Dalia negra.

40 4 3
                                    


Taylor se encontraba hablando con Karlie frente a la chimenea, el día nublado parecía no tener fin, el sol no se asomaba desde hace días, probablemente desde que encontraron la maleta en el arroyo. 

- Creo que lo hizo el hijo mayor de los Jones, él tiene un motivo para asesinar justamente a un joven de 20 años - dijo Taylor acercándose a Karlie.

- ¿Cuál motivo?- preguntó la ojiverde. 

- no puedo decírtelo, no sé si deba... - Taylor hizo una pausa - Estás trabajando con la policía y si te digo esto saldrá a la luz. 

- ¿y qué hay de malo con que salga a la luz? - preguntó Karlie intrigada.

- voy a quedar como una terapeuta que habla sobre sus pacientes, eso no es ético.

- tampoco es ético guardarle información a un asesino - Karlie hizo una pausa al darse cuenta de algo - ¿dijiste paciente? ¿el hijo mayor de los Jones era tu paciente?

Taylor hizo un pestañeo largo y respiró profundo.

- Si, lo era, pero Karlie no puedo decir nada, él sabe que solo yo conozco esta información, ustedes no pueden arrestarlo sin pruebas concretas y yo no las tengo, él podría asesinarme - Taylor caminó por la sala. 

Karlie lo pensó y quería decirle a Lawrence la información que tenía Taylor, pero por otro lado la pondría en peligro, ¿debería hacerle caso a su cerebro o a su corazón? finalmente se decidió por darle la confianza a Taylor, no la conocía de hace mucho tiempo, pero sentía que la única que saldría perdiendo en esta situación sería ella, buscaría pruebas para encerrar al hijo de los jones y una vez que esté adentro Taylor podría hablar con Lawrence. 

- Entonces vamos a buscar pruebas para inculparlo y luego hablo con Lawrence, me parece bien - dijo Taylor sonriendo un poco.

Karlie le dio un abrazo a Taylor y se percató de que olía muy bien, no sabia si era alguna crema, su perfume u otra cosa, pero le encantaba el aroma dulce que desprendía. El abrazo fue cálido y un poco apretado, ninguna quería separarse de la otra, pero se dejaron ir. Karlie se dirigió a su casa para ver a su hermano y Taylor se quedó sentada en el sofá acariciando sus gatas.

- Hermanita - dijo Caleb al abrir la puerta. - pasa, hice un bizcocho delicioso.

- ¿desde cuando sabes hornear? - preguntó Karlie con una sonrisa burlona.

- Desde que tengo tiempo de sobra - contestó-  oye... esa amiga tuya de la mañana se llamaba Taylor ¿verdad?

- si ¿por qué? - preguntó Karlie sentándose para comer.

- es que cuando dije que la había visto era cierto, no recordaba de donde la había visto, pero ahora lo sé - Caleb cortó el bizcocho. 

- ¿y de dónde se supone que la conoces? - Karlie levantó una ceja.

- ¿tu no la recuerdas? era nuestra vecina cuando éramos niños y un día desapareció, ella era tu mejor amiga y recuerdo haberte visto llorar durante las noches - Caleb le sirvió un pedazo del bizcocho. 

- Pero ella no se llamaba Taylor, Caleb, ella se llamaba Alison Finlay - contestó Karlie con una mirada fría. 

- ella es Alison, estoy seguro de eso, ahora tal vez se llama Taylor, pero estoy seguro que ella es Alison, ella fue la niña que desapareció - Caleb comió un pedazo del bizcocho. - ¡oh! esto está bueno. 

Karlie se quedó pensando en su mejor amiga de la infancia, ella siempre se la imagino viva,  pero no pensó en encontrarla justamente cuando no la estaba buscando y en caso de que Taylor si fuera Alison ¿Dónde había estado? ¿recordará su infancia y lo que le ocurrió? ¿por qué ahora vive en una casa construida en el mismo pueblo de donde desapareció? Karlie conoció a los padres de Alison y habían fallecido hace tiempo, la madre falleció en un accidente automovilístico y el padre fue asesinado hace 10 años de una forma brutal en su propia casa.

"Taylor Swift no puede ser Alison Finlay" - pensó Karlie. 

La noche se vino encima de Arbery y Karlie no podía dormir luego de haber tenido esa conversación con su hermano, pensaba en las similitudes que tenia Taylor con Alison, tenían el mismo color de pelo, de piel y ojos, pero de todos modos una persona puede parecerse a otra, necesitaba navegar por sus recuerdos para obtener algún detalle, le era difícil ya que después de todo la edad que tenia Karlie cuando Alison desapareció era minúscula, solo tenia 8 años y no podía recordar con claridad.

"la mancha de las costillas" - pensó.

Recordaba haberle visto una vez una mancha en las costillas, ese día Alison le había dicho que tenia esa mancha porque en su vida pasada había muerto de un disparo en esa zona, Karlie no le dio mucha importancia, solo se rio y luego jugaron a otra cosa.

Al día siguiente Karlie se levantó y fue directo a la cocina, miro desde su ventana la ex casa de su vecina desaparecida y le invadió la nostalgia, sin embargo, cuando dirigió su mirada a la mesa vio una dalia negra con un papel que decía "no escarbes en el pasado, puedes encontrar demonios" 




No body, no crime.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora