Mi Hermoso Alfa-Harco

🐾 Capítulo 2 🐾

Entraron en el oscuro departamento del Alfa, las caricias no eran para nada suaves ni tiernas, ellos sabían que se deseaban con locura desde que cruzaron miradas. La fuerte atracción que sienten los consumía y hasta temían que si no unían su cuerpo lo más rápido posible el calor los mataría.

Él Omega miraba al Alfa con anhelo, como le encantaría someterlo ante él, pero sabía que este como los otros no se dejarían, así que entregarse no le costaría, porque el Alfa más que caliente, y supremamente sexy, con su hermoso cabello rubio y mirada desenfocada, su camisa negra le quedaba justa del pecho y podía ver los músculos de allí. Bajó su mirada a las largas piernas bien construidas.

Se relamió los labios deseosos, pero se reprimió.

Se quitó la camisa, mostrando su cuerpo no tan musculoso como el Alfa pero del cual no se quejaba, y con movimientos suaves se fue quitando poco a poco los pantalones, mostrando de a poco sus bóxer negros, todo eso bajo la atenta mirada oscura del rubio.

Cuando ya estaba semi desnudo y solo con sus prendas íntimas, se sentó en el vientre del Alfa y se fue metiendo de a poco, sintiendo la erección de este en su trasero, el cual poco a poco el comenzaba a lubricar, todo en silencio por que no sentían la necesidad de hablar.

Bueno... O eso pensaba el por qué el rubio no pensaba igual.

—Hmmm Harry no... No sé, quería hacerte una propuesta.

Harry lo miró expectante, viendo como el Alfa ponía sus manos en su cintura deteniendo sus movimientos y de un momento a otro este se ponía todo colorado.

Avergonzado.

—Bueno esto debe parecerte extraño, no es común pedir esto, no sé si eres un Omega que le gusta experimentar y... yooo pues. Mm, no se tu... ¿no te gustaría ir arriba?

La confundida mirada del Omega le indico al Alfa que este no le había entendido

—Sabes, olvidado continuemos, — trato de impulsarse para quedar sentado y por igual al Omega pero este no lo dejo y puso una de sus manos en su pecho, recostarme nuevamente en la cama.

—Espero no estar equivocándome, pero me has pedido que te joda — susurro en la oreja del rubio, con su voz ronca por lo exitantante que había sido la propuesta y rezando a la diosa luna por que el Alfa no se arrepintiera.

Este mismo se estremeció por la forma que él se lo dijo en la oreja, chupando su lóbulo y luego dando suaves mordiscos en su cuello.

— ¡Mhg! ¡Sí!

— ¿Si? ¿Sí que, Draco? —dijo Harry bajando del regazo del rubio y viendo como estaba todo sonrojado y balbuceando cosas que él no comprendió.

—Quiero... Quiero que me Jodas Omega.

Se vieron directos a los ojos, el que el usará el término Omega lo excito de sobremanera y Harry no lo soporto más y se lanzó a los labios del Alfa, mordiéndole con fuerza. Sus manos inquietas acariciaron todo el pecho y espalda del rubio con esmero. Gemidos y gruñidos se escucharon en la habitación, El ruido de las pocas ropas que llevaban al ser prácticamente rasgadas era un eco en todo el silencioso lugar.

Cambiando de posición, el Alfa ahora arriba del Omega, se fue empujado así mismo hacia el suelo, se agachó ante la atenta mirada del azabache y con su mano izquierda fue acariciando el pene rosa e hinchado y Harry soltó jadeos cortos, mordiéndose los labios con fuerza. Él no quería ser ruidoso pero el Alfa se le estaba haciendo tan difícil.

Todo empeoró cuando el rubio se llevó su pene a su boca y lo lamió como si fuera una paleta, suspiró, sintiendo como la lengua se movía por toda su longitud, cubriéndolo por completo, luego su Alfa se acurrucó en sus bolas antes de chuparlas, Draco se estiró y las pellizcó. Sus ojos se encontraron mientras lamía la punta.