Amor Indescriptible - Hera x Tu

- Cap2 -

Muchos comentarios se habían extendido por los campos elíseos

Todos esos rumores en referencia a Hera y aquella actitud que empezaba a mostrar gracias a una Humana, aunque la identidad estaba restringida gracias a Hera y a sus súbditos

No pudieron acallar esos rumores y todos eso llegó a oídos de Zeus, cuando el padre de los dioses y de los hombres, se enteró que una simple mortal estaba al lado de la mujer que ama, de su esposa, un inmenso odio se fundió en su ser, mandando a sus hijos a por aquella mujer que había osado acercarse a su esposa, sin que esta se entere

Por otro lado, Hera había bajado una vez más a aquel prado, viendo a aquella humana meditar, esos últimos meses, el entrenamiento y la resistencia de _____ había aumentado, todo bajo el entrenamiento de una de sus subordinados, _____ no era consiente de la presencia de su Diosa aún, pero estaba trabajando duro para lograrlo

Sin embargo, Hera pudo sentir la presencia de su Hijo, el Dios de la Guerra Ares, quién veía a aquella humana con intensidad, ¿celos? ¿Intriga? No lograba entender, porque estaba ahí, asechando a su Humana como si fuera depredador.

______ : Mi señora - la voz de la humana se alzó, antes de abrir los ojos y dejar aquella meditación tan intensa que estaba teniendo, su cuerpo totalmente fornido y desnudo salió del agua de la cascada, la mirada de Hera recorrió el cuerpo de aquella mujer con detenimiento, deteniéndose en aquella parte que la hacia delirar de placer, nunca había tenido algún deseo sexual por otro Dios o por otro ser, que no sea Zeus, sin embargo, en ese momento, no podía negar lo que sentía por esa humana, algo que no pasó desapercibido por su hijo, quién sorprendido decidió seguir escondiendo su presencia, aunque su tarea era matar a esa mujer, había algo en ella que le causaba curiosidad - ha regresado

La sonrisa brillante de aquella humana sacó una sonrisa genuina de la Diosa, sorprendiendo otra vez a Ares, nunca la había visto sonreir así

Hera: He regresado pequeña Athanasiou - la mirada de la humana se endureció con cierto disgusto - no te gusta ser llamada por tu apellido?

_____ negó antes de saltar sobre las rocas, con mucha agilidad, hasta llegar de forma rápida hasta dónde se encontraba su señora

_____ : Prefiero ser llamada Demeter cómo usted me nombró o ____ cómo me nombró mi madre - Ares río silenciosamente causando una media sonrisa en su madre, el Dios de la guerra no pudo aguantar la osadía de su madre al ponerle el nombre de la hermana de su padre a aquella humana - mi señora, aunque no me guste aceptaré cómo usted me llame - tomo con delicadeza su mano para besar su palma haciendo sonrojar a la Diosa -

Hera río aún roja al saber que su hijo también había visto esa interacción, aunque lo que sorprendió al Dios Ares era aquella sonrisa sin malicia que su madre había mostrado, solo notaba felicidad y satisfacción de su madre al estar con esa mujer? Hombre? Uns rara mezcla que solo había visto en pocas ocasiones.

Hera : Muy caprichosa para servirme y muy osada para ser una mera mortal - sin dudarlo tomó a la menor del mentón antes de juntar sus narices en un beso esquimal - Mía al fin y al cabo, yo te mal crié así

La sonrisa de _____ se mostró antes de abrazar a la diosa, quién no devolvió el abrazo, sin embargo, disfruto de aquella cercanía

Hera : tenias que mostrarme algo? - _____ asintió con fervor antes de separarse - ¿que es?

_____ sonrió de forma burlona, su osadía aumento desde que Hera le regaló un don y la proclamó suya, una y otra vez en una noche inolvidable

_____ : Es que acaso los Dioses del Olimpo no lo saben todo? - aquella atrevida respuesta hizo reír a Ares una vez más, que interesante humana había encontrado su madre, sin embargo, algo llamó su atención, un tatuaje en el cuello y tórax de la Humana, que brillaba con intensidad al estar cerca de su madre, eso solo podría ser obra de Cronos pensó -

Hera : Osas responder de esa manera a tu señora?

_____ negó con diversión, antes de hablar

_____ : No lo Haría mi señora - besa la mano blanquecina de la Diosa - Lo que deseo mostrarle no está acá - hera la mira con diversion mientras eleva una ceja interrogando a su humana - No de ese tipo mi señora, es un ser pequeño, que acabo de rescatar, iré por el

Sin más se alejó a toda velocidad hacia su cabaña, no muy lejos de ahí

Hera suspiro sin dejar de ver por donde se había ido su humana

Ares : así que ____ - eleva su voz captando la atención de su madre, quién no estaba nada sorprendida - Esa Humana es atrevida y presiento que un futuro dolor de cabeza

Hera : no tendría porque serlo

Ares : mi padre está molesto

Hera : ¿Por qué? Porque hice por primera vez lo que el ha hecho por siglos? O ¿por qué por fin encontré la felicidad y lealtad que tanto anhele?

Ares se encogió de hombros, impropio de el, realmente no le importaba su padre, solo estaba siguiendo ordenes por interés y diversión

Ares : Debiste dejarlo hace mucho, tu naturaleza divina te lo impide y me dio curiosidad saber quién fue la Humana que hizo que aquella naturaleza sea dejada de lado

Hera : ____ es la única humana a quién le estoy depositando mi confianza - Ares asintió sabiendo que no era lo único que su madre había depositado en aquella humana - Zeus no podrá hacer nada contra eso

Ares miró a su madre, por primera vez, sintió admiración por ella, Esa mujer era aquella que anhelaba ver, una que no tenía miedo de enfrentar a Zeus y ahora aquella mujer, estaba dispuesta a defender su propia felicidad

Ares : Llamame si necesitas a alguien a tu lado madre, más Dioses vendrán por curiosidad o para seguir las ordenes de mi padre, espero que ese ser que esta creciendo en ti, tenga un buen futuro

Hera tocó su abdomen con cariño, su mirada cambió, la fiereza fue sustituida por amor puro

Ares como acto de clemencia por aquel ser aún sin conciencia y poder para defenderse, Cómo el hijo mayor de Hera, le regaló un don

Ares : Crece fuerte e inmortal, Pequeño rocío de la naturaleza, eleva sus aguas y la flora de este mundo, pequeña destrucción con otro nombre.

Hera sonrió con delicadeza al ver cómo su hijo se retiraba, el don del niño que crecía en ella, era el don de la naturaleza y de la guerra