Tweek despertó, en un nuevo día en ese infierno llamado escuela o principalmente sociedad, no había día en el que no se sintiera observado y juzgado por todos, pero tenía que afrontar esa horrible realidad, por más cruda que sea, al entrar a la escuela, las miradas se clavaron en él, sentía que no había persona que no lo estuviera mirando, pero no en el buen sentido, empezó a sobre pensar las cosas, talvez demasiado.
“Mi cabello estará mal?”
“Mi cara tiene algo?”
“Les dijeron algo de mí?”
“Que estarán pensando sobre mí?”
“Sera que mi ropa está mal?”
Esas y más preguntas taladraban la mente de Tweek, no podía soportarlo, pues al sentirse observado, trataba de actual lo más natural posible, saliendo todo lo contrario por sobre pensar demasiado, en clase, Tweek se sentía observado, juzgado, como si fuera el peor criminal de todo South Park y todos a su alrededor pidieran a gritos que lo metieran a la cárcel por incluso toda la vida o que lo condenen a muerte, escuchaba a la gente murmurar, miraba a la gente observándolo mal, y se ponía tenso cuando escuchaba su nombre o una palabra parecida a su nombre en alguna conversación ajena.
“Escuche mal?”
“Están hablando de mí?”
“Que estarán hablando de mí?”
“Hice algo malo?”“Se estarán burlando de mí?”
Esos pensamientos empeoraban cuando escuchaba a gente reír mientras lo miraban por una fracción de segundos, mucho más si era gente que ya lo había estado observando, sentía que se ahogaba, y por más que tratara de nadar a la superficie para poder respirar, varias manos lo arrastraban a lo profundo, sin darle la oportunidad de respirar ni una sola vez, como si todas se coordinaran para hacerlo sentir despreciable.
Al llegar a su casa, tampoco se libraba, sus problemas subían desde sus pies hasta su clavícula, en sus hombros era donde sentía que había un gran peso que no podía soltar por más que intentaba e intentaba, pero ese peso jamás lo dejaba en paz, solo lo dejaba de sentir por unos minutos cuando iba a dormir, era su único método de consuelo, sus problemas empezaron a afectar su vida normal, dejaba de comer a veces, y otras veces comía mucho, dormía mucho, y otras veces no dormía nada, era tan problemático para su salud y aun así sus padres no se daban cuenta por la poca comunicación que tenían sobre lo que sienten, y porque Tweek, sentía que sus problemas personales serian una carga para sus padres.
Pero, aunque su corazón le pedía a gritos y llantos…
No podía decirle nada a sus padres, se sentía en la obligación de no decirles, guardo sus sentimientos en una caja de acero reforzado con llave, y perdió esa llave en un lugar muy profundo dentro de su cabeza, y la cubrió y perdió sumergiéndola con pensamientos sobre que si lo dijera, sería una carga, y él no quería molestar a sus padres, su relación no era ni la mejor ni la peor, pero sentía que si decía sus pensamientos y sentimientos, sus padres lo verían como una molestia o una carga, y eso lo hacía sentirse aún más atrapado, pues no podía hacer nada, no tenía a nadie a quien poder contarle sus sentimientos, nadie.
Tweek empezó a verse en el espejo muy seguido, le preocupaba que la gente hablara mal de el por su apariencia, trataba de abotonar bien su camisa, fallando múltiples veces, al mirar su reflejo en el espejo, se sentía…Feo, gordo, muerto, simplemente odiaba su físico con toda su alma, siempre había algo que lo molestaba o que considerara un defecto, y siempre que se veía en el espejo del baño, pensaba:
“Desearía tener otros ojos…”
“Debo bajar de peso…”
“Debo aumentar de peso…”
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FUE MI CULPA -Creek- (Craig X Tweek)
De TodoCraig y Tweek terminan por una fuerte pelea desatada por la furia de el azabache Para desgracia de Craig No sabe que pasará a causa de sus desiciones del pasado