One shorts Good omens

I will survive

Au patinaje sobre hielo

Au humanos

los patinadores se movían por la pista, la música resonaba en los alrededores a un volumen alto, tanto que si cerrabas los ojos y te dejabas llevar por la música, puedes sentir tu alma brillar y moverse sin permiso, una sensación indescriptible que solo puede llenar los artistas o afortunados de crear melodías que puedan hacer brillar hasta la más oscura vibra de un ser humano.

Aziraphale siempre iba a las pistas de hielo artistico a observar, adora ver a los deportistas moverse y crear hermosas y precisas obras de arte usando solo su cuerpo y un gran sentimiento que se mezclan en una profunda admiración de los que los rodean.

nuestro peliblanco siempre le interesó este deporte y intento practicarlo una vez, y no voy a mentir, lo hacía muy bien, era la envidia de sus compañeros y sentía las miradas de todos en el cuando entraba a la pista, se sentía orgulloso. Lastima ese sentimiento no duró mucho, cada persona que lo observaba se reía de su peso y forma su blanda y manipulable de ser, sus compañeros envidiosos recordaban cada defecto de él sin piedad cada vez que tenían la oportunidad y la gota que derramó el vaso fue cuando la única vez que Aziraphale se equivocó en un paso terminó cayendo al suelo, el lugar se inundó de risas y abucheos juntos con palabras crueles e insultos. Nunca más volvió a patinar.

habían pasado unos dos años desde ese incidente y aun el pueblo recordaba a Aziraphale como el gordiflón que intento patinar, Aziraphale no salía de su librería si no fuera para comer o ir a la pista.

-oye Aziraphale que haces aqui, no me digas que vas a patinar?!- dijo Gabriel junto con unas risas burlonas rodeado de sus compañeros

-no Gabriel.. solo vine a ver la pista un rato.. no pienso molestarlos más-

-que bueno, no sea que vayas a asustar a los visitantes o turistas, porque no mejor vuelves a tu librería y no vuelves aqui nunca mas?, asi dejas de contaminar este lugar-

-no, peor, ¿y si asustas a los patinadores?, los visitantes te aguantarán, pero los verdaderos profesionales dejarían el deporte al ver que personas como tu se acercan a lugares como estos- dijo Uriel con una sonrisa burlona mientras buscaba a los alrededor de Aziraphale para ver si este traía patines para destruirlos

es normal que lo traten asi, en Tadfield donde es un lugar turístico e importante por sus altos centros deportivos en donde el patinaje no era lo de menos obvio que quisieran eliminar toda "molestia" del lugar.

-enserio perdonen por la molestia pero no me pueden sacar de aq- fue interrumpido por una alta música que llenaba el lugar y las luces apuntaban hacia la pista de hielo donde un patinador bailaba y se movía a la melodía de la música.

Aziraphale casi cae de cara al verlo, era hermoso, con sus mechones rojos y su delgada figura, con un elegante traje negro que rodeaba toda su silueta, junto a unas gafas negras que no se caían ni movían a sus movimientos bruscos y sin quitar su forma de patinar y bailar sobre la pista. Era casi tentador ver algo así.

rápidamente la gente se acercó a verlo parece que no solo el comparte esa opinión de le extraño, era como ver un ángel bailar, un ángel que con sus movimientos contaba una trágica o bella historia que conmoverá a más de uno. Un ángel caído que contaba su historia en un baile.

la función fue corta pero para él parecía una eternidad, nadie sabía quién era el patinador pero cuando acabo estallaron en aplausos y cumplidos llenando el lugar de una vibra alegre y armoniosa.

-wow! eso fue hermoso! De donde eres? Eres profesional o solo aficionado? Lo haces genial!!-

-demasiadas preguntas- dijo el pelirrojo mientras se sentaba en los asientos comenzando a quitarse los patines notando rápidamente la curiosa mirada de un peliblanco sentado a su lado