𔘓 ﹕𝘷𝘦𝘳𝘢𝘯𝘰

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¡ au sin quirk.
personajes mayores
de edad.

¡fluff!

...

♡

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El sol lo lleva quemando vivo más de una hora por pretender esperar a cierto cabeza hueca, como él lo llama, que realmente es su novio.

Se encuentra en un parque cercano a la Universidad a la que aplica su chico. Sentado en una banca, debajo de un árbol apenas con hojas, cayendo el sol directamente a sus hombros que por si fuera poco, estan descubiertos.

Se siente tonto al exponerse de este modo.

"Amor, ¿me puedes recoger a las dos y media de la tarde? Saldré temprano mañana y podríamos aprovechar para salir juntos ¿Qué dices?"

Patrañas.

"Puedes quedarte en el parque que está cerca. Es bonito y creo que están haciendo una feria, podríamos empezar por ahí."

Tenía un mejor plan. Esperarlo en casa y jugar videojuegos juntos cuando llegara, reconstruyendo su casita en Minecraft que les explotó un creeper por culpa del impulsivo de Eijiro al querer conseguir polvora a como de lugar.

"¡Te juro que será divertido! Sé que no te gusta estar entre mucha gente, pero te prometo que lo haré llevadero para ti. Vamos, hace tiempo que no vamos a un lugar como esos. ¡Habrán cosas otakus! Te compraré lo que quieras."

Quizás lo convenció la forma maravillosa en la que soltaba idea tras idea, realmente emocionado y convencido en que le diría que sí, sin sonar muy fantaseoso. Dejándole claro que por supuesto, su cita terminaría con final feliz, yendo juntos a comprar algún juguete y probándolo a gusto en casa.

Pero claro, su cita debió haber empezado a las 2:30 y ahora son las 4:21. Se ríe para sí mismo.
Sabe que el estúpido es él, exponiéndose de esta forma tan descuidada y olvidándose por completo del bloqueador. El lapso bruto que le ha dado es impresionante, lo admite, pero más estúpido es Eijiro, dándole una hora falsa y haciéndole perder el tiempo.

Suspira, cabriado hasta la coronilla. Puede sentir la mirada de algunos curiosos en dirección a él. No le sorprende hasta cierto punto, admite y tiene la confianza suficiente para decir que es muy bello, es normal que la gente se de un tiempo para admirarlo, pero hoy es el colmo. Miran su piel roja como si tuviera una grave enfermedad. Pero nada, solo se ha expuesto al poderoso sol del medio día como un digno estúpido. La mayoría de personas se esconden de ese sol incandescente, pues, precisamente, las temperaturas andan elevandose estos últimos años, provocado serios problemas para los ciudadanos en tanto a salud. Piel, más que nada.

𝐆𝐎𝐀𝐋𝐒【krbk】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora