Intruso.

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Si alguna vez hice algo malo en la vida hoy se la estaba cobrando. En un segundo se me vinieron a la cabeza todas las cosas en que podría terminar esa noche, ningúna era positiva para mí ni para mí relación con Shohei, pero como quien dice "al mal tiempo buena cara" ya vería como podría tratar de ajustar la situación. Tío Miggy noto que los veía con cara de estupefacción y se acercó a mí antes que Shohei notará mi presencia.

—Hola, mi niña. Dios te bendiga, lo invité pero de tú parte y se que hoy se verían, créeme que no me agradaría del todo que estuvieran en una casa solos y viendo "películas" estaré viejo pero yo me actualizo en la onda de los chamos. Finge ante él que sí sabias que vendría y por tus papás no te preocupes que yo me hago cargo de eso.— Dijo todo en menos de 1 minuto, le metió nitro al cuento.

Estaba aún más sorprendida por como planeo todo y me preguntaba ¿Cómo carajos se había enterado? Me dejó fue tiesa, ¿Tío Miggy estaba detrás de todo o qué? No sabía que pensar.

—Luego me tienes que explicar algunas cosas.— Dije.

—Ay, Isabella Carlota del Carmen Briggs Tovar. Explicaciones son las que me debes tú y no te las estoy pidiendo, a ver ¿Por qué ibas a estar tu en la casa del muchacho, que iban hacer? Yo también tuve tu edad y tú sabes que por más que sea buen muchacho "hombre no es gente" y punto.— Dijo.

Podría pensar que estaba un 80% de acuerdo a qué saliera con Shohei, pero mantenía lo celos.

—No seas malpensado, no todo el mundo piensa solamente en eso ¿Ok? Es solo que no íbamos a estar tranquilos en público y ya.— Dije sinceramente.

Claro vale, es que por mi mente no pasaba ir hacer otra cosa, yo soy una muchacha decente de su casa que negaría así sea un besito en el cachete.

—Bueno, anda a saludarlo que se perfumó y todo, solamente para tí.— Riéndose hasta más no poder. —Va es con todo pues.— Dijo.

—Bueno, no me negaría.— Dije sin darme cuenta entre risas. —¿Lo pensé o lo dije? Perdón tío lo estaba pensando y lo termine diciendo.— Dije.

A tío Miggy se me fueron las ganas se reírse y se quedó serio. —Ay Isabella mucho cuidado.— Dijo y llegaron algunas personas hablar con él.

Fuí a buscarlo como había dicho tío Miggy y no lo encontraba, a lo lejos pude divisar a mis padres y al parecer ¿Estaban hablando con él? Dios mío, está noche sería de sorpresas absolutas. Entonces, me acomode las bobbies en su lugar, me peine y caminé diciendome a mí misma "que sea lo que Dios quiera".

Lo ví, él me vió. A penas nos vimos sentí mil sensaciones positivas, sentí un nerviosismo apoderándose de mí, sentí las famosas mariposas aleteando en mí estómago, lo sentí a él.

Y se sentía tan bien.

—Bella, ¿cómo estás?— Dijo él sonriente frente a mis padres, los cuáles que no se veían incómodos ni molestos con su presencia, no es que crea que deban imaginarse que es por mí, pero ¿Qué les habrá dicho tío Miggy? Me moría de curiosidad.

Su postura corporal quedó orientada hacía mí lo que me hizo pensar "your body language speak to me." Estaba por responder sonriente cuando alguien me interrumpió de la nada.

—Yo la veo bien, bien casada conmigo en un futuro.— Dijo Pablo apareciendo de la nada.

A mis padres si les hizo gracia su comentario, me molestaba lo egoístas que eran conmigo y tan solo de pensar que pretenden y algún día pueda estar con Pablo siendo un hombre tan de bajo valor.

—¿Estás comprometida?— Preguntó Shohei serio.

—Jamás estaría comprometida con un tipo como Pablo.— Dije seca y se formó un nudo en mi garganta porque me dolían las acciones de mis padres.

Home Run / Shohei OhtaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora