su casa, si tenía hermanos o hermanas, si tenía novia...

Mitsuya se acercó "Mikey, esto no es lo que piensas, tiene una explicación"

"¿Ah sí?, me encantaría escucharla" Baji se cruzó de brazos "Ese sujeto es un pervertido o tiene novia, no es justo que trate de coquetear con Mikey si hace esas otras cosas"

"No es asunto tuyo, y Draken no es ese tipo de persona"

"¿Entonces que hacía en una tienda para adultos?" Interrogó esta vez Mikey

Mitsuya se notaba contrariado "No puedo decirte, eso es algo que le corresponde a Draken"

"No me jodas" Baji sonaba impresionado "¿El usa esa mierda?"

"Por supuesto que no, idiota"

Mikey dejó de escuchar, sus mejillas se sintieron calientes al pensar en eso, la imagen de Draken, tan alto y grande, usando alguna delicada pieza de lencería femenina, seguro le quedaría pequeña, apretando en todos los lugares correctos, después de todo, los músculos del chico eran algo de admirar.

"¿Me estas escuchando?"

"¿Eh?" Apenas reaccionó por el grito de Baji, se aclaró la garganta "Mitsuya, ¿Confías en Draken?"

"Con mi vida"

"Entiendo, entonces, trataré de preguntarle por esto"

"Esto es absurdo" Se quejó el pelinegro "Ese sujeto no me da buena espina, se dice que odia las pandillas, ¿Cómo es que ahora está haciéndole ojitos al comandante de ToMan?"

Mikey había olvidado mencionarles a sus amigos que estaba fingiendo ser un chico inocente para gustarle a Draken, bueno, la gente hacía cosas locas por amor todo el tiempo "Eso no es asunto tuyo, y él no me hace ojitos, solo...nos estamos conociendo"

"Conociendo mis pelotas, le traes ganas desde que comparten clase"

"No puedo contigo" Mikey negó "Como sea, llévame a casa"

"¿Por qué yo?"

"Porque mi motocicleta sigue averiada y Shin no hará nada porque se supone que estoy castigado"

¿Una Mentira...? - DrakeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora