VECINOS [TANJIKANA]

Capítulo 15

Resumen del capítulo anterior: Tanjiro y Kanao regresaron a casa tras el incidente con aquel ladrón y Tanjiro recibió una compensación inesperada pero no hay tiempo para pensar en eso ya qué el día de la mudanza se acerca.

Al día siguiente...

Una ojilila estaba dando vueltas en su apartamento mientras que en su cabeza se repetía incontables veces ¿qué es lo que había hecho?

- Ay no, ¿qué fue lo que hiciste Kanao?  ¿En verdad me gustas? Fue lo mejor que se te ocurrió? - pensaba para si misma mientras su cara se ponía roja al recordar aquel beso qué le dio en la mejilla al peliburdeo.

Le preocupaba como la miraría el peliburdeo ahora ¿quizá como alguien atrevida? No quería que tuviese esa idea sobre ella pero no sabía realmente lo que debía hacer.

En ese momento su celular comenzó a sonar, se trataba de Tanjiro.

- ¿¡Tanjiro!? - la ojilila tomo la llamada y saludo con un hola esperando una respuesta en la línea.

- Hola Kanao ¿estas lista? Solo te llame para recordarte que la mudanza es hoy en la tarde.

-  S-si, ya tengo casi todo en mis maletas, solo pensaba en revisar todos mis recibos en orden y asegurarme de que estén pagados.

- De acuerdo, Nezuko vendrá más tarde a despedirnos, saldremos con el auto de un familiar.

- Entendido, terminaré de inmediato, puedes venir a mi apartamento cuando sea la hora. - dijo la ojilila alegre.

- ¡Bien! Te veré más tarde, adiós. - el peliburdeo colgó.

La ojilila se recargo en la pared y dejo escapar un suspiro.

- Siempre logra disipar mis miedos. - susurró con una sonrisa para si misma.

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Del otro lado de la línea...

- ¡¡Rayos!! ¿No pudiste decirle otra cosa? Soy muy malo para estas cosas. - se regañaba para si mismo el peliburdeo.

Tanjiro había ido a despedirse de sus compañeros y amigos del trabajo ya que próximamente se ubicaría en una nueva zona.

- Buena suerte en tu nuevo puesto Kamado. - Himejima revolvió el cabello de Tanjiro.

- Jeje se lo agradezco Himejima-san.

- Si tienes problemas con algo no dudes en pedirnos ayuda. - Sanemi le dio una pequeña palmada en la espalda al peliburdeo, Sanemi podría llegar a ser gruñón a veces pero sin duda apreciaba mucho al peliburdeo.

- Si, lo haré, gracias Shinazugawa-san.

- Se que me echarás de menos Tanjiro pero debes aprovechar estas oportunidades. - dijo burlonamente Hakuji mientras pasaba su brazo detrás del cuello del peliburdeo en modo de juego.