Amor Indescriptible - Hera x Tu

Prólogo

Juno más conocida cómo Hera, Diosa de los antiguos Dioses griegos, la mujer ideal, diosa de la Familia y el matrimonio, protectora de las mujeres en el parto. Una diosa fiel a su amado Zeus, esposo de ella, un hombre que tenia amantes por dónde iba e hijos con una y otra mujer, sacando la naturaleza celosa y vengativa contra las amantes e hijos de su esposo.

Pero incluso la diosa de la Familia, tenía un límite. Leto amante de Zeus, estaba embarazada y aunque ella hizo lo posible para impedir que de a luz, incluso acabando con leto, no pudo impedir el nacimiento de Artemisa y Apolo. Producto del amorío de Leto y Zeus

Esto rompió a la Diosa, no podía soportar ver a Zeus, incluso sentir su presencia le causaba repulsión, sentía asco por ver a su esposo, pasando así siglos y siglos mortales, en dónde Zeus, empezaba a sentir la distancia de su esposa. Un día, Hera, a pesar de la repulsión que le causaban los mortales, por su naturaleza desleal, bajó a una especie de prado, al pie de una cascada, se sentó en la cima, dejando caer sus divinas lagrimas derramadas a causa de la infelicidad y desdicha, lamentos silenciosos e hípidos que nadie podía oír. Bajo aquella cascada, había una mujer, joven y tal vez noble, su cabello rojizo como el de Hera ondeaba con el viento, ojos color cielo pero sin vida.

La humana había acudido a esa cascada totalmente perdida, siguiendo los lamentos de una mujer, al llegar a cierta zona, el ruido de la cascada más alejada de la civilización sonaba

Aquella mujer podía escuchar aquel lamento más cerca, al caminar sin poder ver dificultó todo, captando la atención de la Diosa, quién miró sin expresión a la humana, quién se acercaba cada vez más a la orilla del lago

La diosa no creyó que aquella humana sería capaz de caerse, definitivamente, los humanos no eran tan tontos, pensaba

Sin embargo un fuerte "Splash" sonó cuando el cuerpo de aquella humana se hundió de golpe en el agua

La Diosa rodó los ojos antes de ver cómo rápidamente la mujer emergía, de entre el agua frotándose los ojos

A causa de las lágrimas de Hera, la flora del lugar había crecido y el agua obtuvo un color celeste reflejaba el cielo cómo si fuera un espejo

La mujer al abrir los ojos sin obstáculos, volvió a cerrarlos con dolor, la luz que ingresó a su vista fue dolorosa

Poco a poco empezó a parpadear para que no le duela, hasta que logró enfocar a una mujer frente a ella, pelirroja con un aura casi divina

Un rostro totalmente hermoso, como un ángel, cómo la mismísima afrodita
Una esplendida mujer con una belleza Inhumana, la miraba con diversión - había visto su caída, pensó con vergüenza- hasta que se dio cuenta de algo, podía ver a esa belleza, podía ver el color del cielo, el verde del prado, lo cristalino de la cascada y la rojiza cabellera de aquella mujer, sin poder controlarlo, se dejó caer al suelo, llamando aún más la atención de la Diosa

- es acaso ese humano tan tonto? - es lo que rondaba por la mente de Hera, al ver las lágrimas del humano, Hera se levantó, con una elegancia única y una divinidad innegable, pensó que se lanzaría o se iría, sin embargo, se elevó, no cómo un pájaro, se elevó cómo si el aire levantará una hoja de papel, como si el viento le sirviera a aquella mujer

El pie de la Divinidad no tocó el pasto, pero este se dividió cómo si lo hubieran pisado, desde su posición, esa mujer era muy alta, incluso más que ella

Aunque eso era porque la humana estaba de apenas 16 años

La humana, la miraba embobada, sin poder creer que pudiera ver y más a aún, sin poder creer que aquella mujer estaba frente a ella

Hera: es que todos los humanos son igual de tontos?

Aquella humana frunció el ceño antes de responder

- Tal vez, pero no todos son tan hermosas cómo usted mi señora

Hera la miró con prepotencia antes de acercarse a ella y clavar sus uñas en las rojas mejillas de la mujer

Hera : nadie podría tener mi belleza

las facciones de esa humana no eran competencia para la Belleza que se veía en el Olimpo, sin embargo, era una atracción innegable lo que estaba sintiendo

La humana, no dudo en tomar embobada la mano de la diosa, no se pudo detener, la Diosa había olvidado su forma divina

Aquella que era capaz de matar a un mortal, tal cual, Zeus había desintegrado a Leto, por reflejo se alejó, sin embargo, la humana frente a ella agachó la cabeza con tristeza

La voz de Hera sonó en la cabeza de la humana - ¿Que eres? - la pelirroja Desconcertada, miró a todos lados, había escuchado la voz de aquella mujer, pero no la vio mover los labios, con voz firme respondió

- Soy lo que usted quiera que sea - aquella respuesta desconcertó a la Diosa, sin embargo, no dudo al decir lo siguiente

Hera : Quiero que seas fiel y leal a mi - era todo lo que anhelaba la Dios, una lealtad Inquebrantable

la humana se paró, a pesar de no tener idea de quién era, ni que era, se arrodilló frente a aquella mujer, cruzando el brazo derecho sobre su pecho y extendiendo su mano hacia aquella desconocida mujer

- Yo ______ Athanasiou, juro lealtad y fidelidad, por el resto de mi vida, incluso en mi reencarnación, serviré leal y fielmente a quien mi corazón ha elegido como su señora - La Diosa, sintió su pecho vibrar con emoción antes de preguntar

Hera : ¿incluso si debes derrotar al mismo Zeus?

la humana con solemnidad y mirándola a los ojos con firmeza respondió

______:  Incluso si debo enfrentar al padre Cronos y al Dios Zeus a la vez, Daría mi vida por usted, someteria a quién se interponga en su camino, a quién borre aquella sonrisa que he podido ver y quién haga que esas divinas lágrimas toquen el sucio mundo mortal

la Diosa totalmente halagada por aquella afirmación, miró hacia el cielo sonrojada, una simple humana había hecho que su interior vibrara, con palabras que no tenían nada de especial

Hera :  ¿Incluso sin saber quién soy? ¿Me das tu fidelidad y lealtad?

_____ miró con detenimiento y volvió a asentir

_____ : Los Athanasious somos herramientas para Dioses y para humanos que buscan guerra y poder, nosotros servimos a quién nuestro Corazón elije, con un don y una maldición brindados por el padre Cronos, serviremos a aquella persona que ilumine nuestro camino - se detiene un momento y suspira antes de continuar - sin saber su origen, Mi Destino está enlazado al de usted, mi corazón y mi vida le pertenecen, usted sin duda es mi señora

Hera sintió y por primera vez dejó que sus divinos pies descalzos toquen el prado, haciendo que la flora crezca sorprendiendo a la humana

Hera : Soy Juno, Diosa de la Familia y del matrimonio, protectora de las mujeres embarazadas y de los niños, Tomó tu lealtad por toda la eternidad - la Diosa vio el rostro sorprendido de aquella humana, que rápidamente agachó la cabeza al ver a su Señora

______ : es un honor servirle mi señora

Desde ese momento, Juno visitaba a aquella mortal con frecuencia, necesitaba escuchar su risa, sentir aquellas miradas que solo eran dedicadas hacia ella, sobre todo, Necesitaba del cuerpo de aquella mortal.