Híbridos

14. Una noche agitada.

Narra Tahiel:

No estoy tranquilo con la idea de que otra persona esté tocando a Ela. Ni siquiera yo la he tocado de esa manera, y ya alguien más tendrá sus manos sobre ella. Solo espero que de verdad no hayan chicos serca de ellas.

-¿Santi? - lo llamo.

-¿Sí? - responde sin mirarme.

-Creo que tendremos que aprender a dar masajes...

-¡¿Verdad que sí?! - me interrumpe y le da un golpe al escritorio - creía que me estaba volviendo loco por pensar esa estupidez, pero si tú también lo estás pensando, no es una idea tan estúpida como creía.

-¿Debería sentirme ofendido o halagado?  - digo con el ceño fruncido.

-¡Es que no puedo sacarme de la cabeza la idea de que alguien esté viendo a Leticia desnuda! - me paro rápidamente.

-¡¿Desnuda, mi hermanita y mí novia?! - él asiente - no, no, no. Vamos.

-¿Adónde? - lo miro como si fuera idiota - a buscarlas.

-No se diga más - ambos salimos con dirección a los autos.

- ¡Osito! -  detengo mis pasos cuando el cuerpo de Ela está sobre mí - ¡Estuvo increíble! - dice emocionada.

No puedo evitar sonreír, al parecer se la pasó bien.

La abrazo contra mi.

-¿Me echaste de menos? - pregunto con mi nariz en su cabello. Me gusta su aroma.

-Claro que sí - se aparta y besa mis labios. Quizás y solo quizás no sea tan mala idea ir al spa. ¿Pero que digo? claro que  es una mala idea, muy mala idea.

-¿Pero tenías que tardar tanto? - salió amaneciendo y llega oscureciendo.

Ella solo ríe.

- Iré a darme una ducha, hablaremos en la cena. - y se va

-¿Todavía crees que es una mala idea ir al spa? - voltea hacia mi hermana.

-Y no solo yo - señalo a Santi - creemos que es muy mala idea.

- Aguas fiestas - y se va tras Ela.

- Vamos Tahiel, todavía nos queda mucho por hacer - bastante.

-¡¡Señor!! - entra uno de mis
hombres - se le solicita urgentemente en la frontera del Sur.

-¿Qué pasa? - eso no se ve todos los días.

-No lo sé con certeza señor, pero son un grupo de híbridos. - miro a Sami y él ya se encuentra mirándome.

-¡Vamos! - en nuestra velocidad vampírica llegamos en minutos a los límites de la frontera sur.

-¡No nos iremos hasta hablar con el rey! - grita uno de los híbridos.

-¡¿Cuál es el alboroto?! - todos hacen silencio - quien representa este grupo de un paso al frente.

El que había gritado da un paso por delante de los demás.

Es un chico no mayor que yo, es un híbrido de lobo y vampiro.

-Me llamo Marc - se presenta haciendo la debida reverencia  - y vinimos aquí en busca de refugio.

Los miro a todos, hay dos chicas híbridas de bruja y lobas, y tres chicos , dos híbridos de brujo y lobo y el que se presentó como Marc híbrido de lobo y vampiro.

-¿Cuál es la situación? - empiezo a sospechar, que esto tiene algo que ver con la desaparición de híbridos.

-De seguro a escuchado de la desaparición de híbridos - justo lo que pensé, asiento - a nosotros también intentaron cazarnos.  Logramos escapar y pensamos que este sería el lugar más adecuado.