CAPÍTULO NUEVE: TAEHYUNG

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Había pasado un mes con bastante rapidez, Jungkook y yo habíamos conseguido negociar la casa a un precio bastante bueno, por lo que por fin era el momento de mudarnos. Había pedido un día libre en la empresa para poder encargarme de acomodar todo lo posible con Jungkook, o al menos dejar las habitaciones de los niños listas. El resto podía esperar.

Teníamos todo el fin de semana para la mudanza. Contábamos con la ayuda de nuestros amigos, por lo que esperaba que eso también aligerara la carga. Sin embargo, no contaba con que estarían quejándose peor que los trillizos.

"Dioses santos, ¿yo por qué no estoy cobrando por esto?" Seokjin farfulla jadeante mientras adentra una de las cajas. "Debería cobrarles, definitivamente."

"Piénsalo como ejercicio." Jadea Jimin, empujando otra caja, haciéndome rodar los ojos. Apenas estaban cargando cajas con ropa de los niños. "Espero que esto me haga bajar cinco kilos para poder entrar al traje de bodas mucho más fácil."

"Ya estás muy delgado, ¿para qué querrías bajar más?" le pregunto, dejando a Chaeyeong en el suelo junto con Yeonjun y Jihoo, quienes jugaban con un par de peluches.

"¿Porque quiero verme mucho mejor?" Jimin responde con sarcasmo. "¿Sabes cuanta gente está invitada, Tae? Alrededor de doscientas personas." Él exhala.

"¿De dónde conoces tantas personas?" le pregunto, abriendo los ojos con sorpresa, desviando mi mirada a la entrada por donde Jungkook y Hoseok entraban un colchón.

"Yo no, Yoongi." Lloriquea. "Son contactos familiares o de la empresa de sus padres o gente con la que ha trabajado y todo eso. No pueden quedarse por fuera en lo absoluto, según me dijo, además de que quería presentarme a todo el mundo."

"Se me olvidaba lo importante que es el señor Min." Murmuro, "¡No dejen el colchón en el primer piso! Súbanlo de una vez." Les reclamo a los dos hombres que acaban de entrar.

"¿Por qué no intentas hacer esto, doncel?" jadea Hoseok. "Está un poco pesado, déjanos descansar."

"¡Mmph!"

"Tae, ¿por qué no le ayudas a Gyu con una caja que está intentando traer?" Jungkook hace de mediador y yo asiento, haciéndole caso. Cuando salgo hacia el camión de la mudanza, veo a mi hijo mayor tratando de cargar una caja que Namjoon le entregó.

"¿Te ayudo, hijo?" le pregunto, acercándome a ayudarle cuando lo veo tambalear.

"Sólo de un lado, entrémoslo juntos." Contesta.

"Por supuesto." Le digo. "Esta caja es tuya, ¿por qué no la llevamos directamente a tu habitación?"

"Está bien." Murmura. Entramos rápidamente por la sala, percatándome que Jungkook y Hobi seguían descansando, para empezar a subir las escaleras. "¿En esta casa sí podré decorar las paredes a mi gusto, papi?"

"¿Uh? Claro que sí, esta casa es nuestra." Respondo, yendo con cuidado de no caerme. "Puedes pegar posters y todo eso, pero procura no rayar las paredes, ¿sí?"

"¿Tú tenías posters en tu habitación?" me pregunta, cuando dejamos la caja llena de juguetes en la que sería su habitación.

"No muchos, la verdad." Admití. "Pero tu padre sí tenía su habitación llena de posters, juguetes y más." Le sonrío.

"¿Puedes decirme como era su habitación cuando tenía mi edad?" me pide, con una mirada anhelante.

"No conocía a tu padre cuando tenía diez años." Hago un puchero cuando lo veo entristecer su mirada. "Pero cuando tenía dieciocho, tenía su pared azul llena de poster de videojuegos de la época junto con un par de imágenes de bandas y eso."

"¿Y en tu habitación?"

"Yo era un poco romántico, así que tenía un par de fotos pegadas con mis amigos de la escuela y eso."

"Se siente raro pensar en que ustedes fueron jóvenes." Farfulla y yo no puedo evitar reír.

"Seguimos siendo jóvenes, en especial tu papá." Le pellizco la mejilla. "Pero yo me veo joven gracias a él."

"¿Cómo así?" me pregunta con una mueca.

"Cuando tengas quince te lo explicaré." Le prometo.


Para cuando anocheció, teníamos un par de cosas en su nuevo lugar y muchas otras en cajas para desempacar mañana, pero en agradecimiento a nuestros amigos, decidí preparar una cena para todos. Seokjin se ofreció a ayudarme, por lo que ambos estábamos cortando vegetales antes de empezar a saltearlos.

"La boda de Jimin se acerca." Me dice y yo asiento, dando un pequeño suspiro.

"Voy a llorar ese día." Admito en un murmullo.

"Todos lo haremos. ¿Te imaginas cuando Jimin quede en embarazo? Diablos, lo siento, Tae, pero me voy a pelear ser el padrino."

"Será una competencia por su corazón, entonces." Le sigo el juego, haciéndolo reír.

"Sí, así es." Él sonríe, nostálgicamente. "Con Namjoon estamos considerando la idea de volver a Corea."

"¿En serio? Pensé que les estaba yendo bien en Australia." Comento, mirándolo de reojo.

"Nos va bien, pero desde que estamos aquí nos hemos sentido un poco reacios a la idea de volver a alejarnos." Suspira. "Extrañaba un montón a mi país y creo que me acabo de dar cuenta."

"Si vuelven, son recibidos con los brazos abiertos. Si necesitan algo, alojamiento o demás, no duden en avisarnos." Ofrezco.

"Gracias."

Luego de una hora, por fin terminamos la comida. Así que Gyu accedió a ayudarnos a servir en el comedor que Jungkook, Namjoon y Hoseok habían terminado de armar. Me estiré un poco antes de empezar a comer, porque me sentía entumecido, agotado y aun faltaba mucho por desempacar.

"Por fin tendrán un espacio cómodo para ustedes como familia." Namjoon celebra. "¿Cómo se sienten?"

"Orgulloso." Contesta Kook.

"Cansado." Lloriqueé, haciendo reír a los demás. "Aunque orgulloso también." Miro a Gyu, "Lo último que pasó por mi cabeza hace diez años sería que tendríamos una casa con Jungkook." Observé a mi esposo con una sonrisa. "Pero debería acostumbrarme a que Jungkook consiga hacer milagros, ¿trillizos? Sólo él."

"Oye, fue un trabajo en equipo." Replica, haciéndome carcajear.

"Igualmente, yo que fui parte de esta familia desde antes de que llegara Gyu, brindo por ustedes. Sé que lograrán más como familia." Jimin levanta su lata de cerveza y nosotros lo imitamos (Gyu levanta su vaso con jugo de naranja y los trillizos duermen en las cunas).

"Gracias." Respondemos Kook y yo a coro. Miro a mi esposo, sintiéndome agradecido. No podía imaginar mi vida con alguien más, sólo él. Sólo Jeon Jungkook podía ser el dueño de mi corazón.

DAYLIGHT | KOOKV [ENCHANTED #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora