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-Narra Anko.-

Me levanté temprano y, cómo todos los días, tuve que levantar a mis hermanos y también preparar el desayuno.

- Anko, acordamos que hoy Sēn hacía el desayuno. - me dijo con tono serio mí hermano mayor, Harumi.

- Oye! Tu nunca haces nada - le replicó Sēn mientras corría su silla para sentarse.

Haru y yo nos reímos mientras ellos peleaban, la verdad no duraron mucho, puesto a que Harumi recibió una llamada de Hanma.

- Qué sucede, Ham?

- "Kazutora está en la correccional y, con Kisaki y los demás, decidimos unirnos a la Toman."

- y eso a nosotros qué?

- "Y, obviamente tienen que venir a presentarse, no queremos quedar mal con Mikey."

Yo escuchaba la conversación atentamente, la verdad nunca me había agradado la idea de que Hanma diera órdenes, pero, por primera vez, tenía interés en seguir sus reglas.

- Bien, nos vemos más tarde.

- "Bye."

Harumi cortó y guardó su teléfono para luego mirarnos.

- Vamos a ir esta tarde.

- Okey - respondimos al unísono.

Ya era por la tarde y mis hermanos y yo habíamos quedado con Valhalla en el centro de la ciudad, puesto a que Kisaki y Hanma habían "desvalijado" el antiguo lugar de Valhalla

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Ya era por la tarde y mis hermanos y yo habíamos quedado con Valhalla en el centro de la ciudad, puesto a que Kisaki y Hanma habían "desvalijado" el antiguo lugar de Valhalla.

Todos hablaban enojados, algunos felices y otro asustados. Al parecer, desde el Halloween sangriento, todos le tenían miedo a Mikey.

Yo solo me limitaba a escuchar con atención y una que otra vez mirar a los costados del callejón.

- Buenas tardes~

Se oyó la chillona voz de Hanma.

- Cómo ya sabrán, estamos aquí reunidos para darle una buena impresión a Manjiro Sano, alias Mikey.

Todos empezaron a hablar más fuerte.

- Silencio! - esta vez era la dura voz de Kisaki la que retumbaba.

Todos quedaron en completo silencio y Kisaki prosiguió.

- Hoy es un gran día para nosotros, y espero que no lo arruinen - fulminó con la mirada a varios pandilleros.

Todos hicieron una estilo de reverencia (yo solo agaché la cabeza) y gritaron "si, jefe."

- Entonces, vamos.

CASCABEL- Manjiro Sano.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora