La Propuesta

Capitulo 02

La Lunática

Seisth

Al llevar a Lilin hacia su casa voy pensando todo lo podría salir mal en este plan.

El primero sería que haga todo esto en vano y que el en realidad nunca se fije en mí.

También está que el tal Thomas no acepte mi irrechazable propuesta, a quien podría encontrar más popular que el para efectuar el plan.

Jamás en mi vida había visto a Thomas en persona, solo escuchaba los rumores que siempre había por allí sobre él.

Sobre lo rico que es, lo apuesto que es y sobre todos los problemas que trae. Las personas dicen que es tan problemático que no importa cuánto dinero tiene ni cuan apuesto es. Estoy tan asustada de él, que me diga que no y le cuente a todas las personas lo que planeaba y todo lo que siento.

De tanto pensar en estas cosas no me doy cuenta que accidentalmente choco con un auto que está delante de mí.

¡Ay dios!

De inmediato salgo de mi auto y voy a ver que daño le hice al auto de enfrente. Es un mustang, de una sola cabina y se ve que bastante caro, casi no le hice daño pero si le tendré que pagar la pintura.

Siento como la puerta del auto se abre y del él se baja un chico súper sexi y bastante alto. Tiene cara de pocos amigos y con razón, estropee su auto.

Siento que debo disculparme, pero antes de que pueda decir cualquier cosa, siento como llega un auto de la nada y frena de repente, frena uno milímetros antes de chocar mi auto, y en este punto ya estoy realmente asustada de lo que me pueda pasar.

Pero en realidad la que se baja del auto es una chica, muy linda a mi parecer, pero con todo el maquillaje corrido y se viene corriendo, pienso que a donde estoy yo, pero sigue de largo y se lanza a los brazos del chico.

-Por favor mi amor, no me puedes dejar, eres todo para mí- el chico lo único que hace es alejarla con una mano y trata de meterse de nuevo en el auto.

La chica le cierra la puerta del auto antes de que pueda entrar y se pone por delante de él, siento que debo intervenir antes de que la chica se lastime o que el chico se mate.

-Disculpen por interrumpir pero...

-¿Quién es esta zorra?- grita la chica al notarme.

-¿Cómo?-

-Ya deja a la chica Amara-

-Y a parte la defiendes, es tu amante, ¿Cierto?-

Espera, ¿Qué diablos está pasando aquí? ¿Amante? Ni siquiera conozco al chico.

-¿Y si así fuera, que?- al chico decir esto la chica <que ahora sé que se llama Amara> comienza a llorar.

-No es cierto, no tienes una amante- miro como el chico voltea los ojos.

Solo me quedo mirando toda esta escena como una estúpida hasta que veo como el chico se acerca a paso decidido y quedo petrificada.

Ya te mataron estúpida.

Pero en chico en vez de sacar un cuchillo y descuartizarme, como en todas las pelis y documentales que me gustan ver, el chico me toma de la cintura y de la nuca y me besa.

¿Espera que?

¡Te beso estúpida, te beso, has algo!

Pienso que un mal rato por estas chicas locas lo puede pasar cualquiera, hasta yo, y para Salir de esa situación uno hace lo que sea, así que decido ayudarlo siguiéndole el beso.

Y si, pensé todo eso en un segundo.

Y además le sigues el beso a una persona que ni conoces.

Yo también lo tomo de la nuca para profundizar el beso y se sentía tan bien, tan bien hasta que la lunática de Amara me tomo del cabello y tiro de él hasta que caí al suelo, trato de subirse encima de mí pero el chico no lo permitió.

-Amara ¿Qué mierda haces?- dice dándome la mano para levantarme, la cual yo tomo, el chico me pone detrás de su espalda.- quiero que te vayas.

La chica enojada se va hacia su auto, lo enciende, retrocede y choca mi auto.

-¿¡Que mierda te pasa!?- le grito a la lunática cuando pasa muy, pero muy cerca de nosotros.

El chico detrás de mí se voltea y toma mis manos sin decir nada.

-Oye, sé que te seguí el beso, pero era para ayudarte y no siento nada por ti, es más, ni siquiera sé cómo te llamas- no sigo mi súper rápido discurso ya que el chico me interrumpe.

-Cálmate- dice viendo mis manos y veo que tengo unos cuantos raspones en las manos que no sabía que tenía- ¿Qué puedo hacer por ti?- pregunto de la nada.

-¿Cómo?- no entendí lo último que me quiso decir.

-Me hiciste un favor y no me gusta deberle favores a nadie, ¿Qué quieres?- me dice viéndome fijamente, serio.

-Creo que por lo que te debo del auto está bien- digo mirando su auto.

-No.

-¿Qué?- pregunto extraña.

-No.

-¿Porque?

-Por qué Amara hizo lo mismo con el tuyo, es mi culpa.

-Entonces dejémoslo así.

-Quiero que pidas algo, cualquier cosa.

¿Qué puedo pedir?

Mmm ¿Hola? ¿y si antes de seguir pensando en pedir algo porque no le preguntas su nombre?

¡Cierto!

-¿Cómo te llamas?- el chico se voltea con una cara de sorpresa increíble- ¿qué?

-¿de verdad no sabes quién soy?- su pregunta me deja incrédula.

-¿Debería?- solo suelta una pequeña carcajada.

-Claro, eres la típica chica que solo se interesa en ella misma y no le importa nadie más, por eso es que no sabes reconocer a las personas de tu alrededor.

Solo fingiré que no escuche todo lo que dijo y solo sonreiré.

-No importa lo que digas, no me afecta- digo con mi perfecta sonrisa- pero tú debes ser una persona insignificante, que no tiene personalidad propia y por lo que veo tampoco tienes cosas que hacer para estar entretenido con las vidas de personas que ni siquiera te conocen.

Le digo a una persona que ni conozco y puede que sepa muchas cosas de mí por estar investigándome para secuestrarme.

Tienes que dejar de ver documentales de asesinatos.

Lo sé.

Entonces él se me acerca hasta estar en una distancia que estoy segura donde puede escuchar mi corazón martillando dentro de mi pecho, no es que mi corazón estuviera haciendo un esfuerzo para no ser escuchado.

-Estoy seguro que has escuchado mucho de mí y puedo apostar de que ninguna es buena.

-Pff ¿Quién eres? ¿Hardin Scott de after?- digo y lanzo una risotada.

Y entonces el me extiende su mano de manera de saludo.

-Un gusto, Thomas Blake.

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