10. ¿De dónde se apagan?

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Li Ming tenía un problema, uno que no sabía si podría rechazar oh llorar toda la noche porque no pudo rechazarlo.

"¿Qué demonios se supone que es frutos mixtos?"

Frustrado tomó un tarro de cada sabor que vio. No lo culpen, ¡el no sabía nada acerca de los bebés!

Hace un mes una nueva vecina se había mudado a su edificio. Era raro ver gente nueva últimamente considerando que estaba ubicado principalmente para estudiantes. La cosa era que era una mujer agradable, demasiado amigable y buena persona con el y Heart, ¿cuál era el problema?, esa coqueta bebé de un año que solo le hacía ojitos a su novio.

Enserio, ¿!Qué tenían en su contra todas las mujeres pequeñas por querer quitarle a su novio!?

¡Wen no tenía razón!, ¡No estaba celoso de una bebé!.... bueno, de una bebé y una niña exploradora, ya eran dos!.

— Papilla de durazno, recuerdo que a mi hija le encantaba de bebé, espero le agrade a la tuya hijo.

Li Ming sonrió. No tenía ningún sentido contradicer a la mujer sobre no tener una hija oh el hecho de que agarro un tarro al azar. Lo único que Li Ming sabe es que había de diferentes colores, ¿se supone que se comen igual no?.

El ruido de su teléfono celular lo distrajo una vez estaba en el Uber de camino a su departamento.

Heart bebé ♡

— Esperó no olvidarás la leche de Lexi, recuerda la marca que te dije:)

Li Ming bufó. — ¡Shiaaaa!

No hace falta decir que tuvo que regresar al súper mercado por la leche que, si, claramente olvidó, ni como el chófer del auto parecía bastante confundio por la maldición que recibió en un idioma totalmente desconocido. Al final Saleng tenía razón, si no te entienden pueden creer que les dices cualquier cosa. Pobre sujeto, Li Ming jamás le diría la verdad, preferiría mil veces que se fuera con la misma sonrisa creyendo que le deseo prosperidad y abundancia a qué se fuera a la mierda en Tailandés.

No era su culpa, ¡el solo quería llorar!

Li Ming amaba a Heart, no era un misterio para nadie. Cada día no podía creer la suerte que tenía. Todos los días se despertaba con el rostro pacifico de Heart sobre su hombro, con la boca ligeramente abierta y dejando caer baba por todo su rostro y no dejaba de ser atractivo. Era inteligente, tan malditamente inteligente que Saleng lucía aún más tonto de lo que ya era a su lado. Y Dios, era tan adorable, desde sus dientes de conejo a la forma en como pequeños destellos de luz salpicaban sus ojos cuando pequeñas risas escapaban de sus regordetes labios rojos.

Li Ming estaba enamorado, tanto que ser tan débil por el comenzaba a ser una desventaja.

"Nosotros podemos cuidar de Lexi, no Li?"

Tenia que decir que si.

La bebé, la pequeña Lexi parecía tener una ligera obsesión con Heart desde el momento uno en qué los conoció. Estiraba sus brazos y reía cuando veia a Heart cerca de ella, lloraba cuando se iba y sobre todo, quería ser el centro de atención de Heart...

Ah, ¿también dijo que Lexi lo odiaba?, ¿No?, bueno lo hace. No por nada era su novio el "encantador de bebés".

No esperaba para nada los ojitos de cachorrito y pucheros de bebé que le dio Heart para rogar su aprobación cuando su vecina tenía que salir de emergencia por tres días y su niñera le había cancelado.

No tenía ninguna experiencia con los bebés, era de ese tipo que lloraba junto con ellos porque no tenía idea de como apagarlos. Incluso con su pequeño sobrino no podía jugar con el por más de quince minutos sin saber cómo actuar cuando se ponía a llorar. Li Ming no estaba seguro de como ese niño había sobrevivido con el cuando estaba a cargo.

HeartLiming one shots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora