Capítulo 12.

687 112 3
                                    

Chan no tarda en volver con el abrigo del rubio en las manos, acercándose y colocándolo sobre sus hombros con cuidado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Chan no tarda en volver con el abrigo del rubio en las manos, acercándose y colocándolo sobre sus hombros con cuidado.

—Vas a resfriarte si no te abrigas más, ratoncillo. -Las mejillas de Felix se encienden levemente-

—¿Me lo dices tú? Apenas te veo vestir algo más que un suéter y tu chaqueta de cuero.

Chan sonríe levemente antes de tomar el cigarrillo que siempre solía llevar tras la oreja, lo coloca en sus labios y seguidamente saca el mechero de su bolsillo para encenderlo. Y a Felix no debería parecerle completamente precioso mientras acercaba el fuego a sus labios y tomaba una profunda calada, pero lo hacía.

—Yo no lo necesito, pero tú si, ratón. -Dice divertido después de soltar el humo-

—No vas a dejar de llamarme así ¿Verdad? -Habla en un falso tono molesto, porque nunca admitiría en voz alta que en realidad, le gustaba el extraño apodo.-

—No lo creo. -Responde para seguidamente empezar a caminar hasta su coche-

Felix rueda los ojos pero lo sigue, subiéndose a este donde finalmente puede suspirar en alivio cuando el aire acondicionado lo recibe.

Por su parte Chan arranca y una vez más conduce sin apartar la mirada de la carretera, cosa que el rubio agradece mentalmente porque así puede apreciar su bonito rostro sin ser descubierto.

La luz de la luna bailaba sobre su piel, sus ojos se veían increíblemente azules y sus labios rojos solo hacían que Felix quisiera besarlo ahí mismo y en aquel momento. Chan era una maldita obra de arte, alguien que simplemente puedes observar eternamente sin cansarte, alguien que a pesar de su carácter agridulce había hecho a Felix caer más fuerte de lo que debería.

¿Cómo podía sentirse tan perdido por él?

Chan era de esas personas adictivas, una vez lo conocías ya no había vuelta atrás. No puedes ni quieres sacarlo de tu cabeza, y aunque Felix nunca sabía a donde llegaría con él y a pesar de que a veces fuera un idiota, se sentía maravillado de conocerlo.

Porque Chan le hacia sentir algo que nunca antes había sentido.

—Gracias -Felix dice en un murmuro-

—¿Mhm?

—Gracias, por acompañarme y consolarme cuando no tenias porque hacerlo. -Sonríe tímido- Y por, salvarme un par de veces.

Chan suelta un pequeña risa y lo mira.

—Quiero decir, sigues siendo un poco insoportable. -Dice, pero está vez no hay frialdad en sus palabras. Lo dice divertido, con su bonita sonrisa en sus labios.-

—¿Sabes? Es gracioso como no paras de repetir lo poco que te importo, pero no dejas de demostrar lo contrario.

—No sé de que hablas, a mi no me importas en lo absoluto.

Heart cold as blue ice ♡ chanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora