𝘚𝘦𝘨𝘶𝘯𝘥𝘢 𝘛𝘦𝘮𝘱𝘰𝘳𝘢𝘥𝘢 𝘥𝘦 "𝘔𝘺 𝘛𝘪𝘮𝘦 I𝘯 𝘠𝘰𝘶"
Si no has leído la Primera, te recomiendo hacerlo 😉Puedes encontrarla dentro de mi perfil.
°Genero: Romántico, Lemon Hard.
°Pareja Principal: KOOKV (Jeon JungKook & Kim TaeHyung).
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Se sentía tan perdido.
Perdido en su besos, perdido en sus caricias, en la textura de su piel, en su aroma único. Sus brazos eran su lugar seguro, lo supo siempre, lo sabía ahora.
Lo afianzó contra su cuerpo, ambos enredados entre las mantas, ni siquiera habían necesitado de estas. Sus cuerpos brindaban el mejor abrigo para el otro. El nuevo día se anunciaba ya con escasos rayos de sol que apenas lograban colarse entre los edificios más altos.
JungKook suspiró, cerró los ojos y hundió su rostro en la nuca de TaeHyung, aspirando el delicioso aroma de su cabello, así pues sintiendo como rodeaba su cuello con su brazo libre y gemía para él incansable su nombre mientras, por incontable vez en la noche, lo hacía suyo una vez más. Con esa bella vista de la salida del sol a través del gran ventanal, teniéndose a ellos mismos y toda esa maraña de sentimientos y sensaciones inundándolos, no podía pedir nada más, nada mejor.
El momento era perfecto, la noche había sido hermosa. JungKook sentía devoción por él, tal que podría seguirlo a ciegas ahora sí pudiese. Plantarle un jodido trono sin que siquiera se lo pidiera. Cada vez se convencía más de que le amaba con una intensidad desbordante, con una pasión allanadora.
Cada vez que se hundía en su interior y escuchaba su nombre ser pronunciado, sus manos buscando de él, sus labios también; perdía, perdía de la mejor forma. No conocía nada mejor que estar allí, con él.
Decirle "Te Amo" ya no era suficiente para él, ojalá existiese algo mejor que eso, solo podía amarlo de esa manera, demostrárselo a cada momento, con esa devoción única que crecía desde su pecho y que estaba seguro alcanzaría para los dos.
Alzó su pierna hasta casi unirla con su pecho para tener un mejor ángulo y él se lo permitió. La sensación fue subliminal, avasallante. Besó trás su oreja y le susurró lo bien que se sentía mientras se perdía entre la cremosidad de sus abultados glúteos.
Tae se hundió más si se podía contra su pecho, disfrutando de su magnífico calor, del cobijo que le producía encontrarse entre sus brazos. De esa paz poderosa que ahora lo envolvía al saber que le amaba, es como si todo hubiese caído al fin por su propio peso y en su lugar. Ya no podían evitarse, ya no podían hacer como si no se conocieran y jamás haya existido nada entre ellos, porque era evidente que más que llamas ardían entre ambos. Mantenían arraigada una gran pasión que solo fue acentuándose más al pasar de los años.
Sus miradas no mentían, sus respiraciones, mucho menos sus besos y sus cuerpos unidos. Encajaban tan bien, sus puntos débiles seguían allí, nada había cambiado solo mejorado. JungKook seguía conociendo su cuerpo, seguía sabiendo con claridad donde tocar, qué botón presionar en él para encenderle y hacerle disfrutar de aquella manera.
Lo despertó en la madrugada con tiernos besos, con suaves caricias en su espalda y piernas, besando su nuca, sus hombros y espalda, comprendió sus deseos y se dejó hacer después de todo él mismo jamás tendría suficiente, el ansia crecía más y más. Sus cuerpos, no solo sus corazones, se habían extrañado.
