Cap 26: ¿Arreglar las cosas?

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Apenas llegué a mi casa llamé a Samy, le dije que viniera para mi depa, quería verla y pasar un tiempo con ella, quería hablar con ella.

En lo que ella llegaba me tiré a mi cama con la luz apagada, únicamente la luz que venía de afuera y entraba por mi ventana, iluminaba mi cuarto.

Por mi mente empezaron a cruzarse un montón de cosas, no entendía porque me sentía así, era un sentimiento muy raro, un sentimiento que no tenía idea de como controlar.

Me quedé pensando en ella, recordé una bocha de cosas, la vez que nos conocimos, cuando me ayudó con Maria, cuando se preocupó por mis problemas de alcohol y me ayudó con ellos.

No puedo mentir, cuando la conocí me percaté de lo linda que era, pero no tuve tiempo de conocerla y me deje llevar por lo que me dijo Sabrina, eso me hizo perder cualquier tipo de chance con ella.

Samanta es una buena piba, yo la quiero mucho, lo más probable es que lo que siento ahora es a causa de nuestros problemas como pareja, estoy confundido.

-Hola mi amor, ¿cómo estás?- Me saludó Samanta con un beso.

-Bien. Pasa.- No di muchas vueltas, la saludé y nos sentamos a hablar.

Empezamos a hablar de nosotros, yo no quería que las cosas siguieran así, necesitaba aclarar todo, con ella, conmigo, con todo.

(...)

-Samy, yo a vos te quiero mucho...- Samanta me interrumpió.

-Yo sé, vos me lo demostraste, pero no entiendo a donde queres llegar, amor.- Se acercó a mí y me acarició la cara.

Con mis manos baje sus manos delicadamente de mi cara.

-Samy... yo creo que nos tenemos que dar un tiempo, para poder aclararlo todo.- Le hablé todavía agarrando sus manos.

Ella se soltó de mi agarre, cambió la expresión de su cara y me miró fijamente para poder expresar su opinión.

-¿Querés cortar conmigo?- Me preguntó.

-Demonos un tiempo, para pensar las cosas.- Respondí.

-Pero, ¿por qué Iván? Vos y yo estamos bien, yo siento que estamos bien. Iván yo no quiero un tiempo, si vos crees que no te estoy dedicando tiempo, te lo dedico.- Me dijo, no sabía si aceptar.

-Samy, las cosas entre vos y yo no están bien, y yo no puedo obligarte a nada.- Insistí.

-Te juro que voy a dar todo en la relación, pero no terminemos por favor.- Se acercó a mí.

-Dejame demostrarte que te amo Iván.- Me agarró de la nuca y me beso.

Yo le seguí el beso y el ambiente empezó a cambiar. Ella se subió arriba mío, arriba de mi cuerpo que estaba sentado en el sillón de mi casa, y no paró el beso, yo sabía lo que estaba a punto de pasar, no sabía que hacer, pero, me deje llevar.

-Samanta, esta no es la forma de demostrármelo.- Me separé del beso.

-Esta es una de las muchas formas en que te lo voy a demostrar. Hace mucho que quiero esto.- Me volvía a besar apasionadamente.

-Te quiero.- Le dije con la voz entre cortada, ella no me soltaba. Me deje llevar.

Narra Samanta:

Me voy a olvidar de Nico, voy a sacarlo de mi vida, no puedo seguir engañando a Iván. Hoy, estuvimos juntos por primera vez, pero aún así me cuesta olvidar a Nico.

Apenas me fui de la casa de mi novio me fui para la de Nico, teníamos que hablar las cosas, yo iba a dejar todo en claro.

-¿Cómo estas? ¿Podemos hablar?- Lo saludé con un beso en el cachete.

-Si, pasa.- Me hizo pasar.

-¿Qué tenés? ¿Pasó algo?- Me preguntó desconcertado por mi seriedad.

-Si, yo y Iván tuvimos nuestra primera vez.- Le dije.

-¿Qué?- Fue lo primero que salió de su boca.

-Nico, vos sabes que yo y él somos novios.- Le dije.

-Si, pero nada más me sorprende.- Habló tristemente.

-Nico, es mejor que la cortemos acá.- Le propuse que dejemos de hacer lo que hacíamos.

-¿Por qué? No me digas que la pasaste más bien con él que conmigo.- Se acercó a mí, me habló en tono bajo y me miró directamente a los ojos.

-Lo que nosotros tenemos no se va a terminar porque te acostaste con él, vos lo sabes.- Miró mis labios y con el dedo pulgar de su mano, acarició mi labio.

-Se va a tener que terminar, yo no quería que las cosas llegaran así de lejos.- No me aleje de él.

-Estoy re, pero re seguro de que él nunca te va a hacer sentir como yo.- Agarró mis cachetes con sus manos y me beso.

Me gustaban mucho sus besos, pero este, en especifico, se sintió diferente, me gustó muchísimo más de lo común.

Empezó a besar mi cuello, me dijo lo linda que le parecía que era sin dejar mi cuello, mientras que yo me olvidaba por completo de la existencia de mi novio.

Al día siguiente falté a la universidad por culpa de quedarme dormida y despertar nuevamente entre los brazos de Nicolas.

Narra Iván:

Todo esta aclarado, arreglado, no tengo nada que pensar, quiero mucho a Samy, espero la relación mejore.

Ya es lunes estoy en la uni, Samy no vino, me dijo que se sentía descompuesta, ni modo, yo después la pongo al día.

Lo que pasó entre ella y yo ayer fue muy lindo, es un pasó más para la relación.

Entre todas las cosas que pasaron me olvidé de la existencia de Sabrina, ¿qué habrá hecho de su vida? Por su culpa tengo que fingir odiar a una re buena amiga mía, espero solamente sea por un tiempo.

De nuevo me volví a perder, en estos momentos me odio, no perderme en la mirada de ojos verdes como esmeraldas de mi novia, y si hacerlo en... esos ojos color miel, me confunde mucho.

Aunque intento entenderme, no lo puedo hacer, es tan complicado, me voy a proponer hacer mierda las cosas raras que estoy sintiendo, para no... confundirme más.

Narró yo:

Hoy no vino Sabrina, mira vos, yo ya estaba lista para volverme actriz profesional, pero boe, capaz se sentía mal, espero mañana venga, quiero seguir viendo que chamuyo trucho nos tira ahora.

Amantes enemigosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora