❂⊱• ══ ❦DÉCIMO TERCERO❦ ══ •⊰❂

446 47 17
                                    

Faltaba nada para la pelea, así que Tae se escapó de su camerino y equipo. Buscó aquel pasillo que daba hacía la otra área donde supuso estaría JungKook junto con su equipo. Había mucha gente por los corredores, yendo y viniendo sin cesar.

Tenía miedo de que alguien le viese por allí y lo señalará de que allí no era su área, de todos modos los pocos miembros de staff que se encontró ni atención siquiera le pusieron. Cada quien hacía su labor y se notaban apresurados pues aquella gran pelea estaba a minutos de comenzar, los nervios consumían a todos, incluso a él mismo, pero no podía dejar de pensar en aquel pequeño momento.

Al llegar al camerino que indicaba el quipo adverso, alguien salía de allí, había mucha gente dentro por lo que pudo notar pero agradeció infinito que JungKook quién se encontraba  sentado sobre un banco hidratándose, al fondo de la habitación, le havía visto antes que la puerta se cerrase.

Dejando de inmediato  su bebida de lado, miró a todas partes y se alzó de su lugar caminando a la puerta.

—JungKook —Le llamó Suga desde algún lugar del cuarto, por los que pudo escuchar Tae.

—Solo un momento, ya vengo —Le anunció el pelinegro y enseguida Tae lo voy salir y cerrar de trás de si. El menor entonces se encaminó más adelante  por el pasillo, donde unas cortinas negras, las atravesó con JungKook siguiéndole de cerca y una vez bajo la obscuridad y la privacidad de las mismas; Jeon le alcanzó, lo pegó a la pared y le comió la boca con ansia mientras lo enredaba entre sus brazos. TaeHyung entrelazó sus manos en su cuello y correspondió al demandante beso que no sabía, había necesitado tanto.

Se besaron con abstinencia, sus labios abrazando los del otro sin descanso, como si hace unas horas no lo hubiesen hecho. Cómo si no hubiesen hecho el amor toda la noche. TaeHyung deseó estar en otras circunstancias y lugar, su cuerpo ardía de mera tentación por él, pero lo único que podía ofrecerle por el momento era aquel beso.

Sus pulmones comenzaron a doler en demanda por la falta de aire, así que tuvieron que separarse, agitados, con los labios hinchados y deseosos por el otro. Se miraron a los ojos aún en la obscuridad.

—Solo quise pasar a desearte buena suerte —Musitó Tae con la voz más ronca de lo normal, haciendo electrificar deliciosamente el cuerpo del mayor, quién recargó su frente sobre la de él.

—Gracias, tigre, necesitaba más este beso que cualquier otra cosa —Tae sonrió y se miraron durante unos segundos.

—Tengo que irme —El azabache asintió.

—Esto no acaba aquí, espera por mi esta noche —El muchacho asintió y se acercó para dejar un tenue beso sobre sus labios.

—Te veré luego —Le dijo dedicándole una última mirada cuando le dejó ir y JungKook le miró atravesar los telares negros para  perderlo luego de vista a lo largo del obscuro pasillo.

De regreso a su camerin,  BaekHo le dedicó una leve mirada y Tae supo que sabía a dónde había ido. Pero no podía importarle menos, ya habían hablado de cualquier forma. Se acercó a él.

—¿Nervioso? —BaekHo negó.

—Ansioso —Corrigió y Tae tragó, iba a decirle que no se tomará nada personal, que solo saliera allí e hiciera su trabajo, que usará la estrategia que de habían molestado en estudiar y dejará los sentimentalismos para después, pero personal de staff entró de repente indicándoles:

—¡Tienen 5 minutos para salir! —Y no hubo tiempo de nada, el entrenador buscó los guantes y se los colocó. Tae no tuvo más que desearle suerte antes de abandonar el cuarto para ir al cuadrilátero.

~*THE TIME About US *~ 𝘒𝘖𝘖𝘒𝘝. Segunda Temporada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora