Los sábados sin tí son más fríos, no podemos ir al cine juntos. Echo de menos tu fragancia a menta y la manera que tenías de arrugar tu nariz al reír. Estoy en un vacío en el que solo visualizo sogas y pastillas y no sé si podré aguantar más. Mi alma de poeta empedernido se agota poco a poco y ya apenas tengo fuerzas para pensar palabras. Ojalá pudieras volver, ah, espera, no quieres. Nadie nunca quiere regresar a mí, Isabel.
___________________________
Éste es el penúltimo "capítulo" de la novela... estoy ansioso por llegar al domingo.
ESTÁS LEYENDO
Café helado. [Historia corta (y rara)]
Cerita PendekLe manda cartas a Isabel todos los días desde que le abandonó. Desde que se fué la única mujer que ha querido. Todos los derechos reservados.