-MY INVICIBLE LOVE- ♡ _carlukas_ ♡

⁸

"DÍAS DE INVIERNO QUE SE SINTIERON COMO VERANO"

Para Lukas el camino desde que salieron del salón y se dirigieron a la enfermería, se le hacía eterno, cargando a Alex con sus brazos tratando de distraerlo para que el dolor de su mano no invadiera la mente del menor.

Caían gotas de sudor que salían de la frente del pelinegro, su respiració se aceleraba muy rápido y solo seguía el camino que le indicaban aquellas flechas rojas, esperaba que esas flechas lo llevarán con algún tutor o a la enfermería, pues apenas eran nuevos y no sabían moverse por la escuela.

-L-Lukas, no siento mi mano-

Mordiendo sus labios con demasiada fuerza logrando así abrirse y que empezará a salir demasiada sangre.
-Lo se pequeño, ¿Puedes resistir un poco más o no?-

Acurrucando si cabeza en el pecho del mayor, cerraba sus ojos, haciendo presión para tratar de dejar de sentir dolor.
-Me duele~-

Cada minuto, segundo que pasaba era terrible para el pelinegro, en esa situación no podía controlar sus emociones y ya no sabía si sentía enojo, miedo o tristeza, su atención estaba fijamente en el menor y solo quería que estuviera bien, no soportaba la idea de que por dejarlo con el otro idiota de Tadeo, ahora estuviera corriendo en busca de alguien.

Ya era muy tarde para detener el sangrado, caían una tras otra gota de sangre por donde pasaban iban dejando un camino de puntos rojo, mientras más lejos estaban menos notorias eran las gotas y por lo tanto, entre más cerca estaban más rojas y grandes eran aquellas gotas.

Lukas decidio dejar de caminar y lentamente bajo a Alex para que se sostuviera en el suelo, el menor no sabía en que pensaba aquel chico más alto que el por unos cuantos centímetros, el dolor de su mano iba aumentando cada vez más, hasta el punto que Alex se hincó delante de su mayor y apretaba su mano con bastante fuerza para tratar de detener aquel sangrado.

-Alex- Incandose enfrente del menor y alzó con su mano la barbilla del chico con lentes.

-Muéstrame tu mano peque-

Alex escondía su mano bajo su saco vino y manchando su chaleco gris, no quería que Lukas viera su mano, sabía perfectamente que si la veía iba a entrar en otra crisis como paso anteriormente.

Pero cuando Alex le mostró la mano a Lukas, su acción hizo que en vez de que se asustara o se preocupara, se sentía calmado casi dejando de sentir dolor.

Lukas al ver la mano de Alex se sorprendió bastante al ver qué unos vidrios tan pequeños ocasionaron que la piel blanca del menor se tornara roja y empezará a salir sangre por aquellas cortadas.
El mayor se quitó su saco y chaleco demasiado rápido, solo tenía puesto la corbata y camisa blanca de aquel uniforme, aunque no duró mucho con la camisa blanca, pues también se la había quitado dejando notar un abdomen marcado y pocas pecas en su pecho que se distinguían por su piel extremadamente blanca.

Alex se quedó sin palabras al ver la mitad del cuerpo de Lukas destapado, pero se despabilo cuando escucho como el mayor rompía la camisa que se quitó en una tira demasiado larga, este acto seguía dejando a Alex con la duda de saber por que rompía su camisa.

-Pequeño préstame tu mano- Estirando su brazo y abriendo su mano para que Alex tuviera aún más confianza y seguridad en Lukas.

-Esto te va a doler un poco, me dices cuando pare- Agarrando suavemente la manita de Alex, junto la tira de camisa que había roto.

El menor solo asintio con su cabeza, quería que Lukas viera que era valiente y no le dolería nada, pero su mirada lo delataba, en esos ojos se podía ver el miedo que sentía apesar que se sentía seguro con Lukas a su lado.

El pelinegro empezó a vendar la mano del otro pelinegro, lo hacía con máxima suavidad y gentileza, no quería lastimar aún más a Alex.

-P-Para- Agarrando la mano de Lukas que sostenía la suya, el menor había empezado a llorar por aquel dolor que era insoportable y sus labios se tronaron demasiados rojos por estarlos mordiendo.

-Peque ya me falta poco para terminar de vendar tu mano-

-P-pero me duele m-mucho- Dirigiendo su mirada con aquellas lágrimas que caigan de sus ojos rojos e hinchados.

-Entiendo tu dolor, pero no quiero que te desangres aún mas- Viendo a Alex tratando de darle seguridad nuevamente para poder terminar de vendar lo.

Pasaron varios seguros, pero al final consiguió que Alex soltara su mano y que Lukas siguiera vendando.

Cuando termino de vendar lo una señora con cabello café claro y unos lentes circulares, salió de una aula que estaba justo enfrente de donde se encontraban los 2 pelinegros.
Aquella mujer se sorprendió bastante al ver a Lukas sin camisa, pero su atención se dirigió de inmediato hacía el menor que tenía lágrimas que habían caído y que querían caer de sus ojos, también noto su mano vendada con la camisa rota, pero está se iba enrojeciendo por la sangre y bajo de ellos había un pequeño charquito de sangre.

-¿Qué le pasó?- Agachándose y agarrando la mano de Alex, el menor se hizo para atrás para tratar de que la señora no lo tocará, pero Lukas lo abrazó y empujó levemente para que aquella señora checara su mano.

-La historia no importa- Alzando a Alex y manteniendolo de pie, mientras la señora también se paraba y se dirigía hacia la aula que era la enfermería.

-Entren por favor, necesito parar el sangrado lo antes posible si no quieres que tu amigo se desmaye- Sacando unos guantes de plástico azules de su bolsillo de la bata blanca que tenía puesta la señora y dejando entrar a los chicos tras suyo.