ILLICIT AFFAIRS || AEMOND TARGARYEN

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Aenya Targaryen caminaba por la Fortaleza Roja tratando de buscar a su hermano o tío para que la ayudara con su peinado ya que su madre había salido a Dragonstone para atender algunos asuntos respecto con la sucesión del trono algo que su madre venia planeando desde que Meereen se convirtió en su hogar por algo había conquistado las ciudades libres para tener un apoyo mas grande que cualquiera de los posibles reclamos al trono que existían, el trono de hierro era un tema que a Aenya no le llamaba mucho la atención no realmente ya que todo terminaría en guerra no importaba cuanto lo intentaran los dragones no aceptaban respuestas pacificas mucho menos cuando se trataba de quien gobernaría el mundo palabras de la misma Rhaenya.

Su madre era una persona que siempre sabia decir en el momento justo y sin necesidad de ser escuchada con gritos o golpes como era en el caso de los hijos de la Reina Alicent o que los ignoraba malcriándolos como lo era con la princesa heredera Rhaenyra si no que su madre los educaba para ser unos príncipes para el reino que supieran cuales eran sus responsabilidades y lo que el reino esperaba de ellos pero aun siendo niños que necesitaban de diversión de vez en cuando como era en ese momento con Baelon, Aegon, Aelyx y Jacaerys que estaban tratando de poner una de las armaduras que había en el pasillo.

—¿Qué están haciendo?—preguntó Aenya provocando que los cuatro chicos saltaran asustados en su lugar—no creo que algo bueno ya que si no fuera una travesura no se hubieran asustado de esa forma

—Aenya me asustaste—se quejó Aelyx haciendo reír a su melliza—¿que te sucedió?

—te estaba buscando o a Baelon ya que mamá no está y quería saber si me podías peinar—dijo Aenya mirando a su hermano el cual suspiró

—Hela está sola, ella podría ayudarte con tu peinado nosotros estamos algo ocupados Aenya—dijo Baelon haciendo suspirar a Aenya

La niña arrugó la nariz molesta para caminar hacia los aposentos de Helaena ignorando los llamados de su hermano y tío ya que siempre la apartaban de todo lo que hacían algo que le molestaba bastante odiaba sentirse apartada por ellos si se tratara de los hijos de la Reina o los hijos de Rhaenyra no le importaría pero cuando se trataba de Aelyx y Baelon le molestaba bastante sentirse apartada.

—¡Aenya aquí estás! —dijo emocionado Aemond deteniendo a la chica que miró al segundo varón del Rey—te estuve buscando por todos lados, nadie te había visto durante todo el día me preocupe un poco

—estaba buscando a mi mama, pero dijeron que se fue a Dragonstone a atender un problema que sucedió en Meereen así que no he salido en todo el día de mi cuarto porque no tengo quien me peine y sabes muy bien que el color azabache de mi cabello se disimula más con trenzas—dijo Aenya sonriéndole al platinado el cual estaba vestido de verde un color que la platinada detestaba sobre todo cuando la reina una vez le había regalado un vestido del mismo color y su tío Viserys la había obligado a usar—y hoy no tengo ganas de escuchar a los Lores hablar de cómo estoy perdiendo mi color plata