Je t'aime > km omegaverse

dos.

Cuarto mes.

La barriga de Jimin ya comenzaba a notarse un poco más, era aún como un pequeño monte, pero su redondez ya se notaba, el omega siempre se miraba en el espejo esperando tener más conocimiento por su bebe, pero en todas esas veces que se miraba al espejo había notado algo que le hizo preocuparse demasiado.

Había subido de peso, lo noto en sus mejillas y en sus manos, cuando se pesó en la báscula está indicaba unos cinco kilos demás; Jimin quiso desmayarse. Había vivido de su apariencia hasta ahora, era un artista amado sobre todo por como lucía, todos le decían que parecía un muñequito, o un ángel; incluso su esposo le recalcaba lo lindo que era siempre y perder aquella esencia suya era perderse a sí mismo, o eso es lo que creía.

Pronto tomó cartas en el asunto, dejó de atragantarse con los antojos extraños que tenía, dejo de comer pan y dejo los lácteos, no podía volverse feo porque Jungkook lo dejaría de querer. Para su tortura, se encontró con un blog de omegas que habían pasado por el embarazo y muchos de ellos comentaban como sus parejas habían perdido el interés por ellos, algunos contaban que sus parejas les habían engañado durante su gestación porque ya no se sentían atraídos a ellos; y eso causo un revuelo en la cabeza de Jimin en donde no dejo de pensar que aquello le podría pasar.

Estaba inseguro por su nueva apariencia, subiría aún más de peso durante los siguientes meses y su cuerpo cambiaría drásticamente, el pensamiento de Jungkook dejando de verle como ''su precioso omega'' inundaba su insegura cabeza y lo único que podía hacer era llorar.

Llorar y llorar, Jungkook era guapísimo, era alto, tenía buen porte y era todo un caballero, cualquiera sería afortunado en tenerle a su lado, sabía que la gente miraba a Jungkook, sabía que las personas estaban atraídas a su físico y en cuanto él comenzará a ponerse más redondo las personas comenzarían a preguntarse por qué estaba con un omega tan poca cosa, o era lo que Jimin se decía mientras lloraba recostado en su cama.

Al llegar de un agitado día de ensayo lo que menos esperaba encontrarse era un Jimin llorando a mares en su cama matrimonial, pero ahí estaba, hecho una bolita mientras sollozaba. Su cuerpo se movió por sí solo al ver a su omega en posición tan deprimente; se tiró al piso de rodillas para sostener el rostro de Jimin y saber el porqué de aquellas pesadas lágrimas.

"Corazón, ¿Qué pasa?'' Acarició sus mejillas limpiando sus lágrimas.

"J-jungkook.'' Sollozó aún más, quitándose del toque de su alfa y escondiendo su rostro entre sus manos.

"Jimin ¿Qué pasa? Por favor habla conmigo, me preocupas."

"¿Me dejaras de querer?'' Susurro aun escondido entre sus manos.

"¿Qué? ¿y por qué haría eso? ¿Por qué te dejaría de querer, corazón?''

"¡Por qué!" Se sentó en su lugar, limpiando sus lágrimas. "¡Porque me pondré feo y gordo, tu dejaras de quererme!"

Jungkook solo se rio.

Comprendía las inseguridades de Jimin, sabia que pasaba por un gran cambio hormonal y por muchos más cambios en su cuerpo, pero él jamás podría dejar de quererle; pues ni en el más frío de los inviernos que pasaron le dejo de amar, no le dejaría de querer en su tan cálido verano. Era imposible.

Pero Jimin no lo tomaba así, la risa de Jungkook era una burla a su pena, por eso lo golpeó, nada fuerte o subido, le golpeó el pecho y jalo el cabello por burlarse de él.

"¡Perdón!" Grito Jungkook.

"No te burles." Susurro aun llorando y aun sosteniendo el cabello de Jungkook. "Me vas a dejar, por eso te burlas."

"¿Por qué te dejaría, amor? Eres mi vida, no puedo seguir si pierdo a mi vida entera." Se subió a la cama para sentarse al lado de Jimin. "¿Qué pasó? ¿Por qué comenzaste a llorar?"

"Porque...porque estoy gordo y pronto comenzaré a engordar mucho más, tu dejaras de verme atractivo y me dejaras, yo-yo tengo miedo de que eso pase. No me dejes Jungkook, dejaré de atragantarme de chocolate."

"¿Por eso dejaste de comer?" Hizo una mueca, pero rápido se le borro porque ahora su prioridad era consolar a su omega.

Así que envolvió sus brazos en Jimin, lo atrajo a su cuerpo mientras repartía besos sobre su rostro, limpiaba sus lágrimas secas con su mano y plantaba un beso en el lugar.

"Me vas a dar un hijo, Jimin, jamás dejaría de verte atractivo por eso." Beso su nariz. "Eres el amor de mi vida, solo si muero podría alejarme de ti y creo que ni así." Soltó una risilla. "No vuelvas a pensar en eso, eres el omega más bonito que mis ojos pudiesen ver, me vas a gustar siempre y como sea."

"¿En serio?"

"En serio." Sonrió. "Te amo, Minnie."

"Yo también te amo."

Y se besaron, en sus labios Jimin encontró todo lo que necesitaba; seguridad, amor y deseo. No tendría porqué preocuparse nunca jamás, en los toques de Jungkook encontraba la adoración que sus dedos le susurraban. Estando a su lado sabía que era amado, sin importar que.

holi holi

hoy habrá maratón de no se cuantos capítulos :3 

perdón por la tardanza y gracias por esperar y leer esta historia <3