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JAY ENTRÓ EN LA BIBLIOTECA, donde todos se sentaron a hablar, todos lo miraron con una expresión preocupada.
"Se han llevado a Dohee, el aquelarre de demonios se la llevó." gritó y tiró de su cabello con frustración.
"¿Espera qué? ¿Cómo sabes eso?" Jungwon entró en pánico y se levantó de su asiento.
"Los vi, Soobin y Taehyun. Se la llevaron." rápidamente habló.
"¿Soobin y Taehyun...?" Sora murmuró para sí misma, sin saber si eran las mismas personas con las que no se había hecho amiga durante mucho tiempo.
"Dohee fue al baño y nunca regresó, me di cuenta de cuánto tiempo se había ido y cuando me di la vuelta, fue cuando los vi." divagó, yendo a sentarse para controlar sus nervios.
Sora se puso de pie y comenzó a pasearse por la habitación, "¿Tienen un escondite secreto?" preguntó, desesperada por encontrar a su mejor amiga.
Sunghoon se colocó detrás de ella y colocó una mano en su espalda, le echó el pelo hacia atrás y le frotó el hombro con dulzura. "Vamos." él susurró.
"Voy a llevar a Sora a casa." anunció, todos asintieron en respuesta antes de continuar con sugerencias sobre cómo recuperar a Dohee.
Una vez que Sunghoon y Sora se fueron, Jungwon estalló en llanto y sostuvo su cabeza entre sus manos. "¿Qué pasa si ella resulta como Sarang? ¿Qué pasa si hacen que Dohee pase por lo que Sarang tuvo que hacer?." sollozó.
Heeseung le frotó la espalda y lo tranquilizó: "No lo harán, es una situación completamente diferente. Ella estará bien."
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Dohee se despertó sintiendo una opresión alrededor de sus muñecas, cuando miró hacia abajo vio gruesas cadenas negras.
El suelo estaba sucio y cubierto de polvo caído, las paredes eran de ladrillo gris y no había ventanas a la vista.
Dohee sintió como si se fuera a asfixiar, cuando tiró de las cadenas sintió que una sensación de ardor flotaba a través de ella.
Las cadenas estaban cubiertas de verbena, lo que hacía casi imposible que ella se liberara.
